Bosjes: dormir en una granja en el ed¨¦n sudafricano
Con una capilla aconfesional de dise?o supers¨®nico, esta casa de hu¨¦spedes de cinco habitaciones est¨¢ construida en una granja de 1790 y rodeada de todas las plantas que aparecen en la Biblia
Una finca con cebras, avestruces y ¨¢rboles frutales en el ¨¢rea de vi?edos de Western Cape (a una hora al norte de Ciudad del Cabo, Sud¨¢frica), enmarcada por una poderosa monta?a color chocolate, la Waaihoek, ser¨ªa ya un inicio lo suficientemente ex¨®tico como para empezar a salivar. Pero eso es solo el aperitivo. Este lugar en el valle de Breede acoge cinco habitaciones en lo que fue el antiguo granero de una granja del siglo XVIII, y un templo "alado" contempor¨¢neo que se mimetiza con la orograf¨ªa de la zona y se ha convertido en lugar de peregrinaci¨®n para amantes del dise?o y la arquitectura y refugio de viajeros.
La historia de las dos familias (Botha y Sofberg) que pusieron la granja en funcionamiento, las mismas que la regentan hoy y que siguen explotando sus tierras, se remonta a hace casi tres siglos (1830); aunque el edificio principal de la granja data de la ¨¦poca en la que la colonia holandesa se asent¨® en esta zona de Sud¨¢frica: 1790, como reza la inscripci¨®n en el front¨®n. Pero no fue hasta hace poco, en 2016 tras un viaje inici¨¢tico a Israel, cuando decidieron darle una vuelta al concepto y construir una peque?a iglesia aconfesional junto al pante¨®n familiar, al mismo tiempo que hac¨ªan algo para contribuir al desarrollo de la comunidad local, creando puestos de trabajo y fomentando el turismo de la zona.
Sus visitantes encuentran recogimiento en el singular templo, pero tambi¨¦n esparcimiento en un destino casi sin tocar "para hacer caminatas, rutas de bici de monta?a y visitar aut¨¦nticas bodegas alejadas del turismo de masas", explica Carlen Vorster, responsable de marketing de Bosjes, como se llama la propiedad.
Todos caben bajo las alas de un templo sin religi¨®n
Para el proyecto se cont¨® con el estudio de arquitectos londinense Steyn Studio y el de interiorismo Liam Mooney Studio, quienes seg¨²n Vorster "entendieron perfectamente el briefing de los propietarios". La naturaleza que rodea la granja fue la musa del arquitecto Coetzee Steyn a la hora de imaginar la futura forma de la capilla de Bosjes, concretamente "el caracter¨ªstico relieve curvado de los?hol bol (juegos c¨®ncavos-convexos) del paisaje de Cape Dutch".
Adem¨¢s, "por deseo espec¨ªfico de los propietarios, para los que la lectura tiene un especial significado", interpret¨® el Salmo 36:7 de la Biblia ("Todas las creaciones encuentran protecci¨®n debajo de tus alas"), algo que no fue del todo sencillo trasladar a la realidad: "Aunque a simple vista parece elegante y simple, la construcci¨®n de la capilla ten¨ªa muchas m¨¢s complicaciones de lo que aparenta", asegura Coetzee. "Tuvimos que desarrollar algunas soluciones pioneras que se llevaron a cabo por primera vez en Sud¨¢frica en este proyecto. El primer reto fue mantener la estructura, luchando contra unos fuertes vientos que hac¨ªan que la mitad del material saliera volando".
Otro de los requisitos que estableci¨® el cliente era que fuese un templo aconfesional, un rinc¨®n para la oraci¨®n y la reflexi¨®n para cualquiera que se acercase a ¨¦l. Por eso, ni en su exterior ni en su interior, se aprecian referencias simb¨®licas concretas, aparte de las cruces insinuadas en la construcci¨®n del acristalamiento. "Es un espacio muy espiritual, cuya energ¨ªa se nota cuando se visita y, que por su buena ac¨²stica, es tambi¨¦n un gran lugar para actuaciones musicales y conciertos y un destino de bodas muy popular y ¨²nico", explica Coetzee. A su alrededor hay un cuidado jard¨ªn, dise?ado por el estudio de paisajistas CNDV con plantas nombradas en la Biblia.
Tradici¨®n sudafricana e influencia holandesa
El alojamiento, por su parte, es un bed and breakfast muy privado e ¨ªntimo que cuenta solo con cinco habitaciones, un restaurante y un jard¨ªn donde tomar el t¨¦ rodeado de vegetaci¨®n, y todo un destinazo para conocer la cara menos trillada de los vi?edos sudafricanos y la naturaleza de la zona, perfecta para practicar cualquier tipo de deporte outdoor.
El estudio de Liam Mooney, responsable del redise?o de todos los espacios de la granja, ten¨ªa claro que quer¨ªa conservar el m¨¢ximo n¨²mero de elementos originales del edificio original. Por eso mantuvo los muros del siglo XVIII con sus desconchones y desperfectos y muchos de los muebles, como los t¨ªpicos bancos de Cape Dutch, hechos de rejilla y con incrustaciones de hueso. Tambi¨¦n introdujo algunos gui?os a la tradici¨®n holandesa como los espejos convexos, tan recurrentes en la pintura medieval centroeuropea, que contrastan con una decoraci¨®n sobria y limpia en la que priman las l¨ªneas puras y materiales como el roble y el lat¨®n.
Ning¨²n detalle qued¨® en el tintero. S¨¢banas, mantas, cojines¡ Para toda la propiedad, y en especial para las cinco habitaciones de la casa de hu¨¦spedes, eligieron tejidos artesanales de la marca belga de Le Cuona, famosos por su calidad y delicadeza; y para la decoraci¨®n de los ba?os se inspiraron de nuevo en el dise?o de las tradicionales rejillas de las sillas de Cape Dutch, que se replicaron en la disposici¨®n geom¨¦trica de los azulejos "haciendo una declaraci¨®n gr¨¢fica que se relaciona con la historia de la granja".
La influencia holandesa y la herencia sudafricana se ponen tambi¨¦n de manifiesto en el restaurante Bosjes Kombuis, un bistr¨® capitaneado por el chef Pete Goffe-Wood ubicado en un edificio de nueva construcci¨®n. Su estructura reproduce la forma del tejado a dos aguas del antiguo granero con "los materiales t¨ªpicos de Overberg (regi¨®n en Sud¨¢frica al este de Ciudad del Cabo): piedra, pizarra y acero", explica el arquitecto, y "el enlace de vidrio que se encuentra en el centro del edificio es un gui?o a los frontones t¨ªpicos de la arquitectura de Cape Dutch".
Su exterior es una de las im¨¢genes m¨¢s ic¨®nicas de la propiedad, decorado con un mural obra de los artistas locales?Lucie de Moyencourt y Michael Chandler. El ?rbol de la vida de Bosjes explora la historia de la granja desde la tradici¨®n holandesa del azulejo de la ciudad de Delft (al oeste del pa¨ªs centroeuropeo). Formado por 366 baldosas (que se realizaron en 366 d¨ªas) representa la particular "arca de No¨¦ de Bosjes", con su fauna y flora. Abierto escenifica el d¨ªa en la granja, cerrado, la noche.
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