Hacer hablar a la fachada

Hay ni?os y las ni?as en riesgo de exclusi¨®n social de todas las edades. Por eso este edificio es uno y tres a la vez. Las necesidades de un beb¨¦ que gatea y las de un adolescente son muy distintas, y un edificio debe reconocerlas. Eso hace la sede de la Fundaci¨®n Germina que ha culminado Ferm¨ªn V¨¢zquez y su estudio b720 en Badalona (Barcelona). El edificio habla, desde una cuidad¨ªsima materialidad de hormig¨®n proyectado y madera, de huecos y muro y de suma de partes. Es uno y tres a la vez y esas partes est¨¢n se?aladas en la fachada y conectadas, con posibilidad de independizarse, en el interior.

El barrio de Badalona en el que se ubica el inmueble es un vecindario con pocos recursos y bastante atrevimiento. Por eso la Fundaci¨®n convive con un edificio de viviendas sociales de llamativa fachada roja y grandes huecos (obra de bcq arquitectos). De ese inmueble toma prestado el tama?o de las ventanas. Es un reconocimiento a quienes llegaron antes e indica una voluntad de construir barrio, de sumar fuerzas, por encima de se?alar un edificio.

Ese pararse a pensar en los dem¨¢s: usuarios, vecinos y visitantes del barrio, honra a los arquitectos del nuevo inmueble. Pero adem¨¢s le confiere autoridad, lo arraiga en el lugar. La libertad compositiva de los arquitectos a?ade a esa sobriedad una hermosa austeridad, una vestimenta creativa pero no estridente, acertada. De todo eso habla la fachada. Lo mejor, sin embargo, es que ese rostro urbano es solo el principio de lo que hay detr¨¢s: la cara de un interior igualmente cuidado, dispuesto, organizado, construido y se dir¨ªa que domesticado para acoger el estudio y el ocio de los ni?os.

El nuevo edificio, de seis cajas apiladas que contienen las seis plantas, da unidad a un programa fraccionado gracias a la fachada ¡ªpartida y entera a la vez¡ª los espacios comunes y los niveles superiores donde se encuentra la zona administrativa. El orden cartesiano de las cajas est¨¢ roto por dislocaciones que provocan la aparici¨®n de espacios de diversos tama?os que enriquecen el interior y el exterior del inmueble.

Ferm¨ªn V¨¢zquez explica que el ajardinamiento ir¨¢ colonizando con el tiempo los espacios exteriores, cerrados para el uso de los ni?os. Tambi¨¦n que las carpinter¨ªas de madera, los toldos practicables que resguardan el inmueble del azote del sol en la fachada sur, la cubierta ajardinada, el uso de materiales de bajo impacto y la eficiencia de las instalaciones han logrado que el edificio obtenga la certificaci¨®n energ¨¦tica A. El coste ha sido de 1.300 euros por metro cuadrado, seg¨²n el arquitecto.