El genial Morphy, a ciegas a los 12 a?os

La corta vida del estadounidense Paul Morphy (1837-1884), de padre espa?ol, da para un guion de pel¨ªcula excelente. Y su precocidad es equiparable con la del actual campe¨®n del mundo, Magnus Carlsen: a los 12 a?os gan¨® un duelo a tres partidas al reputado h¨²ngaro Lowenthal, y ya era capaz de firmar victorias muy brillantes con los ojos vendados, como la que glosamos en este v¨ªdeo.

Su vida fue un camino de triunfos y rosas hasta que viaj¨® a Europa y gan¨® a todos sus rivales, excepto al m¨¢s deseado, el brit¨¢nico Howard Staunton, quien se neg¨® a jugar con el portento estadounidense, alegando las excusas m¨¢s peregrinas. Esa frustraci¨®n le hizo mucho da?o psicol¨®gico, a pesar de que los datos y la opini¨®n p¨²blica lo calificaban como el indiscutible campe¨®n del mundo oficioso. Se retir¨® del ajedrez a los 22 a?os, y los 25 restantes fueron muy tristes. Sin embargo, Bobby Fischer y muchos m¨¢s lo incluyeron entre los mayores genios de la historia. Tal fue su cegadora brillantez.