El arte de la controversia
La pol¨¦mica por la retirada de ARCO de una obra de Santiago Sierra, el armario de Carmen Lomana y los pelos de Puigdemont y Anna Gabriel que han marcado el 'proc¨¦s'
Si fuese necesario, entender¨ªa que Marta S¨¢nchez se convierta en la autora de la letra del himno nacional. Como fan, considero que ella ya ha contribuido no uno sino dos himnos de nuestra generaci¨®n: Desesperada y Soy yo. ?Qui¨¦n no ha bailado Desesperada? ?Cu¨¢ntos gays y madres divertidas no se han plantado a cantar a todo pulm¨®n lo de ¡°soy yo la que sigue aqu¨ª¡±? Ahora le toca al himno nacional y al ser un himno nacional sin letra, S¨¢nchez est¨¢ en todo su derecho de dedicarle un texto que mezcla patriotismo con historia personal, que es como entendemos casi todo en las culturas latinas y apasionadas. Eduardo Mendicutti est¨¢ desesperadamente en desacuerdo pero respeta con entusiasmo la libertad de expresi¨®n y reconoce la repercusi¨®n comercial que ha conseguido Marta.
Pero, dejemos todo eso a un lado y celebremos lo importante: Marta ha vuelto con capa y mono color Ciudadanos y un tuit de apoyo de Mariano. Y tendr¨¢ una gira espectacular por todo el pa¨ªs. Incluyendo Barcelona.
Y, quien sabe, a lo mejor esa gira llegue a Suiza y acudan a verla la infanta Cristina y la mism¨ªsima Anna Gabriel, la pol¨ªtica independentista ahora fugitiva en Ginebra tras burlar al Tribunal Supremo suavizando su look radical. Ha abandonado su ic¨®nico "flequillo a la taza" y sustituido los piercings por unos aretes post feministas. En realidad siempre fascina que alguien ponga a prueba a cualquier autoridad, pero mi verdadera fascinaci¨®n esta en el papel que tiene la ciudad de Ginebra para los espa?oles. Estoy convencido que en Ginebra se habla tanto espa?ol como alem¨¢n o franc¨¦s. Las controvertidas estrellas de los casos Lezo y Gurtel visitaban la ciudad de los bancos y de las fondues siempre que pod¨ªan. En esa misma ciudad conviven ahora I?aki Urdangarin y Anna Gabriel. Siempre recordaremos el proc¨¦s por los pelos de Puigdemont y de Anna Gabriel. Las dos caras de una misma moneda que junto con la capita naranja de Marta definen el presente por sus estilismos y las libertades que se toman.
Reflexiono sobre ello avanzando por los pasillos de ARCO, la feria de arte, el mi¨¦rcoles por la ma?ana y apenas puedo saludar a su director, Carlos Urroz, porque desde su tel¨¦fono lidiaba con el conflictazo creado por la prohibici¨®n de una obra de Santiago Sierra en la galer¨ªa Helga de Alvear, a petici¨®n de la presidencia de Ifema. En la obra se retratan a Junqueras y otros pol¨ªticos catalanes como presos pol¨ªticos. Y no como pol¨ªticos presos. El l¨ªo es tan peliagudo como el himno de Marta. En un pasillo, TV3 me interroga sobre el caso y como acababa de llegar hice uso de mi libertad de expresi¨®n y decline responder. Pero la periodista decepcionada insisti¨® diciendo que el arte es inofensivo y pac¨ªfico. No siempre, le respond¨ª. Es m¨¢s, Jos¨¦ Ignacio Cabrujas siempre me dijo que el rol de un intelectual es a veces molestar a la sociedad. La controversia es un arte y el arte puede ser pol¨¦mico. ¡°Al final, como siempre, censurar y retirar una obra la hace mucho m¨¢s presente y poderosa¡±, me dijo una coleccionista de Barcelona. Tras un d¨ªa de infarto, Ifema pidi¨® disculpas.
Con o sin l¨ªrica en su himno, Espa?a es un pa¨ªs que esta vivo. Por eso disfrut¨¦ tanto acompa?ando a Carmen Lomana a poner los accesorios sobre sus vestidos expuestos en el Museo del Traje, en Madrid. La exposici¨®n se llama El Armario de Carmen Lomana y entre sus accesorios no hay aretes discretos pero si grandes cinturones, cruces victorianas mientras los trajes ofrecen un viaje inesperado por los grandes dise?adores espa?oles e internacionales.
¡°Tir¨¦ toda la ropa que hab¨ªa vestido junto a mi marido cuando ¨¦l falleci¨®. Los que expongo, los amo de verdad. Me encanta compartirlos con la gente, hablan no solo de mi historia o mi gusto sino de creadores como David Delf¨ªn, John Galliano o el Tom Ford de su paso por Yves Saint Laurent y Gucci¡±, me cuenta Lomana mientras arregla las mangas de un Chanel oscuro. Al mismo tiempo que el comisario de la muestra aprueba sus cambios y Sandra, la inseparable asistente de Carmen, coloca una de las cruces. Carmen aplaude y proclama: ¡°Sandra es la mejor estilista de Espa?a¡±. Sue?o con ver en ese museo, la capita de Marta S¨¢nchez, los aretes de Anna Gabriel y el traje de boda de la infanta Cristina, donde todo esto empez¨®.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.