Amenazas y mentiras

Primero, frenar la cat¨¢strofe de un Brexit desordenado. Y si acaso, despu¨¦s, convocar elecciones, obligadas cuando ya no existe la precaria mayor¨ªa de gobierno que sostuvo a Theresa May y todav¨ªa sosten¨ªa hasta el martes a Boris Johnson. El orden, este orden, es esencial para que salga bien: primero aplazamiento y luego elecciones. Una convocatoria electoral sin plenas garant¨ªas de un aplazamiento del Brexit, dejar¨ªa todo el espacio de maniobra a la capacidad tergiversadora de Boris Johnson para llegar al catastr¨®fico vencimiento del plazo sin acuerdo.

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EDITORIAL | Sucia jugada

Boris, sin ideas

El todav¨ªa primer ministro quiere llegar al 17 de octubre, fecha del consejo europeo, con el prop¨®sito de renegociar a cara de perro y en un solo envite el acuerdo cerrado por Theresa May y rechazado hasta ahora en tres ocasiones por el parlamento. Para su peculiar concepto de la democracia, el ¨²nico mandato v¨¢lido y definitivo, sin m¨¢rgenes para la repetici¨®n, es el del refer¨¦ndum en el que venci¨® el Brexit.

No quiere elecciones, pero tampoco una pr¨®rroga de la fecha del 31 de octubre. Si no hay m¨¢s remedio y hay que celebrarlas, deber¨¢n ser el 15 de octubre, para convertirlas en un nuevo plebiscito en favor de su Brexit incondicional y contra el aplazamiento y su principal ap¨®stol, el laborista Jeremy Corbyn. En tales condiciones se dice capaz de hacer valer sus exigencias o, en caso contrario y seguro de su rechazo, endosar a los 27 la culpa del desastre.

La llegada impetuosa de Johnson a Downing Street ha sido el catalizador del frente contra el Brexit desordenado, que ya conforma una mayor¨ªa en Westminster. Ha sido fundamental su maltrato al parlamento, limitado en su calendario gracias a un abuso del ejercicio de las prerrogativas de la corona por parte del ejecutivo. Tambi¨¦n su escasa deferencia hacia los intereses de Escocia y del Ulster. Todo coronado con los empujones a su grupo parlamentario para que no apoyara la pr¨®rroga, con el resultado de una defecci¨®n de los diputados conservadores de m¨¢s calidad y prestigio.

El nuevo frente contra el Brexit desordenado tiene ante s¨ª la posibilidad de conseguir un aplazamiento de la fecha fatal que le permita descabalgar a Johnson y luego recuperar la ¨²nica f¨®rmula ¨²til y tranquilizadora para todos, en Londres y en Bruselas, incluidos los mercados, como es la del Brexit pactado por Theresa May. En manos del nuevo frente se hallan tambi¨¦n las elecciones anticipadas, que Johnson no obtendr¨¢ sin garant¨ªas s¨®lidas sobre los tres meses de pr¨®rroga del Brexit, puesto que su convocatoria exige una mayor¨ªa de dos tercios del parlamento.

Johnson ha llegado hasta aqu¨ª gracias a sus amenazas y mentiras, y ahora pretende seguir gracias a m¨¢s amenazas y mentiras. Las amenazas no han funcionado con su partido, donde los diputados rebeldes han preferido la expulsi¨®n a la rendici¨®n. Y tampoco ha funcionado la mentira sobre una inexistente negociaci¨®n con Bruselas respecto a la salvaguardia para la libre circulaci¨®n entre las dos irlandas con la que pretend¨ªa mantener viva la idea de mejorar el acuerdo obtenido por Theresa May.