Solsticio de verano: llega el calor oficial con el d¨ªa m¨¢s largo del a?o
A las 17.54 horas comienza la estaci¨®n estival en el hemisferio norte, que durar¨¢ 93 d¨ªas y 15 horas, hasta que el 23 de septiembre comience el oto?o
Las estaciones han pasado a ser una convenci¨®n astron¨®mica desde que el cambio clim¨¢tico domina nuestras vidas. Ni los inviernos son tan duros como antes ni los veranos tan soportables, e igual sufrimos una ciclog¨¦nesis en junio como llevamos manga corta en noviembre.
Lo cierto es que este a?o ha llovido un 25% menos de lo habitual y la previsi¨®n es que la estaci¨®n que comienza este viernes sea m¨¢s calurosa de lo normal, por lo que la definici¨®n de la situaci¨®n de Espa?a vuelve a ser de ¡°sequ¨ªa meteorol¨®gica¡±. Seg¨²n la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (AEMET), la temperatura media este verano ser¨¢ entre medio grado y un grado m¨¢s alta de lo habitual y el escenario cambiar¨¢ de manera dr¨¢stica la semana que viene, cuando se espera la llegada de ¡°calor intenso¡±. No se descarta que pueda producirse una ola de calor, aunque a¨²n es pronto para saberlo.
El comienzo de las estaciones se establece por aquellos instantes en los que la Tierra se encuentra en unas determinadas posiciones en su ¨®rbita alrededor del Sol. En el caso del solsticio de verano esta posici¨®n se da en el punto de la ecl¨ªptica en el que el astro alcanza su posici¨®n m¨¢s boreal.
Los solsticios, por tanto, ocurren por la imperfecci¨®n de la Tierra, una peque?a inclinaci¨®n de 23? y 27 minutos. Esta posici¨®n hace que en el solsticio de verano el Polo Norte est¨¦ m¨¢s cerca del astro rey que el Polo Sur. En realidad, el Sol se encuentra a la altura del Tr¨®pico de C¨¢ncer, la posici¨®n m¨¢s alta posible con respecto a la Tierra.
La explicaci¨®n cient¨ªfica es la siguiente: la duraci¨®n de una ¨®rbita terrestre es equivalente a algo menos de 365 y un cuarto de rotaciones terrestres (es decir, de d¨ªas). Con ese cuarto se explica en el calendario gregoriano la introducci¨®n cada cuatro a?os de un d¨ªa extra; el 29 de febrero de los a?os bisiestos. Sin embargo, hay m¨¢s correcciones para regularizar ese cuarto anual de rotaci¨®n terrestre, y es que el calendario actual por el que nos regimos elimina tres d¨ªas bisiestos cada cuatro siglos.
Por ese motivo, cada a?o cambia el momento exacto del solsticio, porque mientras que la duraci¨®n de cada estaci¨®n, la velocidad orbital de nuestro planeta y todos los par¨¢metros f¨ªsicos no cambian, nuestro calendario s¨ª por ese cuarto de m¨¢s cada a?o. De esta manera, cada a?o la hora e incluso el d¨ªa de entrada de las estaciones cambia y los solsticios de verano ocurren siempre entre el 20 y el 23 de junio debido a estos ajustes.
Por otro lado, la diferencia en las horas de luz entre el d¨ªa y la noche depende de la latitud del lugar, de manera que es nula en el ecuador y extrema (24 horas) entre los c¨ªrculos polares y los polos. Alrededor de estas fechas, en lugares situados por encima del c¨ªrculo polar boreal se da el fen¨®meno denominado Sol de medianoche, que es cuando el astro es visible por encima del horizonte durante las 24 horas del d¨ªa. De hecho, en los d¨ªas anteriores y posteriores al solsticio la posici¨®n del Sol no cambia demasiado respecto a la Tierra. Y de ah¨ª el nombre de este fen¨®meno: solsticio (¡°sol quieto¡±, en su traducci¨®n literal).
Por lo tanto, si entendemos por duraci¨®n del d¨ªa el tiempo que transcurre entre la salida y la puesta del Sol, este 21 de junio va a ser el d¨ªa de mayor duraci¨®n del a?o, aunque de forma err¨®nea siempre asociamos la jornada m¨¢s larga y la noche m¨¢s corta a la celebraci¨®n de la noche de San Juan, el pr¨®ximo domingo.
Del mismo modo, se podr¨ªa pensar que el d¨ªa m¨¢s largo del a?o es tambi¨¦n cuando el Sol sale m¨¢s pronto y se pone m¨¢s tarde, pero no es as¨ª debido a que la ¨®rbita de la Tierra alrededor del astro rey no es circular, sino el¨ªptica, y a la inclinaci¨®n del planeta en una direcci¨®n que nada tiene que ver con el eje de la elipse. De hecho, el d¨ªa en que el Sol sali¨® m¨¢s pronto fue el pasado d¨ªa 15, mientras que el d¨ªa en que se pondr¨¢ m¨¢s tarde ser¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 28.
La estaci¨®n veraniega es m¨¢s larga que otras porque la Tierra se mueve m¨¢s lentamente a lo largo de su ¨®rbita el¨ªptica, tal y como explica la segunda ley de Kepler, precisamente debido a este mayor alejamiento al Sol.
En esta ¨¦poca del a?o, aunque no relacionado con las estaciones, tambi¨¦n se da otro hecho curioso, el conocido como el d¨ªa del afelio, que es cuando el Sol y la Tierra est¨¢n m¨¢s alejados entre s¨ª en el a?o. El m¨¢ximo alejamiento se producir¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 5 de julio con una distancia de algo m¨¢s de 152 millones de kil¨®metros entre la Tierra y el Sol, que ser¨¢n alrededor de cinco millones de kil¨®metros m¨¢s que el pasado 3 de enero, cuando la distancia al Sol alcanz¨® su m¨ªnimo anual, lo que se conoce como perihelio.
Asimismo, el verano es especialmente rico y atractivo desde el punto de vista astron¨®mico. Este a?o, adem¨¢s, en verano se producir¨¢ un eclipse de Sol el pr¨®ximo 2 de julio que se ver¨¢ parcialmente en el Pac¨ªfico sur y Sudam¨¦rica y que ser¨¢ total en algunas zonas de Argentina y Chile. Asimismo, durante la noche del 16 del pr¨®ximo mes y la madrugada del 17 tendr¨¢ lugar un eclipse parcial de Luna que ser¨¢ visible en Sudam¨¦rica, Europa, ?frica, Asia y Ocean¨ªa, por lo que tambi¨¦n podr¨¢ verse en Espa?a.
Al principio de la estaci¨®n que estrenamos este viernes tambi¨¦n podr¨¢ verse a simple vista durante toda la noche Saturno. De igual manera, Venus ser¨¢ visible al amanecer hasta mediados de julio.
Y si hay algo llamativo en verano son las conocidas como lluvias de estrellas: las delta acu¨¢ridas alcanzar¨¢n su m¨¢xima frecuencia alrededor del 30 de julio, mientras que las populares perseidas o l¨¢grimas de San Lorenzo llegar¨¢n a su m¨¢ximo esplendor en torno al 12 de agosto; aunque la Luna llena del 15 de ese mes dificultar¨¢ su observaci¨®n.
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