Pen¨¦lope Cruz y sus sue?os cumplidos

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¡°Siempre fui una gran so?adora. Desde ni?a tuve conciencia de que so?ar despierta era la mejor manera de modelar un mejor futuro posible. Mis sue?os en mi infancia eran principalmente dos: poder alg¨²n d¨ªa convertirme en madre y poder dedicarme a mi pasi¨®n: interpretar¡±, as¨ª comenz¨® Pen¨¦lope Cruz su discurso tras recibir el Premio Donostia del Festival de San Sebasti¨¢n la semana pasada. Despu¨¦s llegaron los agradecimientos personales y en ellos aparecieron todos los nombres que le anclan al suelo: sus padres, sus dos hijos,?Pedro Almod¨®var, Bigas Luna y Fernando Trueba (los directores que han marcado su carrera), Juan Carlos Corazza, Cristina Rota y Katrina Bayonas (sus profesores de interpretaci¨®n y su representante) y por supuesto Javier Bardem, el actor con el que coincidi¨® en Jam¨®n, jam¨®n cuando ten¨ªa 18 a?os y con quien se reencontr¨® 15 a?os m¨¢s tarde en Vicky, Cristina, Barcelona y decidi¨® formar una familia. ¡°Gracias a mis dos preciosos hijos y al compa?ero de viaje m¨¢s maravilloso que se puede tener y ¨¦l, s¨ª, tambi¨¦n estaba incluido en mis sue?os¡±, a?adi¨® una emocionada y nerviosa Pen¨¦lope dirigi¨¦ndose a su marido.

Pese a sus palabras, Cruz no pudo imaginar ni en la mejor de sus fantas¨ªas todo lo que le ha ocurrido en sus 45 a?os de vida. La actriz vive su momento m¨¢s dulce, esa cuadratura del c¨ªrculo que pocas veces llega a concretarse. Ha madurado como int¨¦rprete y encadena grandes aciertos profesionales en esa edad en la que otras actrices ven c¨®mo comienzan a escaparse los papeles porque llegan caras nuevas y m¨¢s j¨®venes. Se suceden los reconocimientos internacionales ¡ªen 2018 recibi¨® el C¨¦sar de Honor en Francia y el Bambi a Mejor Actriz Internacional en Alemania¡ª y, lo que parece m¨¢s importante para ella, su vida familiar est¨¢ justo donde quiso siempre: en Madrid, con una pareja con la que se siente plena y c¨®mplice y con dos hijos que ha convertido en el v¨¦rtice principal sobre el que giran sus decisiones.

Por ellos se han trasladado desde su piso cerca del Retiro a vivir a las afueras de Madrid, cerca del colegio que buscaron cuidadosamente para que Leo, de ocho a?os, y Luna de seis ¡ªque se llama as¨ª en honor de Bigas Luna¡ª recibieran esa educaci¨®n basada en una pedagog¨ªa alternativa que sus padres quer¨ªan para ellos.

Sus hijos pesaron en la decisi¨®n de turnarse cuando ruedan y llevar una vida normal, alejada del halo de fama que les rodea como profesionales. Tambi¨¦n en la idea de instalarse definitivamente en Espa?a, en su ciudad de siempre, donde tanto Pen¨¦lope como Javier crecieron y comenzaron sus respectivas carreras. En la misma ciudad reside el resto de su familia, las madres de ambos y sus hermanos, personas importantes con quienes mantiene un contacto frecuente y c¨¢lido.

Sus amigos del alma, entre los que se encuentran la actriz y modelo Goya Toledo y el escritor Luis Alegre, la definen ¡°generosa, emp¨¢tica, con talento y con mucha alegr¨ªa de vivir¡±. Nada que ver con esa imagen distante que le ha colgado la prensa espa?ola probablemente por la defensa gran¨ªtica que la pareja mantiene sobre su vida personal. ¡°Si ese sambenito fuera cierto, ¡°Pen¨¦lope no habr¨ªa salido como la primera mujer con la que los espa?oles se ir¨ªan de ca?as seg¨²n una encuesta que realiza anualmente una asociaci¨®n de empresas cerveceras¡±, argumenta Luis Alegre. Quienes la han tratado afirman que esa impresi¨®n obedece m¨¢s a una cierta timidez y protecci¨®n en las entrevistas que a su aut¨¦ntico car¨¢cter. ¡°Cuando se siente segura, Pen¨¦lope es graciosa y cari?osa¡±, afirma un periodista pr¨®ximo a la artista.

Otra de las etiquetas que le han colgado es su capacidad para mimetizarse con los gustos y aficiones de sus parejas sentimentales, entre los que se cuentan Nacho Cano, Tom Cruise, Matt Damon y Matthew McConaughey. De ser cierto, Javier Bardem le ha contagiado su pasi¨®n por las causas sociales. Participa en muchas aunque prefiere hacerlo discretamente, sin alardes. Pero en San Sebasti¨¢n tambi¨¦n rompi¨® esta norma no escrita y se posicion¨® claramente contra la violencia de g¨¦nero y en defensa de tomar medidas para preservar el planeta para futuras generaciones.

Si como afirma, su vida parece una sucesi¨®n de sue?os cumplidos, queda recorrido para rato. Una an¨¦cdota puede servir de confirmaci¨®n a su teor¨ªa: una noche de 1994 so?¨® con Pedro Almod¨®var, al que no conoc¨ªa. Al d¨ªa siguiente, acompa?ada de su inseparable Luis Alegre, entr¨® en un bar y all¨ª estaba el director. Poco despu¨¦s hizo una prueba para una escena de Carne Tr¨¦mula y m¨¢s tarde la rod¨® junto a Pilar Bardem, la madre de su actual marido. ?Sue?os o coincidencias?