Faraday
Tamara Falc¨® entrevista a Vargas Llosa y aporta un grado de ternura
Esta Semana Santa me marcho un pel¨ªn triste de la insuperable Europa camino a ese subcontinente m¨¢s soso, incluso aburrido, que es Estados Unidos. Seg¨²n muchos de los miles de venezolanos que se exilian en Madrid, el ¡°sue?o americano¡± pas¨® y ahora lo que se lleva es el sue?o espa?ol.
Es que en esta parte del mundo no dejan de suceder cosas. El indigesto borchst con los esp¨ªas rusos ha hecho recuperar una sala sin escuchas en la embajada de Espa?a en ese pa¨ªs que recibe el rom¨¢ntico nombre de Faraday. ¡°Anoche so?¨¦ que volv¨ªa a Faraday¡±, podr¨ªamos decir y sentirnos de nuevo en esa c¨¢psula peligrosa y al mismo tiempo fascinante de la cercan¨ªa de esp¨ªas en nuestro entorno.
Con mi nombre tan ruso, siempre quise ser esp¨ªa. Y encima, David Bustamante se proclama como el primer var¨®n que pide el divorcio antes de que se lo pidan. Y, para dejarnos casi sin aire, Tamara Falc¨® entrevista a Mario Vargas Llosa para la revista Vanity Fair.
Europa es lo m¨¢s y adem¨¢s, siempre lo ha sido. No entiendo por qu¨¦ no me quedo, tengo que aprender a despojarme de alguna contradicci¨®n o dos. Entretanto, me alegra ser contempor¨¢neo al fen¨®meno Tamara, a quien defin¨ª en el programa de Bert¨ªn como ¡°un libro abierto¡±. Que es una de las razones por las que gusta tanto, sea entrevistadora o entrevistada, porque pareciendo alguien que controla todo tipo de filtros, su peculiar filtro es carecer de ellos. La espontaneidad de Tamara la quisi¨¦ramos muchos y seguramente ella la destila con exquisita medida. Siempre sientes que queda algo m¨¢s que saber de ella.
Al entrevistar a Vargas Llosa, se presenta como ¡°enchufada¡± y consigue aportar un grado de ternura a la entrevista que se evapora cuando le pregunta al escritor por qu¨¦ eligi¨® a Albert Rivera como presentador de su nuevo ensayo sobre el liberalismo. Tamara, como muchas mujeres que admiro, no da puntada sin hilo. Y atrapa. Y crea controversia: as¨ª como hay seguidores, tambi¨¦n hay detractores. Pero en la era de los likes, esa es la mayor medida de un fen¨®meno: Tamara ha pasado del like al efecto. ?Bravo!
David Bustamante ha intentado otro golpe de efecto. En trece p¨¢ginas de ?HOLA!, se sincera sobre su temor a la soledad, pero tambi¨¦n notifica que est¨¢ convencido de que fue ¨¦l quien decidi¨® divorciarse. Impacta porque existe una cierta estad¨ªstica de que son las mujeres quienes asumen esta responsabilidad. Los hombres, al parecer, somos m¨¢s pasivos en este tema porque hemos sido mal educados por el machismo a que las mujeres tengan siempre la ¨²ltima palabra.
Pero Bustamante es diferente, siempre lo fue, incluso en la Academia de Operaci¨®n Triunfo, donde lloraba desconsolado cada vez que uno de sus compa?eros era expulsado por la audiencia. Y ¨¦l permanec¨ªa, acariciando ser uno de los elegidos. En la entrevista de esta semana sorprende que reconozca sus problemas de peso y de alimentaci¨®n ansiosa. Se deja llevar por los nervios y come sin parar.
A m¨ª me pasa lo mismo, pero mi marido tranca la nevera y yo respiro hondo. Creo que aqu¨ª Paula, que es divina en todo, incluso en lo de salir con un futbolista que era amigo de su ex, ha fallado un poquito. Gracias a ella, David tuvo unos a?os de t¨ªo bueno que fueron gloria para todos. Yo creo que esas fotos de Bustamante en ba?ador estampado y abdominales y esa dentadura de triunfador, deber¨ªan ponerlas en las escuelas y salimos adelante y hasta agradecemos a Guindos que baje el impuesto de las entradas del cine.
Tambi¨¦n estoy convencido que Madrid va a salir ganando con la trama de los esp¨ªas rusos. Estos atacan en Londres, pero la que va a conseguir ser escenario cinematogr¨¢fico de esta nueva peripecia internacional, ser¨¢ Madrid. No solo por sus magn¨ªficos escenarios, sino porque en ella es donde se ha reabierto el b¨²nker sin escuchas denominado Faraday.
?No hay nada m¨¢s rom¨¢ntico que un lugar a prueba de escuchas con un nombre que suena espacial o de ciencia ficci¨®n! No entiendo c¨®mo no lo han empleado para un bar, un restaurante o unas buenas memorias. Deber¨ªan abrir esa sala a las visitas, previo pago, y a lo mejor se recupera un buen dinero para luchar contra el espionaje. O incentivarlo. Porque me voy haciendo a la idea de que una de las m¨¢s seguras demostraciones de que salimos de la crisis es que tengamos esp¨ªas. Y que Tamara lo entreviste en Faraday.
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