Ingenieros de hace 1,8 millones de a?os

El uso de materiales del entorno como herramientas no es exclusivo del hombre. Muchas especies son capaces de utilizar elementos disponibles. El trono de antig¨¹edad de esta pr¨¢ctica por parte de hom¨ªnidos se sit¨²a ahora en 2,58 millones de a?os en una zona des¨¦rtica al sur de Etiop¨ªa conocida como Bokol Dora, donde se han hallado unas 300 herramientas peque?as y afiladas, seg¨²n public¨® un equipo internacional de paleoantrop¨®logos en la revista Proceedings de la Academia Nacional de Ciencias de EE UU. Pero hay un salto evolutivo sustancial: la selecci¨®n de materiales, no necesariamente del entorno m¨¢s cercano, por su dureza, potencial de carga y vida ¨²til para fabricar herramientas espec¨ªficas m¨¢s eficientes. La prueba de esta pr¨¢ctica hace 1,8 millones de a?os ha sido demostrada en una excavaci¨®n en la Garganta de Olduvai (Tanzania), cuna de la primera cultura humana y donde se escribieron las primeras p¨¢ginas del g¨¦nesis de la ingenier¨ªa si se considera esta como el conjunto de conocimientos orientados a la invenci¨®n y utilizaci¨®n de t¨¦cnicas para el aprovechamiento de recursos naturales.

El hallazgo, publicado por Journal of Royal Society Interface, ha sido realizado por un equipo de la Universidad de Kent, el UCL Institute of Archaeology (ambas instituciones del Reino Unido) y el profesor Ignacio de la Torre, del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC, que ahora se encuentra en Tanzania completando la investigaci¨®n.

La primera cultura humana, la Olduvayense (llamada as¨ª por la Garganta de Olduvai de Tanzania), se caracteriza por el uso de cantos tallados. La investigaci¨®n liderada por Alastair Key, ha demostrado que los hom¨ªnidos de esta zona dieron un paso fundamental en la evoluci¨®n al descartar las lavas, cuarcitas o cherts (roca sedimentaria) disponibles y adecuadas para producir herramientas de piedra para decantarse por otros materiales m¨¢s adecuados a la funci¨®n que buscaban.

?Lo que hemos podido demostrar es que nuestros antepasados estaban tomando decisiones bastante complejas sobre qu¨¦ materias primas utilizar y lo hac¨ªan de una manera que produc¨ªa herramientas optimizadas para circunstancias espec¨ªficas. Aunque sab¨ªamos que las especies de hom¨ªnidos posteriores, incluida la nuestra, eran capaces de tomar tales decisiones, es incre¨ªble pensar que las poblaciones de hace 1,8 a 1,2 millones de a?os tambi¨¦n lo estaban haciendo¡±, explica Key.

La investigaci¨®n ha cuantificado la fuerza, el trabajo y la deformaci¨®n aplicada a los materiales en cada tipo de piedra para elegir aquellas que arrojaban un mejor rendimiento. De esta forma, los hom¨ªnidos paleol¨ªticos seleccionaron las materias primas m¨¢s adecuadas para construir diferentes herramientas de piedra basadas en informaci¨®n sobre su filo, durabilidad y eficiencia en funci¨®n de cu¨¢nto tiempo iban a ser usadas y la fuerza que era necesario aplicar. Esto revela una complejidad en el dise?o y la producci¨®n de la herramienta durante la Edad de Piedra temprana.

De la Torre, del departamento de Arqueolog¨ªa y Procesos Sociales del CSIC, al que se ha incorporado procedente del Institute of Archaeology del University College de Londres, y que ha obtenido un ERC-Advanced Grant, explica desde Tanzania que la importancia del estudio que est¨¢n realizando no es tanto la demostraci¨®n de la selecci¨®n de materias primas, que se ha documentado en yacimientos m¨¢s antiguos, sino en ¡°averiguar por qu¨¦ eleg¨ªan un tipo de piedras en concreto de forma preferente¡±. ¡°Seg¨²n nuestros resultados, ya Homo habilis entend¨ªa los conceptos de durabilidad de los bordes cortantes de las rocas y el grado de afilado, y combinaba tales conceptos en la selecci¨®n preferencial de unas rocas sobre otras para elaborar sus instrumentos l¨ªticos¡±, comenta.

En este sentido, investigaciones anteriores hab¨ªan demostrado que las poblaciones de la Edad de Piedra temprana en Kenia seleccionaban tipos de piedra altamente duraderos para herramientas, pero el nuevo estudio revela un nivel de complejidad y flexibilidad en la producci¨®n de herramientas de piedra in¨¦dito. ¡°Al seleccionar el material que mejor se adaptaba a necesidades funcionales espec¨ªficas, los hom¨ªnidos optimizaban el rendimiento de sus herramientas y garantizaban la m¨¢xima eficiencia y facilidad de uso¡±, concluye el estudio.

¡°Esta demostraci¨®n ayuda a comprender mejor las decisiones implicadas en la selecci¨®n de materias primas, que ya de por s¨ª es una pregunta de investigaci¨®n que no suele abordarse de forma sistem¨¢tica por parte de los arque¨®logos, y permite comprender mejor las decisiones t¨¦cnicas y la capacidad organizativa de seres humanos con cerebros mucho m¨¢s arcaicos que los nuestros¡±, explica el investigador espa?ol.

Entre los objetos analizados se encuentran lascas, que De la Torre describe como ¡°cuchillos de piedras con bordes cortantes que se usaban para seccionar carne o cualquier otro elemento que necesitaran en sus actividades de subsistencia (tendones, maderas, ra¨ªces, etc¨¦tera)¡±, y ¡°machacadores y yunques, que los hom¨ªnidos usar¨ªan para abrir los huesos y adquirir la m¨¦dula que carro?aban de las presas de grandes carn¨ªvoros¡±.

Esta investigaci¨®n sobre las estrategias de subsistencia de los primeros seres humanos es el objetivo de la nueva excavaci¨®n en una serie de yacimientos de Olduvai, un proyecto que lidera el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), y que cuenta con investigadores de University College London (Reino Unido), Indiana University (EEUU) y la UAB y el CENIEH espa?ol.