El nuevo social-feminismo
Asistimos al surgimiento de una pol¨ªtica feminista fuerte, una apuesta transversal a las ideas de cuidado, interdependencia y solidaridad emp¨¢tica
Que a mi plataforma se la tilde de radical es un reflejo del momento pol¨ªtico que vivimos¡±. Son palabras de Ocasio, que reivindica p¨²blicamente a otros radicales: el movimiento por los derechos civiles, el abolicionismo, las sufragistas, los sindicatos, la semana de 40 horas. Signo de los tiempos: el obsceno y caricaturesco nuevo capitalismo ha conseguido relegitimar una palabra tab¨², ¡°socialismo¡±, nada menos que en el coraz¨®n del Partido Dem¨®crata. Y no es balad¨ª, sino una clara llamada de atenci¨®n sobre la ruptura de un consenso pol¨ªtico b¨¢sico, pues el acceso a garant¨ªas sociales imprescindibles, como la sanidad o la educaci¨®n universitaria, son ya inalcanzables para quien no tenga dinero.
?Qu¨¦ significa todo esto, tanta combusti¨®n ling¨¹¨ªstica en la potencia que alberga el epicentro financiero de Wall Street? Porque ese nuevo socialismo no pretende nacionalizar los modos de producci¨®n, sino emplear ese apellido, socialista, como un referente ideol¨®gico m¨ªnimo, un asidero que permita reivindicar bienes que hasta hace poco estaban al alcance de las clases medias. Por no hablar de la situaci¨®n de los m¨¢s menesterosos.
Ocurre que el Partido Dem¨®crata ha descubierto que en su seno hay dos partidos: uno que juega en el limbo de las reglas del sistema, a lo Clinton o Crowley, sin cuestionar el orden pol¨ªtico econ¨®mico, y otro bien distinto, el de las bases que realmente sufren ese empobrecimiento y lo filtran y reciclan pol¨ªticamente hacia arriba. La grassroots politics clama la obsolescencia del binomio dem¨®cratas-republicanos, y busca otros referentes.
No es casualidad que sean las mujeres las protagonistas de este movimiento de base que teje alianzas con otros colectivos despose¨ªdos. La historia de la lucha feminista se ha construido desde la sensibilidad con los problemas concretos, antes que desde la formulaci¨®n abstracta de una idea de justicia previa a la experiencia. Asistimos de hecho al surgimiento de una pol¨ªtica feminista fuerte, una apuesta transversal a las ideas de cuidado, interdependencia y solidaridad emp¨¢tica y que se muestra abiertamente como un referente. Llega el social-feminismo, o el feminismo socialista si lo prefieren. Sea bienvenido. @MariamMartinezB
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