Muerte de un ¡®rider¡¯

La muerte accidental de un repartidor nepal¨ª, que trabajaba ilegalmente con una cuenta cedida o alquilada de Glovo, confirma una vez m¨¢s la perversa realidad laboral de algunas plataformas de la mal llamada econom¨ªa colaborativa. Pujan Koirala falleci¨® atropellado por un cami¨®n de la limpieza sin estar registrado entre los repartidores (riders) de Glovo, sin papeles y sin el seguro privado del que disponen los empleados de la compa?¨ªa.

Ha llegado el momento de que las Administraciones p¨²blicas afronten con seriedad el r¨¦gimen de funcionamiento laboral y fiscal de las plataformas. Trabajan en demasiadas ocasiones con empleados registrados como falsos aut¨®nomos para ahorrarse costes sociales; suelen aplicar un r¨¦gimen de trabajo estajanovista que obliga a esos falsos aut¨®nomos a interminables jornadas laborales; y, como consecuencia de la combinaci¨®n de condiciones laborales extremas y los objetivos obligatorios, aparece un alquiler negro de las cuentas al que acceden parados en situaci¨®n m¨¢s precaria a¨²n, que son precisamente los que suelen carecer de papeles en regla. La situaci¨®n de Pujan Koirala no es una anomal¨ªa sino un r¨¦gimen de trabajo muy extendido entre las plataformas digitales, aunque, por desgracia, ¨¦l perdi¨® la vida el s¨¢bado.

La responsabilidad de Glovo es notoria, porque est¨¢ obligada, como cualquier otra empresa, a saber qui¨¦n trabaja directamente para ella. Tampoco hay que perder de vista las responsabilidades de la Administraci¨®n. Las inspecciones de trabajo conocen las irregularidades de la econom¨ªa de plataformas. Hay que reclamar pues que se intensifique y cumpla el plan radical de Trabajo para acabar con la precariedad institucionalizada. No es aceptable que se est¨¦ desarrollando una variedad de econom¨ªa sumergida a la vista de todos, es decir, de las empresas que la practican, de los ciudadanos que la usan y de los poderes p¨²blicos que la toleran. La muerte del ciclista Pujan Koirala deber¨ªa ser motivo suficiente para revisar el sistema de trabajo real que se esconde con frecuencia detr¨¢s de la mal llamada econom¨ªa colaborativa.