La dimisi¨®n de M¨¤xim Huerta

Hace una semana se produjo el nombramiento de los ministros del Gobierno de Pedro S¨¢nchez. La opini¨®n generalizada fue que se trataba de un Gobierno preparado, homog¨¦neo y con aire fresco para hacer frente a los desaf¨ªos que necesitaba la sociedad espa?ola. Pero no hay que obviar una cualidad que debe exigirse a cualquier persona que ostente un cargo p¨²blico: la ejemplaridad. Por eso, el ministro de Cultura y Deporte M¨¤xim Huertano puede ni debe considerarse acorde a la conducta exigida. Adem¨¢s, la frase pronunciada por el presidente del Gobierno hace tres a?os en relaci¨®n a Juan Carlos Monedero result¨® premonitoria y fue utilizada por sus adversarios pol¨ªticos para presionarle: ¡°Un pol¨ªtico que crea una sociedad para pagar la mitad de los impuestos estar¨ªa al d¨ªa siguiente de conocerse fuera de mi ejecutiva¡±.¡ª Javier Cordero Ruiz. Madrid.

La dimisi¨®n de M¨¤xim Huerta como ministro de Cultura demuestra en qu¨¦ consiste la coherencia pol¨ªtica, a diferencia de otros que en un pasado reciente ¡ªy no tan reciente¡ª se aferraron a sus sillas hasta el fin de los d¨ªas tras salir a la luz actos similares e incluso m¨¢s graves. Que tomen ejemplo el resto de formaciones pol¨ªticas. Siento de verdad que se haya producido un hecho como este a los pocos d¨ªas de formarse el actual Gobierno porque, en mi opini¨®n, ten¨ªa ¡ªy tiene¡ª buena pinta. Espero y deseo que la coherencia y la transparencia sean la bandera de este Ejecutivo como motor de la verdadera regeneraci¨®n pol¨ªtica en nuestro pa¨ªs.¡ª Jos¨¦ Manuel Fern¨¢ndez-Arroyo Castellano. Barcelona.