Gen secreto
El determinismo gen¨¦tico 'casi' no existe, pero la excepci¨®n es justo la corea de Huntington
Sal a la calle y pregunta a la gente si la informaci¨®n gen¨¦tica debe ser privada. Todo el mundo te responder¨¢ que s¨ª, que por supuesto. Pero las cosas, como ocurre siempre, son m¨¢s complejas en cuanto uno profundiza un poco. El a?o pasado, una embarazada brit¨¢nica gan¨® un caso bien curioso en la corte de apelaci¨®n de su pa¨ªs, que est¨¢ solo un paso por debajo del Tribunal Supremo. Su padre se hab¨ªa hecho la prueba gen¨¦tica del Huntington, una enfermedad neurodegenerativa mortal, y decidi¨® ocult¨¢rselo a la hija embarazada. ?sta supo despu¨¦s del parto que ella tambi¨¦n llevaba el gen mortal, con lo que su hijo ten¨ªa un 50% de probabilidades de llevarlo a su vez, y demand¨® al hospital por haber mantenido secreta la informaci¨®n gen¨¦tica de su padre. De haberla conocido, dijo, ella habr¨ªa abortado. El tribunal le dio la raz¨®n y sentenci¨® que los m¨¦dicos que diagnostiquen un caso de Huntington est¨¢n obligados a informar a los hijos del paciente.
El determinismo gen¨¦tico 'casi' no existe, pero la excepci¨®n es justo la corea de Huntington. Todas las personas que llevan la mutaci¨®n responsable est¨¢n condenadas a padecer la enfermedad entre los 35 y los 50 a?os, y a morir poco despu¨¦s. Y, lo que es a¨²n m¨¢s determinista, el tipo concreto de mutaci¨®n permite predecir la edad de la muerte con bastante fiabilidad. Ahora dejemos volar m¨ªnimamente la imaginaci¨®n: supongamos que una persona, tras hacerse las pruebas gen¨¦ticas, sepa que va a morir a los 50 a?os. A los 49 a?os suscribe un seguro de vida sin informar a la aseguradora, y al a?o siguiente la aseguradora palma un mill¨®n de euros a favor de los familiares del muerto. Ser¨ªa el timo del genoma, ?no es cierto?
Prosigamos. El mes pasado, la polic¨ªa de California detuvo al violador y asesino serial Joe de Angelo mediante una estrategia in¨¦dita hasta ahora. Los violadores siempre dejan restos biol¨®gicos en sus v¨ªctimas, pero el genoma de ¨¦ste no casaba con ning¨²n otro registrado por la polic¨ªa. As¨ª que los investigadores lo subieron a GEDmatch, una web geneal¨®gica que te ofrece encontrar a tus ancestros y, por tanto, a tus familiares actuales, estrecharon el cerco gen¨¦tico y hallaron al asesino. Si los datos gen¨¦ticos de GEDmatch hubieran sido privados, De Angelo habr¨ªa quedado impune.
Ampliando el foco, ?de qu¨¦ le sirve a un calvo ocultar sus genes de la calvicie, a un gordo los de la obesidad, a un bajito los de la estatura? ?Y a un depresivo los de la depresi¨®n? ?Y a un agresor los de la agresividad? Hay muchos secretos que cantan a todo decibelio.
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