Superentra?able y supertodo

En agosto fui a visitar a Luc¨ªa Bos¨¦ a su casa de Segovia. Siempre luminosa y ¨¢vida de comentar la actualidad me recibi¨® con una buena pregunta: ¡°?Qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de Rosal¨ªa? Porque lo que hace es bueno. No se equivoca en nada¡±. Me dej¨® sin respuesta, asombrado ante su curiosidad. Record¨¦ que en la ¨²ltima entrega de los premios ICON, de la que fui presentador, Pedro Almod¨®var le entreg¨® el premio revelaci¨®n y ella abraz¨® al director de Todo sobre mi madre, con un candor maravilloso. ¡°?Entonces es Almod¨®var?¡±, insisti¨® Luc¨ªa. A estas alturas, tras conseguir el primer premio MTV para un cantante espa?ol y tras una actuaci¨®n donde se consagr¨® ante el p¨²blico global, Rosal¨ªa ya es, m¨¢s que una cantante, una escuela. J¨®venes artistas de su generaci¨®n quieren aprender de ella y, de momento, solo pueden imitarla.

Confirm¨¦ este fen¨®meno cuando acompa?¨¦ a Mar¨ªa Isabel, la cantante que gan¨® Eurovisi¨®n Junior con aquel Antes muerta que sencilla, en la emisi¨®n de Lazos de Sangre dedicado a Marisol. Mar¨ªa Isabel acudi¨® un tanto forzada a hablar como exni?a prodigio, algo de lo que las ni?as prodigio jam¨¢s quieren comentar. Lo hizo ense?ando unos labios pintados de naranja fluorescente, ropa superurbana y esas largu¨ªsimas u?as que son santo y se?a de Rosal¨ªa. ¡°He cambiado pero siempre he sido urbana¡±, reiter¨® Mar¨ªa Isabel, dejando claro que ese g¨¦nero musical es mucho mayor que Rosal¨ªa.

No se lo discut¨ª porque estaba pensando en Isa P (que se pronuncia Pi), antes m¨¢s conocida como Chabelita, la hija de Isabel Pantoja, que nos tiene en ascuas ante la inminente salida de su primer v¨ªdeo musical. ¡°Ahora estoy mejor¡±. Y es porque Isa P es ahora m¨¢s deudora del estilo de Rosal¨ªa que del de su progenitora. Aunque haga un esfuerzo enorme por no parecer una estrella del Korean Pop, Isa P no puede evitar tampoco el influjo de la escuelita de Rosal¨ªa. Ella lucha por gustar y ense?a gl¨²teos con alarmante apariencia de estar retocados y m¨¢s propios de Miss Venezuela que de Miss Corea. Pero clama y reclama que su madre deber¨ªa acompa?arla para su estreno musical. Ah¨ª donde Rosal¨ªa va sola con su talento, Isabel Pi necesita la aceptaci¨®n materna y en p¨²blico.

Esa llamativa necesidad de la presencia materna se est¨¢ convirtiendo en un fen¨®meno propio de las actuales celebrities. Cayetano Mart¨ªnez de Irujo tambi¨¦n pertenece a esa estirpe y no duda en titular su exitoso libro de memorias De Cayetana a Cayetano. Sin adentrarse en la est¨¦tica transg¨¦nero, me lo coment¨® abiertamente antes de nuestra entrevista en la televisi¨®n p¨²blica. Lo encontr¨¦ genial, una mezcla peculiar, aunque no del todo insensata, de autoayuda y egotrip. Cayetano como entrevistado es ¨²nico, te involucra y te hace sentir la transferencia: que solo t¨² recibes algo muy noticioso. M¨¢s que lazos de sangre, este libro de memorias apunta a convertirse en charcos de sangre o en una serie de televisi¨®n para cualquier plataforma digital interesada en lo cotidiano de los Grandes de Espa?a. Pero para que la historia funcione, tiene que haber una madre a gran escala como fue Cayetana de Alba.

?Espa?a es muy de madres! Y la prensa del coraz¨®n lo sabe, lo exprime y lo refuerza. Muchas de las hero¨ªnas de esa industria son madres. Obreg¨®n, Preysler, Pantoja, Cervera, Mar Flores, Luc¨ªa Bos¨¦, Bel¨¦n Esteban, adalides de lo que significa ser madre y espa?ola. Luchadoras y supervivientes pero siempre mam¨¢s. Al igual que el ¨¦xito de Rosal¨ªa, se trata de una f¨®rmula irresistible. En Espa?a todos los caminos llevan a la madre.

Cayetano escribe en sus memorias que su madre no estaba preparada para serlo. Al final acepta, entiende, que es igual a ella. Hay transferencia de Cayetana a Cayetano. Los hijos, mientras podemos, le echamos la culpa de lo malo a nuestros padres, asumiendo que es una buena terapia para encarrilar nuestra propia vida. Otra frase provocadora es cuando Cayetano describe a la Infanta Elena (que, oh sorpresa, ?fueron novios por tres meses!) como ¡°superentra?able y supertodo¡±. Pienso que debe ser superdif¨ªcil ser ambas cosas. Pero es que en un mundo donde lo s¨²per es ser madre, todo lo que se puede calificar de s¨²per tiene menos contenido. Pienso que deber¨ªamos aplicarlo despreocupadamente. Por ejemplo, el panorama pol¨ªtico: supercomplicado y supertodo. Incluso para seguir celebrando los super¨¦xitos de Rosal¨ªa, que es ahora la madre del cordero.