Dani Garc¨ªa: ¡°No se me caen las estrellas por hacer hamburguesas¡±
El chef se sorprende de quien se sorprende por su decisi¨®n de dejar la alta cocina justo al lograr su tercera estrella Michelin e invita a los "foodies puristas" a ponerse a los fogones
Si lo s¨¦, no como. He quedado a las 14,50 con un 'tres estrellas Michelin' en el plat¨® donde graba su programa de recetas. Resulta que es la pausa del almuerzo. Que el men¨² del d¨ªa del equipo consiste en las pechugas Villaroy que ha guisado el mism¨ªsimo chef ante la c¨¢mara. Que nos invitan a comer. Y que a una no le cabe nada despu¨¦s de haberse atizado dos s¨¢ndwiches de m¨¢quina por si las moscas. Total, que pierdo mi oportunidad de catar el pollo de Dani Garc¨ªa por ansiosa. Bueno, me consuelo sola, siempre puedo pedir una hamburguesa Bibo con su firma en el McDonald's de la esquina. Las acaba de presentar a bombo y platillo al tiempo que anuncia su retirada de la alta cocina.
?No se le caen las estrellas por hacer hamburguesas?
Para nada. Soy feliz por poder hacer algo por 6 euros y algo por 300 con la misma ilusi¨®n. Lo firmo igual. No me averg¨¹enzo de nada. Cada cosa tiene su p¨²blico, a veces hasta el mismo. ?Quien no ha ido nunca a un McDonalds? Quien no entienda esa diversidad es que no entiende la vida. Soy el t¨ªo m¨¢s afortunado del mundo.
Pues le han puesto a caldo en las redes por lo de la 'McDani'.
He le¨ªdo cosas sobre m¨ª que ni yo imaginaba: que soy corrupto, como los pol¨ªticos. Las redes son basura. Soy el primero que las uso, pero han creado monstruos.
Fue obtener la tercera estrella Michelin y anunciar que dejaba la alta cocina.??Tanto le pesaban los astros?
Me pesaron dos semanas. Lo que tard¨¦ en decidirme. Veo much¨ªsima ilusi¨®n en la gente que llega a mi restaurante, porque viene una o dos veces en su vida. Pero yo he vivido eso 25 a?os, cada d¨ªa, dos veces al d¨ªa, y te cansa. Veo tan claro, tan humano, tan normal querer girar un poco tu vida hacia otro sitio haciendo lo mismo, cocinar, que no entiendo a quien no lo entiende.
?Crisis de los 40 a los 43?
Hacer de comer
As¨ª se llama el programa de Dani Garc¨ªa (M¨¢laga, 43 a?os) en TVE y eso es a lo que se dedica. Sorprendi¨® a todos al anunciar que dejaba la alta cocina nada m¨¢s recibir la tercera estrella Michelin. ?l es el primer sorprendido por esa sorpresa. Quiere vivir la vida.
Probablemente, pero la crisis tiene que ver con la reflexi¨®n y la madurez. Ves que la vida pasa, que hay cosas que t¨² no eliges y otras que quiero disfrutar y no he hecho por culpa de la alta cocina. Hay decisiones que se sienten dentro. No puedes no escucharte a ti mismo.
?Hay tanta presi¨®n como dicen en la cumbre gastron¨®mica?
Hay mucha presi¨®n, mucho estr¨¦s y mucha responsabilidad. Muchas veces es m¨¢s del entorno, de la expectaci¨®n que se monta alrededor, que de ti mismo. Mi autopresi¨®n es buena y sana. Consiste en que la gente que viene a gastarse un dineral importante en mi casa salga pensando en la experiencia que ha tenido y no en el dinero que le ha costado.
Defina ¡°entorno¡±, no huya.
Los foodies, algunos periodistas gastron¨®micos que te idolatran si te dan una estrella o te crucifican si no te la dan o te la quitan. Me considero foodie, pero respetuoso, sensato y viajero. No vivo en una burbuja. En esto hay mucha tonter¨ªa y postureo. Me encantar¨ªa ver por un agujerito a muchos de esos, que igual son abogados, y ver c¨®mo se enfrentan a su trabajo a diario. Ver si le ponen tanta pasi¨®n, intensidad y verdad como los cocineros en el suyo.
Parece que tienen que inventar la penicilina constantemente.
Eso ha sido as¨ª durante a?os. Y Ferr¨¢n Adri¨¤ allan¨® el camino para parar esa rueda. ?Para qu¨¦ voy a estar inventando no ya el nitr¨®geno, que est¨¢ inventado, sino que brote la planta del plato y te la comas directamente? No me apetece inventar nada, y m¨¢s cuando hay un mundo tan grande por explorar ah¨ª fuera.
Ahora, adem¨¢s, los cocineros tienen que estar buenos. Muchos colegas suyos se han puesto cachas para una revista. ?No le han tentado?
Yo vivo en otro planeta. No me siento presionado en ese aspecto. Soy cocinero, no modelo, y soy como soy. Si alg¨²n d¨ªa adelgazo ser¨¢ por salud y por intentar durar un poco m¨¢s que estando gordito.
?Por qu¨¦ es alta la alta cocina?
Porque es cocina de lujo. Distinta conceptual y t¨¦cnicamente de la ordinaria. Se supone que un men¨² degustaci¨®n tiene que proporcionarte sensaciones y vivencias que ni imaginas que existen.
?Como ver a Dios?
Dios no s¨¦ si existe. Pero puedes encontrar esa magia a la que te puede llevar un libro, una pel¨ªcula, una obra de arte.
Caro es un rato, ?vale lo que cuesta?
No. Cuesta mucho menos de lo que vale. Un men¨² degustaci¨®n en Londres, Par¨ªs y Nueva York, con los mismos gastos, vale 500 euros, y aqu¨ª entre 250 y 300.
Tiene dos hijas adolescentes. ?C¨®mo le comen sus ni?as?
Demasiado bien. Me salen car¨ªsimas. M¨¢s vale llevarlas de compras que a comer. La mayor, de 19 a?os, es de pico fino. La peque?a es m¨¢s tiquismiquis, se lo deja en el plato, pone caritas raras, sobre todo con las combinaciones. Eso s¨ª, luego se pone ciega a nigiris del mejor japones. Mi hija y mi madre son mis cr¨ªticos m¨¢s exigentes con diferencia.
?Qu¨¦ cenar¨ªa esta noche si fuera su ¨²ltima cena?
Unas coquinas, unas gambas al pil-pil, una cazuelita de angulas, unas cigalitas.
?Y de postre?
M¨¢s cigalas. Cualquier cocinero a quien le preguntes te dir¨¢ cosas sencillas: un bogavante, un poco de caviar, un risotto con trufa blanca. Oye, o un bocata de mortadela, que a veces tambi¨¦n te mueres por uno. Eso da mucho que reflexionar ?no?
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