Morir en Brasil por el color de la piel
La tasa de homicidios de adolescentes negros o mestizos triplica a la de los blancos en el pa¨ªs latinoamericano, seg¨²n el ¨²ltimo informe sobre violencia hacia menores de Unicef
El riesgo de ser asesinado en Brasil se multiplica por tres para los negros y mestizos. Este es uno de los datos que recoge el informe de Unicef que, bajo el t¨ªtulo Una situaci¨®n habitual: violencia en las vidas de los ni?os y los adolescentes, muestra las situaciones de violencia dom¨¦stica, callejera y escolar a la que se enfrentan menores en todo el mundo. "La gran desigualdad econ¨®mica, la falta de inversi¨®n en la adolescencia y la alta circulaci¨®n de armas en nuestro pa¨ªs son los principales motivos para esta diferencia racial", explica al otro lado del tel¨¦fono desde?S?o Paulo la experta en protecci¨®n a la infancia de Unicef, Fabiana Gorenstein.
Brasil es uno de los cinco pa¨ªses del mundo que, sin estar atravesando una guerra, posee la tasa de homicidios adolescentes m¨¢s alta (59 muertes por cada 100.000 habitantes). En lo m¨¢s alto de esta clasificaci¨®n le acompa?an otras cuatro naciones latinoamericanas: Venezuela (97), Colombia (71), El Salvador (66) y Honduras (65). El informe recoge que la mitad de las muertes violentas de j¨®venes entre 10 y 19 a?os que se registraron en 2015 sucedieron en la regi¨®n latinoamericana y caribe?a, a pesar de que estos territorios comprenden tan solo un 10% de la poblaci¨®n adolescente global.
La organizaci¨®n se desplaz¨® en 2015 a Fortaleza, una de las zonas m¨¢s peligrosas en la actualidad para los adolescentes, con objeto de realizar una serie de entrevistas y obtener informaci¨®n sobre el terreno sobre los homicidios de j¨®venes.?"La mayor parte de la guerra contra la droga se concentra en los suburbios de las ciudades, que es donde m¨¢s cantidad de poblaci¨®n negra o mestiza vive. As¨ª que son los que m¨¢s sufren sus consecuencias, incluida la muerte", se?ala Gorenstein. "Claramente conclu¨ªmos que el lugar de nacimiento influye en el desarrollo de la infancia, que hay racismo y que es necesario poner el derecho a la vida sin violencia de los ni?os en el centro de la agenda", puntualiza.
Los menores sufren malos tratos en muchas ocasiones por parte de sus familiares, tutores o personas al cargo. Seg¨²n el documento de Unicef, un 75% de la infancia en todo el mundo est¨¢ sometida a alg¨²n tipo de castigo violento por parte de sus cuidadores y un 63% de los ni?os fue f¨ªsicamente agredido en el ¨²ltimo mes, seg¨²n datos recogidos por la organizaci¨®n de diversas bases de datos nacionales.
Brasil cuenta desde 2014 con una legislaci¨®n que proh¨ªbe totalmente los castigos f¨ªsicos en el ¨¢mbito dom¨¦stico y escolar. Desde Unicef Brasil admiten que eliminar la punici¨®n corporal como parte de la crianza es una cuesti¨®n cultural y que el pa¨ªs est¨¢ a medio camino en ese proceso. "Es necesario crear programas educativos con las familias y escuelas para que tengan informaci¨®n sobre c¨®mo estabecer l¨ªmites sin necesidad de castigo f¨ªsico. Obviamente, el marco legal fue un logro". En el resto del mundo, la situaci¨®n es desalentadora para los ni?os en edades m¨¢s tempranas, porque solo el 9% de los menores de cinco a?os viven en pa¨ªses donde los castigos f¨ªsicos en casa est¨¢n prohibidos, lo que deja a unos 607 millones de ni?os sin ning¨²n tipo de protecci¨®n legal ante el maltrato.
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