Otros sue?os

Ante el voluptuoso y analfabeto Donald Trump, que irrumpe cada d¨ªa en el orden mundial como un b¨²falo ciego e imprevisible, ?se puede sentir algo que no sea miedo y verg¨¹enza? Ante la matanza brutal, met¨®dica y programada de palestinos desarmados provocada con fuego a discreci¨®n por el Ej¨¦rcito israel¨ª, ?se puede sentir algo que no sea dolor y repugnancia? Ante la tragedia de los inmigrantes que huyen del hambre y de la guerra sin otro futuro que el de ahogarse en el mar o morir detr¨¢s de una alambrada, ?se puede sentir algo que no sea compasi¨®n y congoja? Ante la putrefacci¨®n de la pol¨ªtica espa?ola y su descr¨¦dito internacional con la bajada de Catalu?a hacia la ci¨¦naga del racismo, la xenofobia y la quiebra social, ?qu¨¦ se puede hacer sino esperar con resignaci¨®n a que se hunda todo en la mierda? Los sue?os de aquella Norteam¨¦rica de soldados envueltos en melod¨ªas de Glenn Miller, que salvaron la libertad y la democracia en la Segunda Guerra Mundial, la Nueva Frontera de Kennedy y el esp¨ªritu de Obama, han ca¨ªdo en manos de Donald Trump, gran fabricante de pol¨ªtica basura. Los sue?os de una naci¨®n jud¨ªa, fermento de la ciencia y del arte, los ha convertido el Estado de Israel, con el repulsivo ministro Netanyahu a la cabeza, en una pesadilla causante de un nuevo genocidio. Aquella Europa acogedora de la fraternidad y de los derechos humanos se ha convertido hoy en una especie de vieja temerosa y ego¨ªsta. Los sue?os de la Transici¨®n con una Catalu?a clara, abierta y aireada, que tiraba del resto de Espa?a hacia la modernidad constituyen ahora un espect¨¢culo siniestro entre catetos racistas y pol¨ªticos incompetentes. Con una sensaci¨®n de miedo, verg¨¹enza, dolor, repugnancia, compasi¨®n, congoja, mierda y resignaci¨®n, se va el ciudadano todas las noches a la cama. ?Qu¨¦ otros sue?os puede esperar?