El discurso del odio
La criminalizaci¨®n de los menores inmigrantes no acompa?ados crea las condiciones para que surja la violencia
El ataque al centro de acogida de menores de Hortaleza, en Madrid, debe ser tomado como una seria advertencia sobre el riesgo que comportan ciertos discursos p¨²blicos destinados a estigmatizar a determinados colectivos, en este caso el de los menores inmigrantes que han llegado sin la protecci¨®n y la tutela de un adulto. Aunque la granada ten¨ªa poca carga, carec¨ªa de espoleta y se desconoce todav¨ªa qui¨¦n la deposit¨® en el jard¨ªn, la acci¨®n ha servido a los objetivos de quienes desde hace tiempo vienen utilizando a este centro como diana de su discurso xen¨®fobo: amedrentar a los menores acogidos y criminalizar a un colectivo especialmente desvalido que Vox utiliza de forma sistem¨¢tica para alimentar el rechazo a los inmigrantes.
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Vox pretende reducir un problema social a una cuesti¨®n de orden p¨²blico, y para ello no duda en difundir datos falsos sobre la conducta de estos menores. Los informes policiales demuestran que el barrio de Hortaleza no presenta un ¨ªndice de delincuencia superior a otros de su mismo perfil sociol¨®gico. Pero el centro ahora atacado ha sido objeto de un se?alamiento sistem¨¢tico por parte de los dirigentes de Vox. El candidato Santiago Abascal se refiri¨® a ¨¦l en t¨¦rminos alarmistas en un debate electoral que vieron m¨¢s de ocho millones de espectadores, y tanto Ortega Smith como Roc¨ªo Monasterio se han manifestado en las puertas del centro para difundir sospechas infundadas y crear un clima adverso hacia los menores. En eso consiste precisamente el riesgo del discurso del odio, en crear una atm¨®sfera colectiva de hostilidad hacia el colectivo se?alado que f¨¢cilmente puede derivar en violencia.
Lo grave es que ahora ese discurso se difunde desde las tribunas institucionales y puede ser mucho m¨¢s eficaz a la hora de crear un estado de opini¨®n t¨®xico contra los colectivos que trata de criminalizar. Los ataques y amenazas que sufre al centro de Hortaleza dificultan la tarea de los trabajadores sociales que se ocupan de la protecci¨®n de estos menores en unas condiciones muy adversas. A los graves problemas de saturaci¨®n que sufre el centro se a?ade ahora el clima hostil que se ha generado en el barrio. La estrategia de Vox est¨¢ alterando tambi¨¦n la vida institucional. PP y Ciudadanos han podido comprobar de nuevo las amargas servidumbres que comporta el hecho de que la mayor¨ªa del Gobierno dependa de Vox.
El problema de los menores no acompa?ados debe ser abordado desde el estricto cumplimiento de los derechos de la infancia. En este contexto de se?alamiento y estigmatizaci¨®n del colectivo, el hecho de referirse a ellos por el acr¨®nimo Mena (menores emigrantes no acompa?ados) induce un proceso de despersonalizaci¨®n que debe evitarse. Los menores que emigran solo son ni?os en situaci¨®n de especial vulnerabilidad, y como ni?os necesitados de ayuda y protecci¨®n deben ser tratados.
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