R¨¦quiem por Fran ?lvarez
Me conmueven hasta la m¨¦dula esos padres que se desloman por dar futuro a sus hijos sin hacer carrera de ellos
La calle de Alcal¨¢, la m¨¢s larga de Madrid y la cuarta de Espa?a, es un esc¨¢ner de contraste que para s¨ª quisiera el CIS de Tezanos. En sus 10,5 kil¨®metros cohabitan, separados por cruces que son abismos, poderosos y excluidos, lujo y miseria, ¨¦lite y lumpen a ambos extremos de la clase media dominante. La M-30 es la frontera. De lo que pasa Ventas abajo suelen hablar las p¨¢ginas de pol¨ªtica y sociedad de los medios. Lo de Ventas arriba no existe, salvo en las de sucesos. Hay de todo en todas partes, claro. Pero a orilla de Alcal¨¢, a la altura de El Carmen, hay zonas en las que salir del barrio es como ir al extranjero con el abono transporte y la Visa en la boca. Cuadras de bloques de jubilados, parados viejos, j¨®venes con oficio y sin beneficio o ni una cosa ni otra, y adolescentes busc¨¢ndose la vida y a ellos mismos alrededor de la farmacia, el ambulatorio, la fruter¨ªa barata, las casas de apuestas, la mercer¨ªa del letrero de se traspasa y los bares de poca monta. ?goras de exigua parroquia d¨¢ndole cuartelillo a una ca?a, un co?ac, un tinto, un cafelito con leche en vaso, una de bravas o un men¨² del d¨ªa a precio tasado, pues el salario m¨ªnimo, en seg¨²n qu¨¦ vecindarios, es un sueldazo.
En una de esas tascas, levantada tapa a tapa por un probo matrimonio, atend¨ªa hasta su muerte hace unos d¨ªas Fran ?lvarez, un chicarr¨®n de 43 a?os, padre de un chaval de 21 y exmarido de la c¨¦lebre exvecina Bel¨¦n Esteban. Part¨ªa el alma ver a su anciano padre enterrar a su hijo muerto de quimeras y excesos tras a?os de verlo dar tumbos sin encontrar su sitio. La madre ni pudo asistir, muerta en vida por sobrevivirle. Me conmueven hasta la m¨¦dula esos padres que se desloman por dar futuro a sus hijos sin hacer carrera de ellos. Descanse en paz el pen¨²ltimo ahogado en alcohol y des¨¢nimo. Nadie evocar¨¢ sus gestas en ning¨²n medio de prestigio. Yo, tampoco. Humildemente, los acompa?o en el sentimiento.
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