Confluencias

Casado se muestra esperanzado ante la posibilidad de que el PP confluya con Ciudadanos en una lista ¨²nica con vistas a las pr¨®ximas convocatorias electorales. Los portavoces del partido de Arrimadas caminan con una sonrisa radiante hacia su hecatombe, y no me extra?a. Tal como est¨¢n las cosas, esa alianza es m¨¢s rentable para ellos que para los populares, y si el pez grande acaba comi¨¦ndose al chico, mejor que mejor. Su autodisoluci¨®n, para incorporarse al PP, les ahorrar¨ªa un final catastr¨®fico, semejante al de UPyD, el ¨²nico que se dibuja en el horizonte. El PP y Ciudadanos saben adem¨¢s que su uni¨®n no ser¨¢ condenada como frentista, frentepopulista o guerracivilista, ep¨ªtetos a los que ambos recurren de manera sistem¨¢tica para descalificar cualquier lista ¨²nica de partidos de izquierdas. Pero en esta ecuaci¨®n hay una cifra que no cuadra. Los votantes originarios de Rivera, que antes lo fueron de Rosa D¨ªez, y que se habr¨¢n identificado con la dimisi¨®n de Borja S¨¦mper, se quedar¨¢n en la intemperie m¨¢s absoluta. Tal vez no sean muchos, pero no son pocos. ?Y qu¨¦ har¨¢n? ?Se resignar¨¢n a votar a un PP que compite con Vox por el voto m¨¢s rancio de la Espa?a inmortal con Ciudadanos subido en la chepa, o se quedar¨¢n en casa? Creo que una nueva formaci¨®n, un verdadero partido de centro derecha, verdaderamente moderado, responsable y democr¨¢tico de verdad, tendr¨ªa un futuro halag¨¹e?o en esta situaci¨®n. Creo que nos hace falta a todos, no s¨®lo a sus presuntos votantes. Y si ya, de paso, arrastrara a sus filas a los barones socialistas que se muerden la lengua para no llamar frentepopulista al Gobierno de su propio partido, si llegara incluso a suscitar las bendiciones de Felipe Gonz¨¢lez, vivir¨ªamos todos mucho m¨¢s tranquilos.