La excepcionalidad permanente
El objetivo partidista ha pasado por encima de la verdad, como cuando la vicepresidenta afirma que la Constituci¨®n espa?ola no reconoce la igualdad entre hombres y mujeres
Pocas veces creemos vivir en un momento de normalidad. Detectamos incertidumbres, elementos prometedores o amenazantes que van a cambiar nuestra vida. A veces es real; otras veces es una ilusi¨®n. A menudo, lo que consider¨¢bamos determinante era un detalle y despu¨¦s vemos que hab¨ªamos pasado por alto lo decisivo.
En unos a?os, la pol¨ªtica espa?ola ha vivido una transformaci¨®n. Se han producido cosas in¨¦ditas: un asalto al orden constitucional que oblig¨® a la activaci¨®n de un art¨ªculo que no se hab¨ªa empleado antes, el triunfo de una moci¨®n de censura, la fragmentaci¨®n de la izquierda y despu¨¦s de la derecha. Ha habido componentes espec¨ªficamente espa?oles; otros pueden vincularse a cuestiones m¨¢s globales, a un malestar difuso.
En los ¨²ltimos meses hemos visto tambi¨¦n una normalizaci¨®n de lo extraordinario: vivimos en una situaci¨®n de excepcionalidad permanente. En los meses de gobierno de Pedro S¨¢nchez se han aprobado m¨¢s decretos que en ning¨²n periodo equivalente en democracia. No es algo que haya hecho solo este Ejecutivo: casi la mitad de las leyes que aprob¨® el Gobierno de Mariano Rajoy entre 2011 y 2015, cuando contaba con mayor¨ªa absoluta, se aprobaron por este procedimiento. El requisito de ¡°extraordinaria y urgente necesidad¡± parece ser lo que le conviene en cada momento a un Gobierno que ha confundido la Administraci¨®n con su inter¨¦s electoral: lo hemos visto, por ejemplo, en las cuentas institucionales en las redes. En ocasiones, el objetivo partidista ha pasado por encima de la verdad, como cuando la vicepresidenta afirma que la Constituci¨®n espa?ola no reconoce la igualdad entre hombres y mujeres. En otras hay un reciclaje: por ejemplo, los viernes sociales, para aprobar leyes con las Cortes cerradas, empleando un mecanismo antes utilizado para situaciones de urgencia. La precipitaci¨®n ha producido chapuzas ¡ªdesde la exhumaci¨®n de Franco hasta los permisos de paternidad¡ª y la cr¨ªtica se acalla con una mezcla de reivindicaci¨®n moralizante y blindaje sarc¨¢stico: cuestionar los procedimientos es un rechazo a los fines, parece ser la idea. Las prisas crean disfuncionalidades que complican conseguir los objetivos deseados. Y la instrumentalizaci¨®n de las instituciones contribuye a crear un panorama lleno de l¨ªneas rojas para los dem¨¢s que nosotros nos saltamos alegremente porque, como le dijo Janis Joplin a Leonard Cohen, prefiero a los hombres apuestos pero en tu caso har¨¦ una excepci¨®n. @gascondaniel
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