Putin: prisa y control
La reforma constitucional del presidente ruso est¨¢ marcada por el ansia de controlar el proceso al margen de los procedimientos legales
El comienzo de la reforma constitucional en Rusia, anunciada por el presidente, Vlad¨ªmir Putin, est¨¢ marcado por la prisa y por el ansia de controlar el proceso al margen de los mecanismos legales claramente establecidos para una decisi¨®n de semejante trascendencia en la vida del Estado.
Las reglas para enmendar la Constituci¨®n, recogidas en ese mismo documento, obligan a convocar una Asamblea Constituyente para modificar el contenido de varios cap¨ªtulos, entre ellos el que se refiere a los ¨®rganos de poder estatal y a la primac¨ªa de los tratados internacionales sobre la ley nacional.
Los dirigentes rusos evitan referirse a la Asamblea Constituyente, que no ha sido creada hasta ahora. Varios proyectos de ley presentados a la Duma a lo largo de los a?os ¡ªel ¨²ltimo, de 2017¡ª no fueron debatidos por los legisladores y en el aire qued¨® el llamamiento de Dmitri Medv¨¦dev, en 2012, siendo a¨²n presidente de Rusia, para que su Administraci¨®n comenzara a elaborar esa ley.
El Kremlin trata de nadar y guardar la ropa, es decir, reforzar su poder sin tocar formalmente los cap¨ªtulos blindados de la ley fundamental. Un modo de redistribuir competencias consistir¨ªa en introducir los cambios en los cap¨ªtulos no blindados de la Constituci¨®n con el fin de puentear aquellos art¨ªculos ¡ªlos blindados¡ª que el Kremlin no puede alterar sin convocar una Asamblea Constituyente y organizar posteriormente un refer¨¦ndum. El resultado ser¨ªa una colcha de retales jur¨ªdicos contradictorios, sin columna vertebral y sin l¨®gica interna, que se adaptar¨ªa a las necesidades de la clase en el poder.
El calendario es de v¨¦rtigo y, seg¨²n las etapas desveladas, el proceso concluir¨¢ en mayo, tras la aprobaci¨®n de las enmiendas constitucionales entre febrero y marzo. El colof¨®n ser¨¢ una votaci¨®n popular ¡°voluntaria¡± que, sin embargo, no es el refer¨¦ndum previsto para modificar los cap¨ªtulos blindados.
La prisa del Kremlin se evidencia en la precipitada formaci¨®n de un comit¨¦ de trabajo de 75 miembros ¡ªde ellos muchos personajes de la cultura, el deporte y de organizaciones no gubernamentales afines al Kremlin¡ª que se reuni¨® ayer jueves ya para estudiar las enmiendas. En cuanto al exjefe del Gobierno Dmitri Medv¨¦dev, para el que Putin ha creado el cargo de vicepresidente del Consejo de Seguridad, los polit¨®logos rusos discrepan sobre si se trata de un estadista amortizado o si podr¨ªa desempe?ar de nuevo el cargo de presidente. Est¨¦ donde est¨¦ en el nuevo dise?o de las estructuras de poder, Medv¨¦dev es una m¨¢s de las piezas que Putin va colocando en el tablero para seguir mandando en Rusia.
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