De Clint Eastwood a George W. Bush, tras el rastro de los descendientes de los Padres Peregrinos
A pocos d¨ªas de Acci¨®n de Gracias, Plymouth, en EE UU, se prepara para celebrar el 400? aniversario de la llegada de los Padres Peregrinos junto al mayor legado: sus descendientes.
Al acercarse al litoral de Massachusetts, los pasajeros del May?flower solo pod¨ªan pensar en sobrevivir. Tras dos meses en un barco de carga durante una traves¨ªa atroz que hab¨ªa zarpado de la ciudad inglesa de Plymouth, desembarcaban en una playa en la costa este de Norteam¨¦rica en la que, en un futuro, ser¨ªa la Plymouth estado?unidense. Era noviembre de 1620 y aquel deseo no se materializ¨® del todo porque en el primer invierno murieron la mitad de ellos. Los 102 ocupantes del Mayflower, sin embargo, pasaron a la historia por formar el primer asentamiento permanente de colonos de EE UU.
¡°Es importante contar la historia de los peregrinos, ya que ayudaron a fundar este pa¨ªs¡±, dice Lea Sinclair Filson, volcada en la preparaci¨®n del 400? aniversario de la llegada de aquella nave en la ciudad de ?Plymouth. Sinclair es miembro y expresidenta de la General Society of Mayflower Descendants (Sociedad General de Descendientes del Mayflower), organizaci¨®n creada en 1897 que agrupa a 30.000 descendientes de aquellos pasajeros, apenas un pellizco de los 35 millones de personas ¡ª10 millones de ellos estadounidenses¡ª que descienden de los llamados Padres Peregrinos.
Para Lea Sinclair todo empez¨® hace medio siglo, cuando su abuela reconstruy¨® el v¨ªnculo con un pasajero del barco. ¡°La mayor¨ªa de la gente no busca su genealog¨ªa hasta que son mayores. Cuando tienes 50 o 55 a?os empiezas a pensar que no vas a vivir para siempre y comienzas a investigar de d¨®nde vienes¡±, detalla. Pero la semilla sembrada por su abuela brot¨® en ella al cumplir los 40. Y empez¨® a trepar por las ramas de sus ancestros.
El rastro de las primeras cinco generaciones lo busc¨® en los archivos de la Mayflower Society, unos libros que despliegan la enredadera de apellidos. A¨²n ten¨ªa que ahondar en siete generaciones m¨¢s para completar la docena de eslabones que la separaban de los pasajeros. Viaj¨® por Illinois, Virginia, Ohio, Texas, Massachusetts, Vermont y Connecticut. Sigui¨® las migas del camino a trav¨¦s de actas de defunci¨®n, partidas de nacimiento y certificados matrimoniales, y su obsesi¨®n empez¨® a dar frutos. Tras una d¨¦cada de investigaciones, consigui¨® unir las piezas que la separaban de ocho pasajeros del barco: Degory Priest, Edward Doty, Elizabeth Fisher, Stephen Hopkins, Francis Cooke y tres miembros de la familia Allerton.
Algunos de los descendientes m¨¢s conocidos de los Padres Peregrinos son Katharine Hepburn, George W. Bush o Clint Eastwood. Muchos otros no lo sospechan, pues los apellidos originales se enredaron en la mara?a de ramas de un tronco com¨²n cada vez m¨¢s lejano, cuando los colonos ampliaron el radio de matrimonios y comenzaron a esparcirse. Ahora Plymouth espera el pr¨®ximo encuentro en 2020 de 5.000 descendientes, mientras Lea Sinclair Filson sigue explorando entre la espesura de sus antepasados: est¨¢ a las puertas de completar su v¨ªnculo con otro pasajero, Richard Warren. Y no parece detenerse. ¡°Cuando empiezas a investigar¡±, asegura entre risas, ¡°se vuelve una adicci¨®n¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.