Letra peque?a

Leer y contrastar los programas de los partidos puede resultar una tarea ardua para el votante. Quiz¨¢ por ello algunos partidos no han tenido prisa en publicar la versi¨®n ¨ªntegra de ¨¦stos. Algunos han apostado por difundir primero versiones sint¨¦ticas a modo de tr¨¢iler, como Ciudadanos con los 10 compromisos de Rivera con Espa?a o el PSOE con sus 110 compromisos con la Espa?a que quieres. Una vez publicados los programas completos, la mayor¨ªa procura aligerar la tarea al elector ofreciendo res¨²menes de lectura f¨¢cil (Podemos, PSOE y Ciudadanos) o enumeraciones de una p¨¢gina (PP). Por su parte, Vox publica por separado un programa electoral y un programa econ¨®mico que incluye un anexo sobre c¨®mo reducir el gasto p¨²blico. Repasar someramente esta proliferaci¨®n de textos resulta, cuanto menos, ¨²til para conocer, m¨¢s all¨¢ del lenguaje hiperb¨®lico de la campa?a, las prioridades de las cinco principales formaciones en liza. El dise?o, la manera en que cada partido presenta sus medidas, es tambi¨¦n una valiosa fuente de informaci¨®n sobre sus respectivos estilos.

M¨¢s informaci¨®n

¡°Nuestra historia lo merece¡±

Generaci¨®n X

Si el programa del PSOE tiene como primer bloque la econom¨ªa, sus 110 compromisos ¡ªen cuyo ¨ªndice la palabra Espa?a aparece siete veces¡ª abren con un Pacto de Estado por la Educaci¨®n. El grafismo, sin im¨¢genes, recuerda el que emplean museos de arte contempor¨¢neo. Tras una breve introducci¨®n donde la palabra Espa?a figura s¨®lo una vez, el Programa de Podemos para un nuevo pa¨ªs entra de lleno en la transici¨®n ecol¨®gica. La izquierda quiere mirar al futuro: el primer compromiso del PSOE es aumentar la inversi¨®n educativa hasta alcanzar el 5 por ciento del PIB en 2025 y, el de Unidas Podemos, reducir la producci¨®n energ¨¦tica basada en combustibles f¨®siles a la mitad en una d¨¦cada.

¡°Acabar con los privilegios de los nacionalistas¡±, arrancaba el dec¨¢logo de Rivera con un acento ¨¢spero. ¡°Defender la unidad de Espa?a y garantizar la igualdad de derechos de todos los ciudadanos¡±, dice el programa en un tono m¨¢s institucional. ¡°Tolerancia cero con la corrupci¨®n¡± es el siguiente cap¨ªtulo de los naranjas. Los sucesivos alternan medidas liberales y de protecci¨®n de la clase media trabajadora. El PP transcribe sus 500 medidas en una fuente peque?a, sin resaltados, dentro de un extenso cat¨¢logo de apariencia corporativa. El primer bloque est¨¢ dedicado al ¡°fortalecimiento de la naci¨®n¡±: unidad de Espa?a, Constituci¨®n, modelo auton¨®mico y Uni¨®n Europea.

El segundo aborda ¡°una econom¨ªa moderna y avanzada¡±. En un documento accesible, est¨¦ticamente poco elaborado, con una discreta bandera espa?ola en cada p¨¢gina, Vox tambi¨¦n abre con la cuesti¨®n nacional-territorial a la que sigue la reforma de la ley electoral (incluyendo la supresi¨®n de las listas paritarias), la inmigraci¨®n y la lucha contra el fundamentalismo isl¨¢mico.

Documentos minimalistas, res¨²menes para inexpertos, manuales exhaustivos¡­ ojal¨¢ esta generosa oferta literaria inspire al votante a dedicarle unas horas de la Semana Santa a conocer la letra peque?a de lo que proponen nuestros candidatos.