Casado en Barcelona
La capital catalana es territorio simb¨®lico, y all¨ª va a convocar a toda la derecha a ¡°entender que el enemigo es S¨¢nchez¡±
Pablo Casado presentar¨¢ el lunes su programa en Barcelona. Es l¨®gico. Toda su campa?a est¨¢ vertebrada contra el eje del mal de izquierdistas y nacionalistas que amenazan a Espa?a, cuyo epicentro es Barcelona. As¨ª que all¨¢ va a plantar cara, no como el joven que se puso ante los tanques de Tiananm¨¦n sino como el genuino defensor de Espa?a ¡ª?Pablo y cierra Espa?a!¡ª por m¨¢s que Vox arranque su campa?a en Covadonga atribuy¨¦ndose las esencias carpetovet¨®nicas. Eso s¨ª, va a tener dif¨ªcil no caer en excesos rid¨ªculos porque este asunto, de golpe de efecto en golpe de efecto desde todas las trincheras, ha acabado en registros cada vez m¨¢s histri¨®nicos. Ah¨ª est¨¢ Torra ignorando su derrota en la votaci¨®n del Parlament y atribuy¨¦ndose la mayor¨ªa; lo cual, si bien se mira, no es raro despu¨¦s de convertir el Parlament en un instrumento partidista que cierran y reabren a su antojo seg¨²n les vaya. La raz¨®n cada vez cotiza m¨¢s a la baja.
Claro que Casado en realidad no quiere hacer campa?a contra Torra, para quien reserva un 155 a machamartillo sin m¨¢s, sino contra S¨¢nchez. ¡°El enemigo es S¨¢nchez¡±, eslogan que su secretario general repite como letan¨ªa sin fin. Y ese mensaje de ¡°echar a S¨¢nchez¡±, conjugado en todos los tiempos verbales, no deja de ser un ?V¨¢yase Sr. S¨¢nchez! como remedo de Aznar. A¨²n le falta recorrido para llegar a decir ¡°a m¨ª nadie me habla de derechita cobarde porque no me aguantan la mirada¡±, pero no oculta el sesgo aznarista, y de hecho se lleva a Aznar a Barcelona para esta cita de alto voltaje. Y por m¨¢s que en las entrevistas Casado a¨²n no haya sido capaz de citar ninguna cesi¨®n concreta, es muy tentador su imaginario del presidente vendido al eje de ¡°populistas, comunistas, independentistas y filoetarras¡±. Claro que entretanto S¨¢nchez sube y ¨¦l baja, quiz¨¢ por esa vieja idea tan shakespeariana de que quienes se obsesionan en llevar a un enemigo a la hoguera, a menudo, terminan quem¨¢ndose. La movilizaci¨®n del electorado socialista, que hab¨ªa sufrido fugas masivas hacia Ciudadanos y Podemos, est¨¢ en deuda con los excesos de la derecha sobre todo tras la irrupci¨®n de Vox.
Casado hace la campa?a, sin embargo, con la esperanza puesta en la F¨®rmula Andaluza: gobierno con Ciudadanos y mayor¨ªa parlamentaria con Vox. Barcelona es territorio simb¨®lico, y all¨ª va a hacer sonar el tam-tam de la tribu para convocar a toda la derecha a ¡°entender que el enemigo es S¨¢nchez¡±. El PP cay¨®, en esta ciudad, del 21% al 15% entre 2011 y 2016, dej¨¢ndose un tercio de sus votos y abonando a Cs. En muchos lugares de Catalu?a, de hecho, est¨¢n pidiendo auxilio a la militancia para completar las listas, como en los tiempos m¨¢s oscuros en Euskadi; y en la capital pueden quedar fuera incluso del Ayuntamiento. Pero Casado va a escenificar que ¨¦l frenar¨¢ al Eje del Mal aunque sea con pocos, como Le¨®nidas en el paso de las Term¨®pilas. De ah¨ª el simbolismo de Barcelona, epicentro de la cruzada contra esa Antiespa?a que lidera, naturalmente, Pedro el fel¨®n S¨¢nchez.
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