Nacionalconservadores
La pregunta del portavoz iba dirigida al Europarlamento, pero igualmente se la podr¨ªamos hacer al PP: ?Qu¨¦ pasar¨¢ ma?ana?
En 1988, un grupo de j¨®venes h¨²ngaros fundaron clandestinamente el partido Fidesz. Viktor Orb¨¢n era uno de ellos. So?aban con liberar su pa¨ªs de la dictadura comunista, insert¨¢ndolo en la Europa pluralista. Tras la ca¨ªda del Muro, Fidesz tardar¨ªa una d¨¦cada en asentarse como la principal formaci¨®n de centroderecha en Hungr¨ªa. El Partido Popular Europeo le dar¨ªa la bienvenida en su seno. La Internacional Liberal, tambi¨¦n. Finalmente, el pa¨ªs ingresaba en la UE culminando los anhelos bajo los que Fidesz fue fundado.
Ayer, treinta a?os despu¨¦s, el Parlamento Europeo vot¨® que Orb¨¢n y su partido han llevado a Hungr¨ªa en la direcci¨®n opuesta: a la vanguardia del movimiento reaccionario. Una historia de giro radical que viene con moraleja para Espa?a.
En 2010, cuando llegaban al Gobierno tras a?os de mandato socialdem¨®crata, Orb¨¢n tuvo que elegir c¨®mo enfrentarse a Jobbik, un partido de extrema derecha que crec¨ªa exponencialmente. Un dilema en suelo inestable: el continente se ve¨ªa asolado por la Gran Recesi¨®n y Orb¨¢n llevaba ocho a?os en la oposici¨®n construyendo un discurso antisistema basado en la antizquierda. El camino que menos resistencia ofrec¨ªa era el de un nacionalismo conservador que buscara enemigos externos, equiparando su ideolog¨ªa con la patria h¨²ngara. Y hacia all¨¢ fue Orb¨¢n.
Es cierto que el PP es una formaci¨®n con una corriente centrista muy sustanciosa, que ha gobernado Espa?a bajo par¨¢metros europe¨ªstas y sin atentar contra nuestras instituciones fundamentales como Fidesz lo hizo con las de Hungr¨ªa. No es menos cierto, sin embargo, que en la oposici¨®n y con Ciudadanos devorando votos, el ¨¢mbito moderado de la formaci¨®n se ha visto disminuido. Casado parece leer que existe espacio para crecer (y competencia por aparecer) a la derecha. La historia de Orb¨¢n muestra que un liderazgo sin complejos que se enfrente a una situaci¨®n dif¨ªcil puede llevar a un partido de talante liberal y pluralista hasta el extremo nacionalconservador. Catalu?a, la inmigraci¨®n o la polarizaci¨®n ideol¨®gica pueden servir como palancas.
Ayer, el PP se abstuvo en el Europarlamento. De hecho, tres de sus miembros votaron en contra, coloc¨¢ndose as¨ª junto a la extrema derecha. Esteban Gonz¨¢lez Pons explicaba: ¡°Hoy es Hungr¨ªa, ?y ma?ana?¡±. La pregunta del portavoz iba dirigida al Europarlamento, pero igualmente se la podr¨ªamos hacer al PP: ?qu¨¦ pasar¨¢ ma?ana? @jorgegalindo
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