Carlos Bardem: ¡°El libro siempre es mejor que la pel¨ªcula¡±
El hermano del oscarizado Javier Bardem, publica una nueva novela que le conecta con su voluntad pol¨ªtica


Recorre Carlos Bardem las estancias del Museo del Romanticismo. Se para en distintas salas buscando, junto con el fot¨®grafo, el mejor lugar para realizar el retrato que acompa?a a esta entrevista. Charla durante el paseo, sobre Goya, en el oratorio que aloja su San Gregorio Magno; pregunta si se pueden abrir las contraventanas para tener mejor luz, pero est¨¢n cerradas por la conservaci¨®n de las piezas. Cuando el objetivo le apunta interrumpe la conversaci¨®n y mira a la c¨¢mara como quien est¨¢ muy acostumbrado a hacerlo. ¡°Vivo de esto¡±, apunta al continuar hablando en el punto exacto donde lo ha dejado.
En la cafeter¨ªa del museo, alg¨²n visitante se le acerca para hacerle alg¨²n comentario sobre su ¨²ltimo libro. Responde agradecido y mucho m¨¢s dulce de lo que su f¨ªsico presagia. Ha sido su novela, Mongo Blanco (Plaza & Jan¨¦s), la que le ha puesto el escenario de la entrevista, un palacio habitado por los condes de la Puebla del Maestre en el siglo XIX, centuria en la que transcurren las aventuras y desventuras de su protagonista, Pedro Blanco, un personaje real sobre el que Bardem (Madrid, 1963) ha estado trabajando unos cinco a?os. ¡°No s¨¦ si son cinco o algo m¨¢s, creo que cinco es una convenci¨®n que he creado para las entrevistas¡ Lo que tengo claro es que la mitad del tiempo fue documentaci¨®n y la otra mitad fue redacci¨®n¡±.
Pedro Blanco Fern¨¢ndez de Trava fue un negrero malague?o que se convirti¨® en uno de los traficantes de esclavos m¨¢s importantes del siglo XIX, un personaje desconocido ¡ªcomo lo es el negocio al que se dedicaba¡ª que atrajo a Bardem y que le permiti¨® verter en su cuarta novela sangre, sudor, semen y l¨¢grimas. Un torbellino apabullante de palabras que salen directamente de las entra?as. Muy f¨ªsicas, pasionales. ¡°Escribo a golpes, desde la emoci¨®n. Lo que escribo se huele. No puedo hacerlo si lo que escribo no me conmueve, no me asusta, no me excita. Lo que utilizo como actor tambi¨¦n lo aplico a la escritura. Compongo seres humanos. Acabo de terminar un seminario con Juan Carlos Corazza ¡ªpara m¨ª, el mejor profesor de actuaci¨®n del mundo, tambi¨¦n para mi hermano [el oscarizado Javier Bardem]¡ª. Hemos recordado c¨®mo trabajar con los centros, con el bajo vientre, con las ingles, con el instinto, con el deseo¡¡±. Confiesa que alguna vez ha intentado ser aplicado, estos a?os lo ha tenido dif¨ªcil ya que ha estado involucrado en m¨²ltiples proyectos como Carteristas, La embajada, La zona, Club de cuervos¡ ¡°Esta novela la he escrito, en este orden: en Madrid, M¨¦xico, Bogot¨¢, La Habana, Austin (Texas), M¨¦xico, Bogot¨¢ y Madrid¡±. Explica que a diferencia de su libro anterior, Alacr¨¢n enamorado, donde habla del boxeo, una de sus pasiones, desde la experiencia en gimnasios durante 35 a?os; en Mongo Blanco, cada vez que se pon¨ªa a escribir ten¨ªa que desplegar manuales de navegaci¨®n, cartograf¨ªa ¨C¡°soy un fetichista de los mapas¡±, dice Bardem que ha incluido algunos en el libro, as¨ª como art¨ªculos del Reglamento de esclavos del capit¨¢n general don Jer¨®nimo Vald¨¦s en 1842-, sistemas de medidas y peso del siglo XIX¡ ¡°Un aparataje exigente¡±.
No en vano este licenciado en Historia, antes que escritor y actor ¡ªeste es su sexto libro, su cuarta novela¡ª, le dedica Mongo Blanco a su pareja, la actriz Cecilia Gessa: ¡°No entiendo la pareja si no como un proyecto com¨²n de apoyo mutuo. Esto han sido a?os de trabajo, momentos muy absorbentes, en los que no he estado, en los que necesitaba aislarme y ella ha sabido entenderlo. No pod¨ªa haber llegado a puerto sin que ella soplara mis velas, como pongo en el libro¡±. Tanto su compa?era como su madre, Pilar Bardem ¨Cque asegura que est¨¢ bien y feliz¨C, son de las primeras en leerle. Tambi¨¦n algunos amigos, los nombres de algunos personajes coinciden con los de sus amigos. En esta ocasi¨®n, los hermanos S¨¢nchez-Cabezudo leyeron Mongo Blanco antes de que se publicase. ¡°Conf¨ªo much¨ªsimo en su talento y me dijeron: ¡®Aqu¨ª vemos una gran serie¡¯. En ello est¨¢n. El proyecto est¨¢ avanzado, ser¨¢ para una gran plataforma con un gran presupuesto. Si quieres hacer bien esta novela tiene una producci¨®n muy cara. Ya estamos barajando posibles protagonistas. Yo me reservo el papel de uno de los capitanes¡±.
"Cuando decido escribir? sobre la atrocidad que es la trata de seres humanos, hay una voluntad pol¨ªtica, un querer sacar a la luz una parte tapada de nuestra historia"
Parte de la originalidad de la novela radica en la manera en la que est¨¢ escrita, en ese di¨¢logo entre el negrero y su m¨¦dico. En relatar la esclavitud desde la mirada del que negocia y no desde el que la sufre como se ha hecho habitualmente. El cambio de punto de vista hace que el autor se haya tenido que poner en la piel de ese monstruo que fue Pedro Blanco, consciente de que a la sociedad parecen atraerle m¨¢s las sombras que las luces. ¡°A m¨ª lo que me interesaba era contar cu¨¢l era la construcci¨®n mental que permit¨ªa a esos hombres operar sin volverse locos. Esto me permite ejercer mi derecho de denuncia¡±, se?ala. Un fen¨®meno que sigue funcionando hoy, Bardem reinterpreta la ley de Lavoisier: ¡°La esclavitud no desaparece, se transforma. Una persona que trabaja y trabaja y trabaja, en Madrid, sin lograr salir de la precariedad es un esclavo. Una se?ora que dice que no llamemos contratos basura a los contratos basura es una esclavista¡±. Algunas escenas de la obra en las que describe esclavos apilados, unos cuerpos sobre otros llevan al lector a esas im¨¢genes de barcazas cruzando el Mediterr¨¢neo de ?frica a Europa. ¡°Amo a los negros. Me encantar¨ªa llevar m¨¢s en la bodega¡±, dice en un momento el protagonista, que tiene un punto atractivo. Tanto el interpretado por el escritor como el real es un hombre muy inteligente, un profesional, gran aventurero, navegante, desarroll¨® un sistema de negocio avanzado a su tiempo, mejor¨® las posibilidades de compra-venta de personas. Era muy bueno en lo que hac¨ªa, pero esto era una atrocidad.
El futuro de Bardem tiene todos los formatos: en septiembre estrena dos ficciones; ha empezado su siguiente novela, de tema m¨¢s actual que la ¨²ltima, adem¨¢s, est¨¢ trabajando en un par de proyectos como creador de series ¨C¡°ya lo contar¨¦ si sucede¡±- y coescribe con Santiago Zannou su pr¨®xima pel¨ªcula, Trap. ¡°Es la vuelta de Zannou a ese pulso que tiene para contar historias de j¨®venes de barrio¡±, adelanta. Fue el director el que llev¨® al cine Alacr¨¢n enamorado.
A pesar de que la interpretaci¨®n es lo que le paga el alquiler, se define m¨¢s lector que cin¨¦filo, y piensa que mil palabras valen m¨¢s que una imagen. ¡°El libro siempre es mejor que la pel¨ªcula. La relaci¨®n del espectador con el audiovisual es unidireccional: te dan la cara del protagonista, c¨®mo es el lugar donde est¨¢, c¨®mo va vestido. La relaci¨®n de lector con la obra es m¨¢s creativa. Por mucho que yo te describa a Pedro Blanco, t¨² vas a crear a tu Pedro Blanco¡±. Se autodenomina un fan¨¢tico de la lectura: ¡°Hoy tener un libro en las manos es un acto de rebeld¨ªa¡±. Y ¨¦l, a sus 56 a?os, intenta decir todo lo que piensa e incita a todos a ser exigentes: ¡°Uno de los problemas que tenemos es que nos conformamos, esa falta de exigencia se manifiesta en nuestra clase pol¨ªtica¡± ?Te has autocensurado alguna vez? ¡°Claro, como todo el que tiene m¨¢s de ocho a?os. Pero cuando decido escribir Mongo Blanco sobre la atrocidad que es la trata de seres humanos, hay una voluntad pol¨ªtica, una postura ideol¨®gica, un querer sacar a la luz una parte tapada de nuestra historia, el negocio de los esclavos del que se enriquecieron muchas grandes familias de nuestro pa¨ªs. Debajo de las telas y de las tarimas de los palacios hab¨ªa sangre humana¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma

Archivado En
- Carlos Bardem
- Javier Bardem
- Pilar Bardem
- Siglo XIX
- Gente
- Actores
- Series acci¨®n
- Escritores
- Novela
- Esclavitud
- Narrativa
- G¨¦neros series
- Tr¨¢fico personas
- Series televisi¨®n
- Trata de seres humanos
- Cine
- Programa televisi¨®n
- Historia contempor¨¢nea
- Literatura
- Televisi¨®n
- Programaci¨®n
- Historia
- Cultura
- Medios comunicaci¨®n
- Comunicaci¨®n