Los trileros a¨²n no han perdido
No ha tenido suerte el Reino Unido con su actual camada de l¨ªderes. Hasta se echa de menos a Margaret Thatcher y a su delf¨ªn m¨¢s fiel, Tony Blair
Los trileros han perdido tres votaciones en Westminster, un r¨¦cord para un primer ministro reci¨¦n llegado, pero los brexiters contin¨²an en el campo de batalla. Conservan munici¨®n para dar la vuelta a la situaci¨®n y ejecutar el Brexit duro el 31 de octubre. No est¨¢ escrito el final de un embrollo que Chesterton habr¨ªa calificado de Breshit. Puede ocurrir cualquier cosa porque Johnson y su n¨²cleo duro dejaron de jugar seg¨²n las normas.
La soluci¨®n ser¨ªa ir a elecciones antes del Consejo Europeo del 17 de octubre, y que el primer ministro pudiera acudir a la cita con un mandato claro. La oposici¨®n no ha mordido el anzuelo de convocarlas ahora porque el primer ministro hubiera tenido la potestad de cambiar la fecha y celebrarlas despu¨¦s del 31 de octubre.
Varias luchas marcar¨¢n los comicios. ?Qu¨¦ suceder¨¢ con los tories rebeldes expulsados del partido? Los sectores m¨¢s ultras quieren echar tambi¨¦n a los que defendieron permanecer en la UE aunque hayan sido leales con el resultado del refer¨¦ndum. Los tories se han convertido en un partido insurgente. ?Cu¨¢ntos de los que votaron leave (salir) est¨¢n a favor de un Brexit duro? No hay sondeo que pueda medir tanta incertidumbre.
No esperen demasiado del l¨ªder laborista Jeremy Corbyn, que ha dado m¨¢s piruetas que Albert Rivera. Es un euroesc¨¦ptico de izquierdas que solo ha sido coherente en el empe?o de llegar a primer ministro. Su partido, que no es una balsa de unidad, apoya un segundo refer¨¦ndum.
El 1 de agosto sucedi¨® algo extraordinario en Brecon and Radnorshire, circunscripci¨®n del Pa¨ªs de Gales que celebr¨® una elecci¨®n parcial. La liberaldem¨®crata Jane Dodds derrot¨® por 1.424 votos al conservador y favorito Chris Davis. Obtuvo el apoyo de cuatro partidos, entre ellos Los Verdes, que no presentaron candidatos. La derrota dej¨® a Johnson con una mayor¨ªa de un solo diputado, que perdi¨® esta semana tras la espectacular deserci¨®n de Phillip Lee.
Lo ocurrido en Gales marca la pauta para otras circunscripciones en las que los conservadores pueden ser derrotados si el resto de los partidos anti Brexit duro fuesen capaces de concentrar sus esfuerzos en el candidato con m¨¢s opciones. Diez circunscripciones se resolvieron en las elecciones de 2017 por menos de cien votos.
Los partidos opositores y los tories rebeldes deber¨ªan acudir a esas elecciones bajo un nombre com¨²n, una alianza democr¨¢tica. Esa alianza tendr¨ªa que proponer un primer ministro de consenso, como el respetado conservador Kenneth Clarke. Su misi¨®n ser¨ªa formar un Gobierno de unidad, pedir una pr¨®rroga a la UE y convocar un segundo refer¨¦ndum.
No ha tenido suerte el Reino Unido con esta camada de l¨ªderes. Hasta se echa de menos a Margaret Thatcher y a su delf¨ªn m¨¢s fiel, Tony Blair, descabalgado por las mentiras de Irak. Solo queda la nostalgia, el Tribunal Supremo y cruzar los dedos.
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