Las pasiones y los secretos de Luciano Pavarotti salen a la luz

El trono de Luciano Pavarotti contin¨²a vacante. Reposiciones, libros, documentales, y un sinf¨ªn de obras sobre su figura tratan de llenar una parte del vac¨ªo que dej¨® con su desaparici¨®n hace 12 a?os. Pavarotti, un documental de Ron Howard, director de Una mente maravillosa, cuenta la voz, los secretos y la leyenda del tenor insustituible. Para tejer la historia agridulce del maestro de M¨®dena y su espectacular trayectoria, un vasto material de archivo que recoge sus apariciones en televisi¨®n y sus mejores actuaciones, como sus potentes e imborrables interpretaciones de Nessun dorma, se entremezclan con grabaciones familiares, algunas in¨¦ditas y entrevistas personales a su entorno, como antiguos amigos, colaboradores o sus dos esposas y sus tres hijas. El resultado es el retrato ¨ªntimo de un mito, el hombre detr¨¢s de la leyenda, el marido, el padre, el fil¨¢ntropo incansable, con sus luces y sus momentos oscuros. ¡°La raz¨®n por la que se convirti¨® en un mito es porque viv¨ªa en primera persona las canciones. Sus errores, esperanzas, deseos... toda su vida entraba en la actuaci¨®n¡±, dice ante la c¨¢mara Bono, l¨ªder de U2 y amigo del tenor. La pel¨ªcula, que acaba de estrenarse en Estados Unidos, llegar¨¢ a Italia el pr¨®ximo octubre.

A trav¨¦s de los relatos de quienes mejor lo conocieron, Howard va desgranando la vida y las grandes pasiones de Big Luciano: la m¨²sica, la gastronom¨ªa patria y las mujeres. ¡°Amaba la m¨²sica, las mujeres, la comida y el f¨²tbol. En ese orden¡±, ilustra uno de sus antiguos representantes, Herbert Breslin. El recorrido arranca con la narraci¨®n de sus or¨ªgenes humildes de M¨®dena, como hijo de un panadero con una voz tambi¨¦n prodigiosa y llega hasta su muerte en 2007, a los 71 a?os a causa de un tumor. Pasa tambi¨¦n por su exitosa uni¨®n con Pl¨¢cido Domingo y Jos¨¦ Carreras en los Tres Tenores y sus supremas interpretaciones de Nemorino, de Elixir de amor de Donizetti; o de Cavaradossi, de Tosca de Puccini. Y recoge tambi¨¦n las m¨ªticas im¨¢genes del artista cocinando pasta en cualquier fog¨®n improvisado, como en el programa de Phil Donahue, de la televisi¨®n estadounidense.

El documental tambi¨¦n toca su lado personal y su turbulenta vida sentimental. En 1961 se cas¨® en primeras nupcias con Adua Veroni, con quien tuvo tres hijas: Lorenza, Cristina y Giuliana, que se ponen por primera vez delante de una c¨¢mara para hablar de su padre. En 200 se separaron y en 2003 se cas¨® de nuevo con la joven Nicoletta Mantovani, con quien tuvo una hija, Alice. Entre medias mantuvo una relaci¨®n extramatrimonial con Madalyn Renee, una soprano estadounidense a la que dio clases.

Las mujeres de su vida ofrecen un retrato ¨ªntimo del gran tenor. Veroni, de 81 a?os y que comparti¨® casi 40 a?os con Pavarotti reconoce en el documental que siempre se neg¨® a dar cr¨¦dito a las ¡°historias¡± sobre las infidelidades de su marido que escuch¨® en alguna ocasi¨®n. ¡°Me enamor¨¦ del hombre y despu¨¦s me enamor¨¦ de la voz. ?Qui¨¦n no se enamorar¨ªa de la voz de Luciano Pavarotti?¡±, dice. Mantovani ha ofrecido algunos v¨ªdeos en los que ella misma entrevista al artista y en las que habla con entusiasmo de su voz, a la que se refiere como la prima donna de su cuerpo.

Nicoletta tambi¨¦n explica que cuando se conoci¨® su relaci¨®n, tras la publicaci¨®n de unas fotos de ambos bes¨¢ndose, contaron a todo el mundo que ella era su asistente, ¡°pero no era cierto¡±, dice ahora. ¡°No fue f¨¢cil contar que manten¨ªa una relaci¨®n con un hombre 34 a?os mayor. Luciano fue mi gran defensor, siempre me protegi¨®¡±, a?ade. La relaci¨®n entre sus dos esposas nunca ha sido buena. Despu¨¦s del divorcio llegaron las tensiones familiares, que se recrudecieron con la apertura del testamento del divo, que result¨® tener dos versiones: una primera en la que Pavarotti distribu¨ªa equitativamente las propiedades entre sus tres hijas mayores, su segunda esposa y su hija Alice y una segunda versi¨®n redactada pocos d¨ªas antes de morir y que atribu¨ªa exclusivamente a Nicoletta Mantovani varias propiedades multimillonarias en Estados Unidos. Despu¨¦s de un a?o de litigios, las herederas llegaron a un acuerdo para repartirse el legado del artista.

Madalyn recuerda ante las c¨¢maras que el tenor era ¡°travieso¡± y que ten¨ªa ¡°el sentido del humor de un ni?o¡±. Lo evoca como su mentor, su maestro y su amor. ¡°Nunca pens¨¦ que terminar¨ªa manteniendo una relaci¨®n con Luciano, pero era dif¨ªcil marcar una l¨ªnea¡±, se?ala y cuenta que se separaron y perdieron el contacto porque ¨¦l a¨²n estaba casado con Adua.

La cinta se centra tambi¨¦n en la faceta solidaria del artista y en su amistad con la princesa Diana de Gales, asidua a los conciertos del tenor y sus colaboraciones en varias campa?as de la Cruz Roja. Y repasa sus m¨²ltiples iniciativa con fines ben¨¦ficos, como su interpretaci¨®n en 1995 de Miss Sarajevo, compuesta por Bono y dedicada al largo asedio al que fueron sometidos los habitantes de la capital bosnia durante la guerra. O el concierto de 2003, de nuevo con Bono, en apoyo a los refugiados de la guerra de Irak. ¡°Estaba obsesionado con las injusticias, viv¨ªa en un b¨²squeda continua de lo que pod¨ªa hacer por los dem¨¢s¡±, relata una voz en el documental.