La serpiente me la quedo yo

Semana grande para los animales de compa?¨ªa, aunque no, imagino, para los pavos y los centollos, con la Navidad a la vuelta de la esquina. Est¨¢ ya en marcha la ley para cambiar el estatus de las mascotas y que dejen de ser consideradas bienes inmuebles, objeto de embargo, por ejemplo. Y eso que no he visto nunca que se te lleven el gato por no pagar multas de aparcamiento. Se iban a llevar el gato y tambi¨¦n unos buenos ara?azos.

Una de las consecuencias de la nueva legislaci¨®n es que ahora su bienestar, el de los animales, el periquito, sin ir m¨¢s lejos, ser¨¢ valorado en caso de divorcio. Eso quiere decir, pasando de lo general a lo particular, que tengo todos los n¨²meros para que me endosen la serpiente si me voy de casa. Ella no dar¨ªa su opini¨®n ¡ªtampoco creo que la medida legal sea tan avanzada como para que se escuche en los tribunales la voz de una serpiente (que por otro lado no va m¨¢s all¨¢ del "Ssssh")¡ª. Pero no tengo la menor duda de que llegado el caso, preferir¨ªa marcharse conmigo. Tambi¨¦n es verdad que de casa nos echar¨ªan a los dos juntos.

La serpiente sin duda estar¨¢ siempre mejor conmigo. Soy el ¨²nico que la entiende. No voy a presumir de haberme ganado su afecto, que por lo dem¨¢s es relativo en los reptiles, pero soy yo quien se ocupa de cambiarle al agua y suministrarle ratones, y esas cosas unen.

Lo que me lleva a preguntarme por el estatus jur¨ªdico de los roedores. ?Qu¨¦ voy a hacer si los que adquiero prefieren (comprensiblemente) quedarse en casa en lugar de venir con nosotros? Qu¨¦ duro es cuando se deshace una familia...