Espa?a vira rumbo a estribor
El pacto andaluz de PP y Cs cambia las inercias de la pol¨ªtica y amenaza el porvenir del sanchismo
El pacto de investidura y de legislatura que ultiman el PP y Ciudadanos con la aquiescencia pasiva de Vox tanto representa un cambio de ¨¦poca en Andaluc¨ªa como predispone un cambio de inercia, de rumbo, en los humores de la pol¨ªtica nacional. Vira Espa?a de babor a estribor. Se perfila un escarmiento a las veleidades de S¨¢nchez en su camino de supervivencia, m¨¢s o menos como si el mensaje de la unidad territorial delimitara el mejor o el ¨²nico escenario de la victoria.
El presidente del Gobierno tuvo el m¨¦rito de izar el pabell¨®n socialista en La Moncloa sin m¨¢s tripulaci¨®n que 84 diputados ¡ªaqu¨ª terminan las met¨¢foras n¨¢uticas¡ª, devolvi¨® al PSOE el centro del escenario, pero los mismos aliados que ungieron su investidura se han convertido ahora en sus principales adversarios. Y no s¨®lo porque reniegan de los Presupuestos o porque han amenazado la legislatura, sino porque la necesidad o la frivolidad con que S¨¢nchez los ha cortejado deteriora la reputaci¨®n, las opciones, del l¨ªder socialista en la yincana electoral que se le avecina: municipales, auton¨®micas, europeas y, acaso, generales.
La idea de aplazar estas ¨²ltimas al ¨²ltimo nanosegundo de 2020 ¡ªas¨ª se lo ha transmitido a los secretarios regionales¡ª representa m¨¢s un ejercicio de voluntarismo que una posibilidad. Es verdad que le conviene sacudirse la coyuntura, distanciarse del efecto andaluz, sustraerse a la inercia liberal-conservadora, pero el desencuentro con el soberanismo y la alianza precaria con Iglesias ¡ªun rival directo m¨¢s que un aliado¡ª se a?aden a las inquietudes de la familia socialista y diagnostican prematuramente el s¨ªndrome de la soledad monclovita. Barones, ministros y diputados empiezan a exteriorizar los recelos a la estrategia pol¨ªtica de S¨¢nchez.
La oportunidad o la tentaci¨®n de cambiarla qued¨® reflejada en el pleno del Congreso del mi¨¦rcoles. Tanto endurec¨ªa S¨¢nchez el tono contra el soberanismo, tanto se percib¨ªa un proceso de transformaci¨®n, de rectificaci¨®n, cuya flexibilidad pone a prueba la credibilidad del presidente. La necesidad de recuperar el voto nacional lo constri?e a exhibirse como antagonista de la subversi¨®n territorial despu¨¦s de haber sido condescendiente con los partidos independentistas.
Es un camino de redenci¨®n electoral que exige de los votantes una crisis de amnesia y que se a?ade a la vehemencia con que el propio S¨¢nchez va a proponerse a s¨ª mismo como ant¨ªdoto al monstruo de las derechas. La implicaci¨®n de Vox ¡ªpasiva o activa¡ª en la din¨¢mica de los cambios puede proporcionarle la mejor munici¨®n contra las supersticiones y los fantasmas totalitarios, pero el ejemplo andaluz, fortaleza de la soberan¨ªa socialista en cuatro d¨¦cadas, sobreentiende que Casado y Rivera, Rivera y Casado, han emprendido el camino de evacuaci¨®n del sanchismo convirtiendo el 155 en la soluci¨®n cabal¨ªstica m¨¢s propicia.?
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