Ser ¡®b¨²ho¡¯ o ¡®alondra¡¯ influye en tu longevidad y en la salud

Si eres noct¨¢mbulo, parece que tienes un 10% m¨¢s de probabilidades de morir antes que si te levantas con las pilas puestas desde el primer rayo del d¨ªa. Al menos, esta es la conclusi¨®n de un reciente estudio publicado por la Universidad de Northwestern Medicine y la Universidad de Surrey en Reino Unido.

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Cada uno de nosotros tenemos un cronotipo o un ritmo interno que nos hace sentirnos m¨¢s c¨®modos trabajando por la ma?ana (los conocidos ¡°alondras¡± o matutinos) o por la tarde noche (los ¡°b¨²hos¡± o los vespertinos). Los investigadores de este estudio analizaron los datos m¨¦dicos de casi medio mill¨®n de personas de 38 a 73 a?os y les preguntaron si se sent¨ªan m¨¢s b¨²hos o alondras. Despu¨¦s de un seguimiento de seis a?os y medio, la conclusi¨®n no es muy buena para los vespertinos: los b¨²hos resultan m¨¢s vulnerables a problemas metab¨®licos o cardiovasculares, lo que les hace sufrir un riesgo superior del 10% de morir antes; y presentan mayores ¨ªndices de diabetes, trastornos psicol¨®gicos y trastornos neurol¨®gicos. Y la causa fundamental es la presi¨®n social, seg¨²n los investigadores. Vivimos en un mundo pensado para los ¡°alondras¡±, en el que un pobre b¨²ho sufre?jet-lags casi diariamente. El estr¨¦s de tener que rendir desde primera hora cuando tu cuerpo no acompa?a genera a la larga un problema de salud, como han demostrado los resultados de este estudio.

Los colegios y las empresas arrancan desde las nueve de la ma?ana y el vespertino se las ve y se las desea para llegar a tiempo. Adem¨¢s, como el cronotipo es gen¨¦tico, ya desde peque?os los b¨²hos han entrado medio dormidos a las primeras horas de clase. No es de extra?ar, por eso, que las profesiones con horarios m¨¢s flexibles est¨¦n llenas de b¨²hos, como escritores, periodistas, m¨²sicos, programadores¡­ Quiz¨¢ la huida de los dif¨ªciles madrugones sea un aliciente para buscar otros caminos profesionales. Pues bien, ?qu¨¦ podemos hacer?

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B¨²hos contra alondras: ?es mejor ser madrugador o trasnochador?

Lo primero de todo, conocerse. Como hemos dicho, el cronotipo es gen¨¦tico. Hay personas que est¨¢n entre b¨²ho o alondra (como algunos llaman, ¡°colibr¨ª¡±) y que se adaptan mejor. Pero si est¨¢s en uno de los extremos, es recomendable que tomes conciencia lo antes posible para organizar tus horarios y para programar las reuniones importantes cuando est¨¦s en tu mejor momento.

Segundo, aunque sea gen¨¦tico, no est¨¢ todo perdido, como comentan los autores de la investigaci¨®n. Nuestro cuerpo tambi¨¦n se adapta y, para ello, recomiendan el uso de la luz. Para los b¨²hos, que son quienes lo suelen tener m¨¢s dif¨ªcil, se sugiere encender una luz a primera hora con cierto tiempo de adelanto para que el cuerpo se vaya acostumbrando (y aceptar que con un ¨²nico sonido del despertador te ser¨¢ imposible levantarte a la primera ¡­ vas a necesitar varios a pesar de las quejas de la persona que tengas al lado). Igualmente, se sugiere mantener la rutina de acostarse a la misma hora prudencial aunque el cuerpo no est¨¦ cansado.

Y tercero, revisa tu presi¨®n social. Se habla de las m¨²ltiples diversidades en la sociedad, pero esta es una m¨¢s que apenas se tiene en cuenta. Ser¨ªa recomendable dar horquillas de horario para entrar y para salir del trabajo, de manera que cada persona pudiera escoger la que le permite rendir mejor. Igualmente, es bueno conocerlo dentro de los equipos de trabajo o de las personas con las que compartes tu vida. No todos somos iguales y necesitamos un nivel de descanso diferente. En la medida en que lo hables y lo conozcas, podr¨¢s tomar mejores decisiones (y reducir incomodidades de parecer que el otro est¨¢ dormido cuando t¨² est¨¢s la mar de sereno).