Fran?ois Hollande y Julie Gayet ya no se esconden

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Julie Gayet, en el papel¨®n de su vida

No hay boda a la vista para Julie Gayet y Fran?ois Hollande

Las im¨¢genes de Fran?ois Hollande saliendo en enero de 2014 de inc¨®gnito del El¨ªseo en una moto con su guardaespaldas para ver a su novia secreta, Julie Gayet, son cosa del pasado. A un a?o casi de haber dejado la presidencia francesa, el pol¨ªtico socialista y la actriz ya no ocultan su relaci¨®n y la asumen con toda la naturalidad que puede una pareja famosa cuya historia fue portada de revistas del coraz¨®n, y de la prensa pol¨ªtica, en Francia y en todo el mundo.

Si no se esconden, es porque ya no hay de qu¨¦ esconderse. Hollande ya no es presidente, ni siquiera dirigente de su formaci¨®n, el Partido Socialista (PS). Julie Gayet dej¨® claro desde el principio que no ten¨ªa inter¨¦s alguno en jugar a primera dama, un papel ¡°sexista¡±, seg¨²n declar¨® a la revista Paris Match desde Los ?ngeles, donde particip¨® como productora en la ceremonia de los Oscar. ¡°Se elige a una persona, no a una pareja. La funci¨®n de la primera dama es sexista. Es un trabajo que le obliga a una a dejar su profesi¨®n. Y encima no se gana un salario¡±, explic¨® a la publicaci¨®n, que le acaba de dedicar una portada, otra se?al de que la pareja ha decidido normalizar su relaci¨®n, que cumple ya m¨¢s de cuatro a?os.

La decisi¨®n de mantener la discreci¨®n mientras Hollande estuviera en el El¨ªseo fue mutua. Sobre todo porque hab¨ªa una tercera persona involucrada, la periodista Val¨¦rie Trierweiler, novia oficial de Hollande y que asumi¨®, ella s¨ª, los papeles propios de una primera dama hasta que se descubri¨® la infidelidad del presidente. ¡°Fue el peor momento personal de mi quinquenio¡±, reconoce Hollande en el libro Un presidente no deber¨ªa decir estas cosas, un retrato humano y pol¨ªtico de su mandato realizado a base de entrevistas con el presidente socialista.

Pero con una pareja que tiene una gran exposici¨®n p¨²blica como actriz, la tarea no fue f¨¢cil. Gayet sin embargo se convirti¨® en una especialista en esquivar preguntas personales en entrevistas. Y, asegura ahora en Paris Match, incluso cuando visitaba el El¨ªseo manten¨ªa una estricta separaci¨®n entre lo personal y lo oficial, sin ¡°poner siquiera un pie¡± m¨¢s all¨¢ de las dependencias privadas reservadas al presidente. ¡°Era muy puntillosa con mis gastos. Si ten¨ªa que mandar a lavar un vestido, yo pagaba la tintorer¨ªa¡±.

El contraste entre esa ¨¦poca y ahora es contundente. En los tres a?os, cuatro meses y cuatro d¨ªas ¡ªseg¨²n c¨¢lculos de Le Figaro¡ª que pasaron entre la portada de la revista Closer que revel¨® ¡°el amor secreto del presidente¡± y el ¨²ltimo d¨ªa en el El¨ªseo de Hollande, que el 14 de mayo de 2017 entreg¨® el poder a Emmanuel Macron, solo hay una foto no robada en la que se puede ver a Hollande, de 63 a?os, y Gayet, de 45. Fue el 18 de junio de 2015, cuando Hollande presidi¨® un homenaje en el aniversario del Llamamiento a la Resistencia del general Charles de Gaulle, en 1940. Por una vez, all¨ª estaba tambi¨¦n Julie Gayet. ¡°Pero no est¨¢bamos juntos. Yo estaba ah¨ª por mi abuelo, con toda mi familia¡±, precisa la actriz, nieta de un miembro de la resistencia francesa, a Paris Match.

Sin embargo, en los ¨²ltimos meses, la pareja no ha tenido tantos reparos en mostrarse junta. Ocurri¨® cuando acudieron juntos al funeral por el rockero Johnny Hallyday en Par¨ªs, en diciembre, o cuando Hollande acudi¨® en enero a la presentaci¨®n de una pel¨ªcula producida por Gayet. Una de las ¨²ltimas im¨¢genes de la pareja -y que confirma su decisi¨®n de "normalizar" su vida en com¨²n- es su aparici¨®n, tambi¨¦n juntos, en el partido de rugby entre Francia e Inglaterra el pasado s¨¢bado, donde se instalaron en uno de los lugares m¨¢s vigilados por las c¨¢maras, el palco donde tambi¨¦n se hab¨ªan acomodado el primer ministro, ?douard Philippe, y el pr¨ªncipe Alberto de M¨®naco.

En cierto modo, los papeles ahora se han invertido. Mientras Hollande busca su propio hueco en el panorama pol¨ªtico franc¨¦s, Gayet abandona la discreci¨®n de los ¨²ltimos a?os para reclamar de nuevo la primera plana y apoyar sin ambages proyectos sociales, un campo en el que siempre estuvo comprometida. Su ¨²ltimo paso: es una de las personalidades que apoyan Maintenant on agit (ahora actuamos), la versi¨®n francesa del movimiento nacido entre las actrices de Hollywood Time's Up para apoyar a las v¨ªctimas de la violencia sexual.

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