Por qu¨¦ el nuevo v¨ªdeo de Rosal¨ªa es un manual contra los celos
'Cuando pienso en tu mir¨¢' es un retrato, a veces obvio a veces impl¨ªcito, del control machista
Esa Espa?a de la que habl¨® Rosal¨ªa en Malamente no hace ni dos meses, la profunda y palpitante, sigue su historia en Cuando pienso en tu mir¨¢, la nueva canci¨®n que, los que saben, dicen que es una buler¨ªa por sole¨¢ tirando hacia canti?as. Lleva desde las 23.59 del lunes 23 en la web y m¨¢s de 230.000 reproducciones. En cuatro minutos, crea y destruye en un cuadro costumbrista algunas de las ideas m¨¢s mohosas y arraigadas del machismo, las que tienen que ver con el control y la posesi¨®n de la mujer a la que se ama.
No es la primera vez ni ser¨¢ la ¨²ltima que se cante a los celos, s¨ª es de las pocas ¡ªsi comparamos con la inmensa cantidad de veces que lo hace para colocarlos como prueba del amor¡ª que lo hace para reflejar su violencia y su dominio constante. Para aniquilarlos.
Rosal¨ªa ya lo hizo con el anterior single, retratar una parte de la sociedad que existe, todav¨ªa, y que est¨¢ enraizada con los prejuicios y los estereotipos del amor rom¨¢ntico. La cantante, que formar¨¢ parte del elenco de Dolor y gloria, la nueva pel¨ªcula de Pedro Almod¨®var, hizo de Malamente el cap¨ªtulo I del ¨¢lbum El Mal Querer. Ahora, Cuando pienso en tu mir¨¢ es el III, el que habla de los celos, el que refleja la banalidad y la suavidad aparente con las que aparecen, con las que se justifican.
Me da miedo cuando sales / sonriendo pa la calle / porque todos pueden ver / los hoyuelitos que te salen / Y el aire cuando pasas / por levantarte el cabello / y el oro que te viste / por amarrarse a tu cuello / y el cielo de la luna / porque t¨² quieras mirarlo / y hasta del agua que bebes / cuando te moja los labios. / Pienso en tu mir¨¢ / tu mir¨¢ clav¨¢ / es una bala en el pecho.
Tan bonita que amenazas / cuando callas me das miedo / tan fr¨ªa como la nieve / cuando cae desde el cielo del cielo. / Cuando sales por la puerta / pienso que no vuelves nunca / y si no te agarro fuerte / siento que ser¨¢ mi culpa. / Pienso en tu mir¨¢ / tu mir¨¢ clav¨¢ / es una bala en el pecho.
Estas son algunas de las ideas que dibuja a ritmo de flamenco el videoclip de este ¨²ltimo tema, la ¨¦tica y la est¨¦tica de la toxicidad del amor rom¨¢ntico. Y de su destrucci¨®n.
El encierro
Desde el primer segundo se adelanta el choque y el objetivo. Un primer plano enfoca una flamenca de pl¨¢stico que cuelga del retrovisor de un cami¨®n, se mueve con el traqueteo de la marcha. El cami¨®n enfila el final de una calle, salt¨¢ndose un ceda el paso, hacia la fachada de una casa, hacia el interior de esa casa. Es uno de los primeros signos que da la violencia de g¨¦nero: el aislamiento.
La vigilancia y la propiedad
Una vez dentro de la casa, la comodidad, los regalos, la buena vida¡ Pero dentro de esas cuatro paredes y con ojos que vigilen. Carabinas del siglo XXI vestidas de luto, adorn¨¢ndola y guard¨¢ndola, esper¨¢ndola de noche, velando por su pureza con un baile de manos alrededor de su rostro; un vampiro que muerde, con colmillos de oro, eso s¨ª, para marcar, para absorber, para delimitar la posesi¨®n y la pertenencia; y una esclava grabada con un enorme nombre: Var¨®n Dandy.
La intimidaci¨®n
El control y la intimidaci¨®n que destila una mirada como idea principal, en la letra y en la imagen del videoclip: hombres a los que no les hace falta hablar para dar una orden, para someter y poseer, que educan a sus hijos en esa misma idea de lo que es el amor, actitudes y poses m¨¢s o menos sutiles que encierran violencia de un lado y miedo del otro y un dominio que convierte cualquier movimiento en una amenaza, cualquier espacio en un zulo y que va agotando el aire, que se vuelve cada vez m¨¢s denso y m¨¢s pesado. Y que acogota, hasta que ya no se puede m¨¢s.
La hartura
En esta historia los celos no ganan. Las carabinas se convierten en apoyo, alejan las manos de su rostro en una especie de aleteo de dedos, la hartura se prepara cargando una escopeta con aceitunas negras frente a una botella de licor y bajo la mirada de un ojo seco de la cabeza de un ciervo disecado en la pared. Aparece un bailaor moviendo los pies sobre brasas encendidas.
Y entonces las mujeres danzan, haciendo temblar los cimientos de esa casa, haciendo resquebrajarse el techo, que suelta cascarillas sobre un bodeg¨®n limones, granadas, naranjas, an¨ªs del mono, ajos, un frasco de Var¨®n Dandy, cigarrillos, vino, uvas, naranjas, alcachofas, cebollas y una figura de Lladr¨®, una mujer de porcelana que tambi¨¦n despierta, y canta.
El despertar
A ese despertar le sigue la violencia que produce la desesperaci¨®n de perder el control: un hombre lo destroza todo con un bate de b¨¦isbol. Pero ella ya se ha vestido, en rojo y amarillo, para el cambio, una diminuta pistola de oro cuelga en un collar sobre su pecho, y todas aquellas mujeres que la vigilaban son ahora sus filas, despojadas del luto, ense?ando el rostro. La mujer de porcelana sonr¨ªe, ense?a sus hoyuelos mientras le cae sobre la cabeza algo de ese polvo viejo de un techo que sigue cay¨¦ndose. Ella abandona esas cuatro paredes y en medio del asfalto, aparece el desastre humeante y ardiente de un cami¨®n volcado y vac¨ªo con su nombre grabado en el frente y del que un hombre sale a trav¨¦s de la luna. ?l huye y ella, de pie sobre ese cami¨®n tumbado, gana.
Sobre ese cami¨®n, con el m¨®vil en la mano, Rosal¨ªa escribe. Son unos WhatsApps que configuran los cr¨¦ditos del videoclip. Escribe: Los v¨ªdeos de Pienso en tu mir¨¢ [producci¨®n musical de El Guincho y Rosal¨ªa con mezcla de Jaycen Joshua] y Malamente, cap¨ªtulos uno y tres del ¨¢lbum El Mal Querer, de Rosal¨ªa, fueron rodados durante cinco d¨ªas de Mayo de 2018 en Barcelona, Badalona, Hospitalet y Barber¨¤ del Vall¨¨s. [Los dos han sido dirigidos y producidos por CANADA].
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