¡°?C¨®mo va a ser malo que a alguno de nuestros fans le guste Alejandro Sanz?¡±
Lori Meyers cumplen 20 a?os como banda con '20 a?os, 21 canciones', un disco en el que re¨²nen temas de toda su carrera elegidos por amigos suyos
Lori Meyers cumplen 20 a?os como banda, pero como personas siguen igual de aficionados a los botellines que cuando empezaron. "No tienen Alhambra, qu¨¦ se le va a hacer, esta tambi¨¦n est¨¢ rica", dice Noni L¨®pez, 36 a?os, granadino como sus dos compa?eros de grupo, Alejandro M¨¦ndez y Alfredo N¨²?ez, un a?o m¨¢s j¨®venes. Enseguida se inicia un debate sobre por qu¨¦ cada regi¨®n de Espa?a tiene su propia marca de cerveza preferida, sobre si es puro marketing o el sabor de cada una se adapta a una geograf¨ªa y un clima concretos.
La naturalidad de los miembros de una de las bandas de pop rock con m¨¢s seguidores de Espa?a sigue intacta 10 a?os despu¨¦s, desde que este periodista los entrevist¨® por el lanzamiento de Cronol¨¢nea, su espaldarazo definitivo. Ahora editan 20 a?os, 21 canciones, un disco en el que re¨²nen temas de toda su carrera, elegidos por amigos suyos, algunos de ellos caras tan conocidas como la cantante Anni B. Sweet, el periodista Jon Sistiaga o el humorista El Monaguillo. Un peque?o autohomenaje antes de afrontar el mayor reto de su carrera: llenar el WiZink Center de Madrid (antes Palacio de los Deportes) dentro de seis meses. La conversaci¨®n tiene lugar en un hotel de Gran V¨ªa, entre botellines de cerveza y un cenicero desbordado de cigarros. Noni, como en los conciertos, lleva la voz cantante.
- P. Los aniversarios suelen ir acompa?ados de balance. Tambi¨¦n de lo malo. ?Os arrepent¨ªs de algo?
- R. Los aciertos y los errores nos han llevado a donde estamos. De modo que tendr¨ªamos que establecer una especie de universo paralelo para imaginar qu¨¦ habr¨ªa sucedido si con las primeras bajas del grupo nos hubi¨¦ramos separado, y d¨®nde estar¨ªamos ahora. Otra cosa es si hablamos de lo personal. Todos nos arrepentimos de cosas. Mi padre muri¨® muy joven y me arrepent¨ª de no haber pasado m¨¢s tiempo con ¨¦l. Si hubiera tenido un trabajo normal en Granada nos habr¨ªamos visto mucho m¨¢s. Pero la vor¨¢gine de un grupo, con giras y conciertos lejos de casa, y m¨¢s cuando tienes ¨¦xito, te deja poco tiempo para la familia. Yo no pensaba en eso al principio, y cuando se muri¨® mi padre, ya era demasiado tarde. El grupo da muchas cosas, pero tambi¨¦n te exige mucho. Y cuando lo das todo por el grupo, para que vaya cada vez mejor, hay da?os colaterales. Hemos dejado muchas relaciones en el camino.
- P. ?Os arrepent¨ªs de alg¨²n disco, alguna canci¨®n?
- R. Es complicado responder a eso. Porque somos muy exigentes, siempre pensamos que una canci¨®n podr¨ªa ser mejor de lo que es, que podr¨ªamos haber afinado m¨¢s. Y con los v¨ªdeos ni te cuento.
- P. ?Y de haber saltado a una multinacional tan pronto? Muchos de los que se llaman indies no os lo han perdonado.
- R. En absoluto. Entrar en Universal ha sido de lo mejor que le ha pasado a Lori Meyers. En aquella ¨¦poca est¨¢bamos bastante mal ya con nuestra anterior discogr¨¢fica, Houston Party. Nos ha pasado justo lo contrario que a muchas otras bandas. Que est¨¢n c¨®modas en una independiente, pero una multinacional les pone un contrato mucho m¨¢s grande y empiezan con ella, y empiezan los problemas. Nosotros ten¨ªamos problemas con nuestra compa?¨ªa de antes, la independiente. Nos pasaron cosas surrealistas. Nos cambiaron una portada sin consultarnos, el disco Hostal Pimodan no pudimos sacarlo de la compa?¨ªa, solo nos dejaron llevarnos un CD con cinco segundos de cada canci¨®n, porque no se fiaban de nosotros, tem¨ªan que lo colg¨¢ramos en internet. Vamos, que era una indie que nos controlaba m¨¢s que una multinacional.
- P. ?Y ahora os sent¨ªs m¨¢s independientes en Universal?
- R. No te dir¨¦ que las multinacionales no controlen. Pero nosotros hemos tenido suerte, porque Universal no tiene muchas bandas en Espa?a de nuestro target. Nuestros "compa?eros" son la gente de Operaci¨®n Triunfo, o cantautores latinos, as¨ª que a nosotros no nos hacen mucho caso, nos dejan hacer un poco lo que queremos, estamos comodicos, la verdad. Cuando proponemos algo, un nuevo disco, nos dan manga ancha, no se meten demasiado.
- P. En estos 20 a?os, en la industria ha pasado algo que no preve¨ªan ni las propias discogr¨¢ficas. De pronto, bandas que antes se encuadraban en lo independiente, se han convertido en fen¨®menos de masas, como vosotros, carne m¨¢s de estadios, que de peque?as salas. Cuando empezasteis, supongo, no os planteabais tocar en un sitio como el WiZink Center de Madrid, donde entran m¨¢s de 10.000 personas.
- R. ?Qu¨¦ va! Nuestra aspiraci¨®n m¨¢xima era la Joy Eslava de Madrid, como mucho. Pero hemos ido creciendo al mismo ritmo que ha crecido la industria. A muchos grupos como nosotros, al principio, la industria no nos quer¨ªa. Pero son los fans quienes hacen suyos los grupos. Ellos deciden. Y la industria no ha tenido m¨¢s remedio que reaccionar. Adem¨¢s, es absurdo pretender predecir qu¨¦ va a pasar en un sector como este. Incluso dentro de las propias bandas. Cuando grabamos Alta fidelidad, uno de nuestros mayores ¨¦xitos, no pens¨¢bamos ni siquiera en meterla en Cronol¨¢nea, nuestro disco de entonces. Es que no era ni un descarte. Se hizo a ¨²ltima hora. Con la relajaci¨®n que te da haber acabado un disco, y haber decidido qu¨¦ canciones iba a llevar. Y de pronto, un d¨ªa en el estudio, nos sali¨® casi sin querer, como jugando. Decidimos meterla en el ¨²ltimo momento, y ahora es una de las que m¨¢s corea el p¨²blico en nuestros conciertos. Con esto te quiero decir que es muy complicado saber de antemano qu¨¦ va a tener ¨¦xito y qu¨¦ no. Es normal que las grandes multinacionales se equivocaran con las bandas indies hace dos d¨¦cadas.
- P. ?Y no estigmatiza estar con una compa?¨ªa grande?
- R. S¨ª, sobre todo al principio, hace 10 a?os. Al principio nos daba coraje, porque mucha gente que nos segu¨ªa empez¨® a criticarnos, y nosotros segu¨ªamos siendo los mismos. Con una l¨ªnea de evoluci¨®n musical coherente, y decidida por nosotros. Otra cosa es que a algunos no les guste esa evoluci¨®n, que eso s¨ª que lo puedo entender. A m¨ª me pasa como oyente. Por ejemplo, con Wild Nothing: solo me gustan sus dos primeros discos. El resto no lo escucho. Y hay mucha gente que me ha dicho que de nuestra discograf¨ªa solo les gustan los dos primeros, Viaje de estudios y Hostal Pimodan. Y me parece genial. ?Sabes por qu¨¦? Porque ah¨ª est¨¢n, esos discos ya est¨¢n hechos y los pueden disfrutar. Lograr que a alguien le gusten dos de tus discos ya es toda una proeza.
- P. Pero este cambio en la industria ha conllevado un cambio en la tipolog¨ªa de los seguidores de bandas como la vuestra. Hoy sucede lo que hace 20 a?os parec¨ªa impensable. Que una misma persona tenga en su estanter¨ªa un disco de Lori Meyers y, al lado, otro de Alejandro Sanz.
- R. ?C¨®mo puede ser malo algo as¨ª? La industria se ha abierto, y el p¨²blico tambi¨¦n. Y eso solo puede ser bueno. Adem¨¢s, no es un fen¨®meno tan nuevo. Ya pas¨® en los noventa con Nirvana. Era un grupo poco destinado al ¨¦xito de masas, pero si escuchas ahora el Nevermind entiendes lo que pas¨®: es un disco plagado de ¨¦xitos. Las melod¨ªas son todas perfectas. Si me hubiera encontrado con Kurt Cobain le habr¨ªa dicho: "Sois un h¨ªbrido entre Pixies y los Beatles, pero con las guitarras m¨¢s sucias. Que lo sepas". ?C¨®mo pod¨ªa no tener ¨¦xito un disco as¨ª? Por eso los pinchaban en las radiof¨®rmulas, y los fans de Alejandro Sanz o Ricky Martin tambi¨¦n se compraban el disco de Nirvana. Este es un debate que no existe en Inglaterra o Estados Unidos, por ejemplo. All¨ª todas las bandas aspiran a tocar en estadios, por muy independiente que sea su m¨²sica.
- P. Entre vuestras influencias est¨¢n los tambi¨¦n granadinos Los Planetas y Lagartija Nick, pero sobre todo bandas de fuera como Teenage Fanclub, Dinosaur Jr., The Wedding Present, Pixies... ?Hay una dependencia excesiva, entre las bandas espa?olas, del rock anglosaj¨®n?
- R. Ya no. Nuestras referencias reales son Los Brincos o Los ?ngeles. Tocaban temas anglosajones porque se lo ped¨ªan. Pero nosotros hemos bebido de ellos despu¨¦s, y las bandas de ahora ya tienen su propia personalidad. Tocamos lo que queremos, no lo que nos piden. Con influencias de las otras bandas que escuchamos, claro, pero el rock de aqu¨ª tiene ya identidad propia.
- P. Os he o¨ªdo decir que 20 a?os, 21 canciones no es un disco de grandes ¨¦xitos. Pero tiene toda la pinta de ser un recopilatorio de grandes ¨¦xitos.
- R. No lo es, para empezar, porque nos dejamos fuera algunos de nuestros temas m¨¢s famosos y que m¨¢s nos piden en los conciertos, como Luci¨¦rnagas y mariposas, por ejemplo. ?Y eso por qu¨¦ es? Porque las canciones las han decidido nuestros amigos, nosotros no hemos intervenido. Y hay caras B, o la primera versi¨®n que hicimos en maqueta de Mi realidad, nuestro mayor ¨¦xito, que est¨¢ tocado con una guitarra espa?ola. Es m¨¢s bien un homenaje en forma de libro, porque cada amigo ha escrito un texto sobre qu¨¦ ha significado en su vida la canci¨®n que ha elegido. Es una tonter¨ªa hacer un grandes ¨¦xitos al uso en la ¨¦poca de internet y Spotify.
- P. Llenar el WiZink Center de Madrid va a ser un hito en vuestra carrera. Y algo muy dif¨ªcil. ?C¨®mo va la venta de entradas?
- R. Va bien. Y quedan seis meses todav¨ªa. De todas formas, es curioso que est¨¢ m¨¢s preocupado nuestro entorno que nosotros por si llenamos o no llenamos. Para m¨ª tocar all¨ª ya es la hostia. Pero s¨ª, espero que llenemos, por mi madre. Que est¨¢ muy preocupa¨ªca, la pobre.
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