Unas 800.000 personas fueron asesinadas en el genocidio de Ruanda, una de las p¨¢ginas m¨¢s tristes de la historia universal, entre abril y julio de 1994. En la imagen, una mujer ruandesa, con su hijo a la espalda, se derrumba en la carretera de camino al campamento de refugiados de Kibumba y Goma, el 28 de julio de 1994.REUTERS FILE PHOTO (REUTERS)La mayor¨ªa de las v¨ªctimas fueron tutsis, aunque tambi¨¦n fueron exterminados hutus, la etnia a la que pertenec¨ªan los autores de la matanza, soldados del Ej¨¦rcito y miembros de la milicia extremista Interahamwe (los que matan juntos). En la imagen, refugiados ruandeses pasan junto a los cad¨¢veres de un centenar de personas, cuyos restos fueron pisoteados en la ciudad fronteriza de Goma (en el entonces Zaire; hoy Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo), mientras huyen de la ¨²ltima ofensiva del Frente Patri¨®tico, el 18 de julio de 1994.PASCAL GUYOT (AFP)El mayor genocidio registrado en el mundo, seg¨²n la ONU, comenz¨® la noche del 6 de abril de 1994, horas despu¨¦s de que el presidente del pa¨ªs, Juvenal Habyarimana, muriera tras ser alcanzado por dos misiles el avi¨®n en el que se dispon¨ªa a aterrizar en el aeropuerto de Kigali. En la imagen, varias personas ayudan a levantarse a un herido por los disparos de los miembros del Frente Patri¨®tico de Ruanda en un campamento de Kigali, el 1 de julio de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)Juvenal Habyarimana, que hab¨ªa llegado al poder en 1973 mediante un golpe de Estado, pertenec¨ªa a la etnia hutu, mayoritaria en el pa¨ªs (representaba el 85% de la poblaci¨®n antes del conflicto). En la imagen, refugiados ruandeses cruzan la frontera de Rusumo a Tanzania, el 30 de mayo de 1994.REUTERS FILE PHOTO (REUTERS)Los hutus atribuyeron el magnicidio a los tutsis del Frente Patri¨®tico Ruand¨¦s (FPR), movimiento guerrillero con el que hab¨ªan librado una guerra civil intermitente desde 1990. En la imagen, un anciano ruand¨¦s, agotado y hambriento, es llevado por familiares a un campamento de refugiados cerca del aeropuerto de Goma (Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo), el 7 de abril de 2019.PASCAL GUYOT (AFP)En cuanto se corri¨® la voz de la muerte del presidente Juvenal Habyarimana, los hutus comenzaron a matar a tutsis y miembros moderados de su propia etnia: hombres, mujeres, ni?os y ancianos fueron masacrados a tiros y machetazos. En la imagen, desplazados ruandeses, que hu¨ªan del ba?o de sangre, transportan contenedores de agua a sus chozas en el campamento de refugiados de Benaco en Tanzania, cerca de la frontera con Ruanda, el 17 de mayo de 1994.Karsten Thielker (AP)El 7 de abril, la primera ministra, Agathe Uwilingiyimana, y los soldados belgas de las fuerzas de la ONU que la custodiaban fueron asesinados brutalmente por los soldados del Gobierno. En la imagen, un soldado ruand¨¦s enfermo de c¨®lera, en un hospital militar improvisado de Goma, el 26 de julio de 1994.Corinne Dufka (REUTERS)Despu¨¦s de la masacre de sus tropas, B¨¦lgica retir¨® al resto de sus fuerzas, seguida por otros pa¨ªses, lo que llevar¨ªa a que el 21 de abril la UNAMIR (Misi¨®n de Asistencia de Naciones Unidas para Ruanda, en sus siglas inglesas) se viera obligada a reducir sus efectivos. En la imagen, un ruand¨¦s de la etnia hutu con una cruz huye junto a decenas de personas hacia la frontera de Tanzania desde el campamento de refugiados en Magara, cerca de la ciudad de Ngozi (norte de Burundi), el 31 de marzo de 1995.ALEXANDER JOE (AFP)Ruanda, con ocho millones de habitantes, se convirti¨® en una inmensa fosa com¨²n ante la pr¨¢ctica pasividad de la comunidad internacional. En la imagen, una ni?a ruandesa ante una fosa com¨²n donde decenas de cad¨¢veres van a ser sepultados, el 20 de julio de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)Las matanzas continuaron hasta principios de julio, cuando m¨¢s de un mill¨®n y medio de ruandeses, sobre todo hutus, huyeron a Zaire (actual Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo), Tanzania y Burundi ante el avance de las fuerzas del FPR, que acab¨® ocupando Kigali y casi todo el pa¨ªs. En la imagen, rebeldes del Frente Patri¨®tico Ruand¨¦s cargan morteros y otras municiones tras arrebatar los cuarteles de Kanombe a las tropas del Gobierno, el 23 de mayo de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)La ausencia de una reconciliaci¨®n entre los distintos partidos de Ruanda y la falta de respuesta de la comunidad internacional hicieron que la tragedia fuera a¨²n m¨¢s cruel. La capacidad de la ONU de reducir el sufrimiento humano en Ruanda se vio muy constre?ida por la negativa de los Estados miembros a enviar tropas adicionales. En la imagen, pescadores ugandeses amontonan cad¨¢veres en el pueblo de Kasensero, el 20 de mayo de 1994. Los cuerpos fueron transportados por el r¨ªo Akagera desde Ruanda hasta el lago Victoria.STRINGER (REUTERS)En apenas 48 horas, las ciudades fronterizas de Goma y Bukavu vieron llegar a 1,2 millones de refugiados ruandeses. Las infrahumanas condiciones de vida provocaron brotes de c¨®lera, disenter¨ªa, meningitis y otras enfermedades. En la imagen, el joven Nyabimana de 26 a?os muestra las heridas de machete en su cara a un comit¨¦ de la Cruz Roja en Nyanza (Ruanda), el 4 de junio de 1994.Jean-Marc Bouju (AP)El 22 de junio de 1994, el Consejo de Seguridad de la ONU autoriz¨® una misi¨®n humanitaria de las fuerzas francesas, llamada la Operaci¨®n Turquesa, que salvar¨ªa a cientos de civiles en el suroeste de Ruanda. En otras ¨¢reas, los asesinatos siguieron hasta el 4 de julio, cuando el FPR tom¨® el control militar de todo el pa¨ªs. En la imagen, soldados del Gobierno de Ruanda rodeados de civiles que huyen frente al avance del Frente Patri¨®tico de Ruanda, el 17 de julio de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)Los victoriosos tutsis del FPR formaron un Gobierno en Kigali e instaron a los refugiados a regresar al pa¨ªs, pero al mismo tiempo pidieron a la comunidad internacional la formaci¨®n de un tribunal para juzgar a los hutus por genocidio. En la imagen, tres refugiados tutsis se acurrucan para protegerse del fr¨ªo y la humedad mientras pasa junto a ellos un hombre con la pierna amputada, en un campamento al sur de Ruanda, el 20 de mayo de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)Un ni?o armado con una pistola patrulla las calle de Kigali en un autom¨®vil junto a partidarios del Frente Patri¨®tico de Ruanda, el 9 de junio de 1994.ABDELHAK SENNA (AFP)Un ni?o ruand¨¦s espera para recoger agua frente a un grupo de soldados de Estados Unidos en el campo de refugiados de Kibumba (Tanzania), el 2 de agosto de 1994.STRINGER (REUTERS)Refugiados ruandeses transportan alimentos suministrados por la Cruz Roja, el 28 de julio de 1994.REUTERS FILE PHOTO (REUTERS)Una ni?a hutu, perdida entre una multitud de 10.000 refugiados retenidos al intentar cruzar a Zaire (actual Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo), mientras las tropas francesas patrullaban la zona fronteriza, el 21 de agosto de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)Cad¨¢veres de refugiados sorprendidos en plena huida yacen a lo largo de una carretera, a unos 70 kil¨®metros al norte de la frontera entre Ruanda y Tanzania, el 8 de mayo de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)Un refugiado se dirige a una fosa com¨²n con el cuerpo de su hijo, un beb¨¦ muerto por c¨®lera, el 29 de julio de 1994.Corinne Dufka (REUTERS)Un ni?o hu¨¦rfano, con las piernas amputadas por debajo de la rodilla, descansa sobre una colchoneta en un orfanato de Nyanza, al suroeste de Kigali (Ruanda), el 9 de junio de 1994.Jean-Marc Bouju (AP)Ni?os ruandeses imploran a soldados de Zaire que les dejen cruzar la frontera para reunirse con sus madres, que hab¨ªan pasado poco antes, 20 de agosto de 1994.Jean-Marc Bouju (AP)Un ni?o traslada en brazos a otro menor, desfallecido, a su llegada a un orfanato cerca de Goma, antiguo Zaire, el 19 de julio de 1994.Corinne Dufka (REUTERS)Un hombre consuela a su esposa, enferma de c¨®lera, en un campo de refugiados, a 10 kil¨®metros al norte de Goma (Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo), el 21 de julio de 1994.Corinne Dufka (REUTERS)Una ni?a mira al fot¨®grafo entre los cad¨¢veres de compatriotas pisoteados en la frontera oriental de Goma, en el antiguo Zaire, el 7 de abril de 2019.PASCAL GUYOT (AFP)Un rebelde del Frente Patri¨®tico de Ruanda contempla un bate con clavos cerca de un puesto de control de la milicia, el 7 de julio de 1994.CORINNE DUFKA (REUTERS)Tres j¨®venes refugiados transportan bidones de agua distribuidos por militares franceses en el campamento de refugiados de Mugunga, cerca de Goma, el 13 de agosto de 1994.STRINGER (REUTERS)Una mujer hutu y sus hijos descansan durante su huida a Zaire (actual Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo), el 16 de agosto de 1994.PATRICK DE NOIRMONT (REUTERS)
