Organismos P¨²blicos de Investigaci¨®n ?alguno de ellos debe ser de segunda divisi¨®n?
Los investigadores espa?oles debemos felicitarnos por tener de nuevo un Ministerio de Ciencia. La sensatez, en mi opini¨®n, ha regresado a la estructura del gobierno creando un ministerio en el que visualmente aparece, de manera clara y n¨ªtida, la ciencia.
La poca sensibilidad hacia la investigaci¨®n y la ciencia de gobiernos anteriores hab¨ªa hecho que esta actividad, fundamental para cualquier pa¨ªs, quedase en el nuestro relegada a un fleco de un fleco del Ministerio de Econom¨ªa. Felizmente, el gobierno actual la ha situado de nuevo en primera l¨ªnea. Esperamos que esa visualizaci¨®n se transforme en los resultados esperados y podamos recuperar nuestra presencia en los primeros puestos de los rankings internacionales de producci¨®n cient¨ªfica, tal como ocurr¨ªa hace unos a?os.
Una parte muy importante de la investigaci¨®n espa?ola se hace a trav¨¦s de los Organismos P¨²blicos de Investigaci¨®n (OPI), que son que la Agencia Estatal Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), el Centro de Investigaciones Energ¨¦ticas, Medioambientales y Tecnol¨®gicas (CIEMAT), el Instituto Nacional de T¨¦cnica Aeroespacial (INTA), el Instituto de Astrof¨ªsica de Canarias (IAC), el Instituto Nacional de Investigaci¨®n y Tecnolog¨ªa Agraria y Alimentaria (INIA), el Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa (IEO) y el Instituto Geol¨®gico y Minero de Espa?a (IGME).
Todos estos OPI, especialmente sus investigadores, han trabajado muy duro durante estos a?os de crisis econ¨®mica y, gracias a que su capacidad de investigaci¨®n es realmente alta, incluso con presupuestos econ¨®micos relativamente bajos, fueron capaces de ir aguantando los tiempos dif¨ªciles.
La producci¨®n cient¨ªfica de los OPI es susceptible de relanzarse de manera muy notable si el ministerio en el que se ubican los potencia tal como es previsible que lo haga el actual Ministerio de Ciencia, Innovaci¨®n y Universidades. Los que creemos en que el futuro de un pa¨ªs debe basarse de manera muy notable en la educaci¨®n, la cultura y la ciencia, estamos realmente ilusionados.
Tres de los OPI, los tres ¨²ltimos de la relaci¨®n anterior, INIA, IEO e IGME, sufrieron la crisis econ¨®mica de una manera especial ya que en el marco del plan de austeridad del gasto p¨²blico de 2010 se les pas¨® del rango de direcci¨®n general a rango de subdirecci¨®n general, con lo que ello implica en las posibilidades reales de desarrollo de su trabajo. Ninguno de estos tres OPI se quej¨® de manera especial, ni en aquel a?o, ni hasta ahora. Era una forma de entender las dificultades de la crisis econ¨®mica y su manera de contribuir positivamente a la reducci¨®n de los gastos.
Pero, pasada la crisis, o casi, y con un Ministerio de Ciencia, ?es l¨®gico tener tres OPI con rango inferior al resto? Sinceramente creo que no. Por ello, apelo al ministro de Ciencia, Innovaci¨®n y Universidades para que en un gesto de normalizaci¨®n, y casi de agradecimiento a su ayuda en momentos de crisis, restablezca el rango de direcci¨®n general tanto al INIA, como al IEO y al IGME. El conjunto de la investigaci¨®n saldr¨¢ reforzada y los investigadores se lo agradeceremos muy sinceramente.
Alberto Gonz¨¢lez-Garc¨¦s es investigador Marino. Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa, Vigo.
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