Bienvenidos al Urbanoceno
La ciudad es la clave de la ¨¦poca que vivimos y su crisis es la crisis de nuestro tiempo
Es la ciudad la clave de la ¨¦poca? Eso piensan el f¨ªsico te¨®rico brit¨¢nico Geoffrey West, que propone reemplazar el t¨¦rmino Antropoceno por el m¨¢s geogr¨¢fico Urbanoceno, y el economista norteamericano Richard Florida, que sit¨²a en la actual crisis urbana el gran desaf¨ªo de nuestro tiempo. Los tripulantes del Apolo 17 fotografiaron por primera vez nuestro planeta desde el espacio en 1972, y la famosa canica azul ha sido desde entonces emblema de la conciencia ambiental para todos los que nos sabemos ¡°pasajeros de la nave espacial Tierra¡±; cuarenta a?os despu¨¦s, la NASA utiliz¨® un sat¨¦lite para componer una imagen nocturna del globo donde la iluminaci¨®n artificial de las ciudades marca el per¨ªmetro de la huella humana, y esa canica negra es ya un s¨ªmbolo de la explosi¨®n urbana. Si el auge desbordante de las ciudades autoriza a describirnos en el Urbanoceno, el crecimiento de la desigualdad en ellas dibuja una crisis cuyo desenlace es el de nuestro futuro compartido.
Utilizando la escala como esencial herramienta de comparaci¨®n y medida, Geoffrey West se ha propuesto crear una teor¨ªa cuantitativa de las ciudades, inspirada por la f¨ªsica, para establecer leyes universales de crecimiento y sostenibilidad similares a las que existen en el dominio de lo org¨¢nico, en la l¨ªnea eminente que une a Galileo con D¡¯Arcy Thompson. Felicit¨¢ndose de que t¨¦rminos como energ¨ªa, entrop¨ªa o metabolismo sean hoy comunes en los manuales econ¨®micos, propone analizar con este enfoque un urbanismo cuyas bases conceptuales recorre desde Ebenezer Howard, Le Corbusier o Walter Christaller hasta las smart cities del big data, pasando por Jane Jacobs, Lewis Mumford, el New Urbanism o Masdar.
Su presentaci¨®n de las ciudades como redes de conectividad f¨ªsica y social, m¨¢s semejantes a fractales que a cristales, le sirve para alumbrar datos tan inesperados como el 15% de ahorro en coste de infraestructuras y consumo de energ¨ªa por habitante que se obtiene con cada duplicaci¨®n de la escala poblacional, y el mismo 15% de incremento en salario medio, patentes o delitos por habitante que se produce al multiplicar por dos el tama?o de la ciudad: una investigaci¨®n interdisciplinar que ilumina cuantitativamente las ventajas y los riesgos de la escala urbana, y donde la desigualdad social que advierte hoy en las grandes ciudades se explica por el empe?o biol¨®gico de los organismos en ¡°maximizar su poder metab¨®lico¡±.
La desigualdad es, sin embargo, para Richard Florida, que en 2002 pronostic¨® el renacimiento urbano con The Rise of the Creative Class, el componente esencial de la actual crisis. Convencido de que el motor del crecimiento urbano no son las grandes sedes empresariales o los megaproyectos, sino la tecnolog¨ªa, el talento y la tolerancia que caracterizan a la ¡°clase creativa¡±, el profesor de la Universidad de Toronto augur¨® un retorno a los centros urbanos de los sectores sociales emergentes hasta entonces residentes en los desarrollos suburbanos, pero tanto el colapso de la ¡°clase trabajadora¡± tradicional como la multiplicaci¨®n de una ¡°clase de servicios¡± subalterna han arrojado sombras sobre el contempor¨¢neo auge de las ciudades.
En The New Urban Crisis ¡ªuna obra que ha sido comparada con Le capital au XXIe si¨¨cle de Thomas Piketty por su diagn¨®stico esencial de los males de hoy¡ª, su autor encuentra en la desigualdad social y la gentrificaci¨®n urbana el combustible que ha alimentado el Brexit, la elecci¨®n de Trump o el avance del populismo. Richard Florida, que ha intentado amalgamar a Joseph Schumpeter, Peter Drucker y Daniel Bell con el Karl Marx de los Grundrisse, piensa que ¡°mucho m¨¢s que una crisis de las ciudades, la Nueva Crisis Urbana es la crisis central de nuestro tiempo¡±, ya que pone en cuesti¨®n la econom¨ªa posindustrial del conocimiento. A ella s¨®lo podemos enfrentarnos procurando una prosperidad m¨¢s sostenible e inclusiva a trav¨¦s del incremento de la densidad urbana, la inversi¨®n en infraestructuras y viviendas de alquiler asequible, la subida del salario m¨ªnimo para reconstruir la clase media o el establecimiento de una renta vital para eliminar la pobreza: ¡°La ¨²nica v¨ªa de avance para nuestra econom¨ªa y nuestra sociedad es m¨¢s, y no menos, urbanismo¡±, una buena receta para los que habitamos el Urbanoceno.
Luis Fern¨¢ndez-Galiano es arquitecto.
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