Una pandilla unida por noches de risas, piano y guitarra
Pablo L¨®pez, Orozco, Bustamante, Albor¨¢n y Alejandro Sanz, amigos y conjurados para defender su forma de entender el arte
En Estados Unidos existi¨® una pandilla m¨ªtica de los a?os cincuenta y sesenta conocida como Rat Pack (Pandilla de ratas). El nombre lo tomaron de Laurel Bacall, que cuando entr¨® en la habitaci¨®n de un hotel donde el grupo de amigos hab¨ªa estado de juerga y los encontr¨® resacosos desperdigados por todas partes, lanz¨® una sentencia que ellos convirtieron en t¨ªtulo: ¡°Parec¨¦is una maldita pandilla de ratas¡±. Sus miembros honorarios fueron Frank Sinatra, Joey Bishop, Dean Martin, Sammy Davis Jr. y Peter Lawford. Juntos crearon una pi?a conjurada para prestarse apoyo incondicional y una filosof¨ªa de vida que inclu¨ªa ¡°amar la m¨²sica sobre todas las cosas¡±, divertirse hasta no poder m¨¢s y rentabilizar su propia forma de entender el oficio.
Graham Marsh, especialista en el Rat Pack dijo de ellos: ¡°Esos t¨ªos eran lo m¨¢s; divertidos, ten¨ªan toneladas de talento y hac¨ªan todo sin renunciar a su esencia¡±. La descripci¨®n se adapta como anillo al dedo ¡ªcon diferencias de ¨¦poca y estilo¡ª a otro grupo de m¨²sicos m¨¢s cercano y contempor¨¢neo, el formado por Pablo L¨®pez, Antonio Orozco, David Bustamante, Pablo Albor¨¢n y Alejandro Sanz, que se suma cuando lo permite la distancia.
?Qu¨¦ une a esta heterog¨¦nea liga de cantantes? Sin duda su forma de entender la m¨²sica que, como los Rat Pack, aman por encima de todas las cosas y entienden como una cuesti¨®n personal. Pero tambi¨¦n una complicidad que los ha convertido en familia, en esa que se crea m¨¢s all¨¢ de los lazos de sangre y se sustenta en intereses comunes, noches de risas, piano y guitarra y una forma diferente de entender c¨®mo llegar al p¨²blico sin renunciar a ser ellos mismos. Todos tambi¨¦n han pasado por momentos oscuros, ¨¦pocas duras y dudas existenciales; pero escuch¨¢ndoles se adivina que no solo les sobra el talento sino tambi¨¦n los sentimientos que hacen que unos tiren de los otros. Los mismos que hace que llenen estadios y emocionen cuando se ponen a descargar humanidad frente al micr¨®fono.
¡°Tenemos que agradecerle mucho al ni?o. Es un anfitri¨®n espectacular y esto es una familia de verdad¡±, ha dicho de Pablo L¨®pez, David Bustamante. ¡°Yo no conoc¨ªa mucho a David, pero Pablo nos re¨²ne a todos los colgaos?que estamos en Madrid¡±, ha desvelado Antonio Orozco sobre la pi?a que ha conseguido hacer de ellos el autor de El Patio.
En una entrevista conjunta, actuando como coaches o asesores en La Voz, d¨¢ndose el relevo en conciertos corales o en la intimidad de sus casas, este grupo desprende complicidad y buen rollo. Tambi¨¦n les sobra vocaci¨®n para tirar unos de otros cuando el momento personal o profesional de cada uno lo ha hecho necesario. Un d¨ªa es Bustamante el que est¨¢ en la cima e invita a cantar a Pablo L¨®pez, y otro es Pablo el que llena el mismo escenario y recuerda c¨®mo David le hizo un hueco cuando nadie escuchaba las melod¨ªas que ahora le encumbran. O Alejandro Sanz invita a casi todos ellos a participar en el multitudinario concierto con el que celebr¨® los 20 a?os de su disco M¨¢s.
Como ocurri¨® con los Rat Pack, su poder va en aumento, tambi¨¦n frente a las discogr¨¢ficas. Han demostrado que hacer las cosas de otra manera, funciona. Que a veces hay que confiar en ellos; cambiar masificaci¨®n por intimidad, lo com¨²n por lo ¨²nico. As¨ª se llama precisamente el nuevo espect¨¢culo de Antonio Orozco, ?nico, un proyecto que naci¨® en ¨¦poca de crisis para 10 funciones y se convirti¨® en 700 y que en septiembre volver¨¢ con otros 100 conciertos. Un ¨¦xito que permite algo que resulta vital para cada uno de los miembros de esta sociedad de genios: poder elegir c¨®mo, d¨®nde y con quien hacen arte con su m¨²sica.
Tampoco resulta ajeno que tienen una atracci¨®n adicional: en muchas ocasiones contratar a uno de ellos significa que tarde o temprano acabar¨¢ apareciendo el resto. Para disfrute del p¨²blico, s¨ª; pero sobre todo porque esta familia de artistas se siente c¨®moda y m¨¢s segura cuando est¨¢n juntos sobre la cuerda floja en la que viven por rachas los m¨²sicos.
Juntos m¨¢s all¨¢ de los escenarios
Alejandro Sanz, de 49 a?os, es el veterano de este grupo, tambi¨¦n el artista al que Pablo L¨®pez (34), admiraba: "Cuando escuch¨¦ a Alejandro por primera vez se me quitaron los problemas. Su m¨²sica me cambi¨® la vida", ha llegado a decir. Sanz le dio el relevo a L¨®pez como coach en La Voz y M¨¢laga une a este d¨²o con Pablo Albor¨¢n, ciudad en la que los tres hunden ra¨ªces. Juntos disfrutan y hablan de m¨²sica pero tambi¨¦n se unen en momentos como la crisis personal que hizo abandonar los escenarios a Pablo Albor¨¢n durante dos a?os; la tristeza de Orozco por la p¨¦rdida de la madre de su ¨²nico hijo, o la mala racha que vive David Bustamante en tr¨¢mites de divorcio de Paula Echevarr¨ªa desde hace un a?o y cuestionado sobre el escenario.
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