La Justicia Transicional descarrila en T¨²nez
El organismo que investiga los cr¨ªmenes podr¨ªa cerrar sin haber concluido su trabajo
El proceso de transici¨®n en T¨²nez despert¨® el inter¨¦s y admiraci¨®n de la comunidad internacional, que premi¨® a algunos de sus principales protagonistas con el Premio Nobel de la Paz. En el coraz¨®n de aquel proyecto se hallaba la Instancia de la Verdad y la Dignidad (IVD), encargada de investigar los cr¨ªmenes de la dictadura, reparar a sus v¨ªctimas, y facilitar que los verdugos responsables de las m¨¢s graves violaciones de los derechos humanos rindieran cuentas ante la sociedad. La singladura de la instituci¨®n se vio envuelta desde el inicio en la pol¨¦mica a causa del temperamento y h¨¢bitos de su presidenta y la victoria electoral en 2014 de un partido hostil a la Justicia Transicional. Ahora, cuando su mandato toca su fin, el Parlamento puede haber dado una ¨²ltima estocada.
Despu¨¦s de un ca¨®tica y vitri¨®lica sesi¨®n de m¨¢s de diez horas, la Asamblea de Representantes del Pueblo vot¨® el pasado lunes en contra de la petici¨®n de la IVD para alargar un a?o sus labores, que deb¨ªan finalizar el pr¨®ximo mes de mayo. Las razones aducidas para la extensi¨®n, prevista por la ley, es que algunas instituciones no han colaborado con la Instancia, lo que ha ralentizado sus tareas de investigaci¨®n. En caso de verse forzada a cerrar sus puertas de aqu¨ª a un par de meses, la IVD solo habr¨ªa cumplido una peque?a parte de sus objetivos.
No obstante, su futuro no est¨¢ claro. La Instancia considera que la ley le otorga la potestad de prolongar su mandato un a?o con una notificaci¨®n del Parlamento. As¨ª opinan diversos partidos, incluido el islamista Ennahda, miembro de la gran coalici¨®n que apoya al primer ministro. Estos partidos se ausentaron de la votaci¨®n, en la que participaron 70 diputados de los 217 que forman la C¨¢mara. Toda vez que el reglamento fija en un tercio el qu¨®rum m¨ªnimo, los aliados de la IVD argumentan que la votaci¨®n no es v¨¢lida. A falta de un Tribunal Constitucional que resuelva el embrollo la IVD puede verse inmersa en un marasmo legal que desemboque en la invalidaci¨®n de su trabajo. Malos augurios para la ¡°historia de ¨¦xito¡± de las primaveras ¨¢rabes.
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