Bel¨¦n Cuesta, de rodar entre colegas a estrenar cuatro series y 15 pel¨ªculas en cuatro a?os

¡°Hay veces que est¨¢s ocho horas posando y acabas reventada, pero hoy ha sido muy c¨®modo y muy r¨¢pido¡±, celebra Bel¨¦n Cuesta en el ilustre aparcamiento de la redacci¨®n de El pa¨ªs. No siempre ha posado tan a gusto. ¡°Antes juzgaba lo que no me gustaba de m¨ª misma¡±, recuerda, ¡°pero con la edad aprendes a sentirte mejor¡±.

Habr¨¢ contribuido tambi¨¦n ser una de las actrices que m¨¢s trabaja en la a veces maltrecha pero siempre tenaz industria audiovisual espa?ola: cuatro series y 15 pel¨ªculas (seis de ellas se estrenan en 2019) en cuatro a?os. Y todo empez¨®, como casi siempre cuando se trata de la historia de or¨ªgenes de un actor, poniendo copas en un bar.

"En Port Aventura aprend¨ª mucho, era muy divertido improvisar y hacer teatro de calle con ni?os de diez a?os insult¨¢ndote¡­ Es algo que te curte¡±

Interior noche. En una de las mesas del V¨¢lgame Dios, en el madrile?o barrio de Chueca, uno de sus camareros (Javier Ambrossi) le promete a su compa?era de barra y amiga (Bel¨¦n Cuesta) que le va a escribir ¡°un papel tan bonito que nunca tendr¨¢ que volver a servir copas¡±. Se trataba de Sor Milagros en La llamada, una an¨¦cdota que se mont¨® para un fin de semana en el vest¨ªbulo del teatro Lara. ¡°Durante los ensayos de repente alguien tra¨ªa filetes rusos para comer, no sent¨ªamos la presi¨®n de estar en un proyecto que fuera a ir a alg¨²n sitio. Nadie pensaba en el dinero, as¨ª que se repart¨ªa entre todos los que particip¨¢bamos¡±, recuerda. Cuando a los dos meses la obra empez¨® a llenar la sala principal (donde contin¨²a seis a?os despu¨¦s) siguieron dividi¨¦ndose los beneficios a partes iguales.

Para su siguiente proyecto, Javier Calvo y Javier Ambrossi volvieron a escribirle un papel. Mag¨¹i, la leal ayudante de Paquita Salas, evocaba m¨¢s a eso que Cuesta llama ¡°la ternurita¡±. Tanto, que mucha gente asume que ella es as¨ª. ¡°Eso pasa. Me dicen: ¡®?Cuenta un chiste!¡¯ o me llaman para un mon¨®logo, pero a m¨ª me asusta porque soy actriz y no me considero humorista. Pero, a ver, tampoco es que yo sea un ogro. Me gusta hacer la comedia cerca del desastre, del drama, de la torpeza¡±. Y de eso Paquita Salas tiene de sobra: lejos de re¨ªrse de la miseria, la ingenuidad o la cutrez de sus hero¨ªnas, Calvo y Ambrossi se ponen de parte de ellas y contra los c¨ªnicos que las miran por encima del hombro. La primera temporada se rod¨® en ocho d¨ªas (¡°el ¨²nico catering era que alguien dijese: ¡®voy al chino, ?quer¨¦is Doritos o Donettes?¡¯¡±, recuerda Cuesta) y la segunda salt¨® a Netflix, donde tambi¨¦n se ha estrenado la tercera.

¡°Qui¨¦n iba a decirme hace cinco a?os que estar¨ªa aqu¨ª haciendo una entrevista con un Loewe maravilloso y hablando de una serie que empec¨¦ con mis amigos¡±

¡°Qui¨¦n iba a decirme hace cinco a?os que estar¨ªa aqu¨ª haciendo una entrevista con un Loewe maravilloso y hablando de una serie que empec¨¦ con mis amigos¡±, se asombra. De rodar entre colegas a no poder desvelar nada de la tercera temporada por temor a las represalias de Netflix. Eso significa que Bel¨¦n Cuesta ha triunfado. Adi¨®s a trabajar en Port Aventura. ¡°All¨ª aprend¨ª mucho, era muy divertido improvisar y hacer teatro de calle con ni?os de diez a?os insult¨¢ndote¡­ Es algo que te curte¡±.

Lo que quiere contar de esta temporada es que se ha re¨ªdo m¨¢s que en las dos anteriores y que ha trabajado con Terelu Campos, que interpreta a su nueva jefa. ¡°Ha estado muy disfrutona, a veces te formas una imagen de la gente pero luego es guay que te sorprendan¡±.

A sus 35 a?os, Bel¨¦n se considera ¡°muy moderna para algunas cosas y muy antigua para otras. Para seg¨²n qu¨¦ fiestas s¨ª que me siento m¨¢s antigua, me da pereza amanecer en una fiesta, prefiero salir por el d¨ªa. Antes iba a un evento y sent¨ªa que estorbaba, ahora llego en plan ¡®?abrid!¡¯. No, es co?a¡±, aclara entre risas. Para Cuesta, el momento m¨¢s especial de su carrera fue cuando nadie trat¨® de reemplazarla por otra actriz m¨¢s conocida en la adaptaci¨®n al cine de La llamada. ¡°Pero es que todo lo que ha ocurrido con La llamada y con Paquita Salas ha sido bastante excepcional. De ensayar en un garaje a aparecer todos guap¨ªsimos en los Goya. De los filetes rusos a las hamburguesitas de colores¡±.