Un hombre tranquilo vuela sobre una bicicleta por las calles de Madrid
El hispano-nigeriano Courage Adams es un prodigio del BMX, un deporte al l¨ªmite en el que ¨¦l encuentra ¡°equilibrio y paz interior¡±. Las calles de la capital son el campo de entrenamiento para sus alucinantes piruetas
Cuando uno entra en el apartamento de una joven estrella del BMX ¡ªdeporte consistente en hacer alucinantes cabriolas con una bici¡ª, patrocinada por una marca de bambas adorada por los adolescentes y por un emporio de la bebida energ¨¦tica; cuando uno accede a su hogar por la ma?ana, y recibe su choque de manos a lo NBA, y aprecia su espl¨¦ndida sonrisa africana, y ve que en la tele tiene puestos videoclips de ostentosos raperos americanos, pese a notar de inmediato su sencillez y que es un crack que no va de fantasm¨®n, lo que no se espera es que husmeando en sus cosas mientras le hacen fotos se vaya a encontrar con un libro ¡ªEl monje que vendi¨® su Ferrari, por Robin Sharma¡ª que nos revele que este fen¨®meno de un espect¨¢culo extremo tiene el alma de un existencialista en busca de equilibrio.
¡ªCourage, ?de qu¨¦ va este libro?
¡ªEs de autoayuda. Y es uno de mis favoritos.
Courage Adams (Benin City, Nigeria, 1996) es una de las grandes figuras emergentes del BMX, siglas de bicycle motocross, una pr¨¢ctica nacida en California en los a?os setenta que hoy supone un negocio global de m¨¢s de 5.000 millones de d¨®lares anuales (casi 4.500 millones de euros), seg¨²n un an¨¢lisis de Market Study Report, y es deporte ol¨ªmpico desde los Juegos de Pek¨ªn 2008.
Nigeriano y espa?ol, eso es Courage; o, m¨¢s en concreto, de Benin y pamplon¨¦s. Primero lleg¨® a Pamplona su padre, Mois¨¦s, y despu¨¦s, en 2005, llegaron su madre, Evelyn; sus hermanas, Faith y Lisa, y ¨¦l. De su tierra de origen conserva los recuerdos de una vida m¨¢s dura que la espa?ola, aunque en su caso con las necesidades b¨¢sicas cubiertas, y sendos cortes en sus p¨®mulos que le hicieron de peque?o para marcar su regi¨®n de pertenencia. Lleva tambi¨¦n consigo su ¡°gen¨¦tica favorable¡±, dice. De estatura mediana, su tronco superior es una pir¨¢mide invertida de una fortaleza que no es f¨¢cil describir.

¡ª?T¨² c¨®mo lo describir¨ªas? ¡ªle pregunto a nuestro vide¨®grafo.
¡ªNo s¨¦. El otro d¨ªa una amiga me estaba hablando de alguien con un gran f¨ªsico y me dijo: ¡°?Es b¨ªblico!¡±.
Courage, t¨ªmido, sonr¨ªe y nos dice que ya es hora de salir de casa para ir a hacer BMX por Madrid, adonde se mud¨® hace tres a?os para dar m¨¢s impulso a su carrera.
¡ªVenga, nos vamos al Congreso a elaborar leyes ¡ªbromea.

La plaza de las Cortes, proyectada por el premio Pritzker portugu¨¦s ?lvaro Siza, es uno de sus lugares favoritos para ejercitarse en su especialidad, el BMX Urban Freestyle; en espa?ol: me cojo mi bici, salgo a la calle y me pongo a hacer movidas imposibles, tratando de no molestar al resto de ciudadanos y dejando flipado a todo aquel que se cruce conmigo haciendo eso mismo, mis locas y fant¨¢sticas movidas.
¡ª?Madre de Dios lo que ha hecho! ¡ªgrita a sus amiguetes un chaval que vaguea en la plaza a mediod¨ªa antes del reciente estado de alarma.
Le pedimos a la pandilla que le pongan adjetivos a lo que ven y dicen unos sobre los otros: ¡°Incre¨ªble, imposible, la hostia t¨ªo, guap¨ªsimo y brrrrutal¡±, as¨ª, con mogoll¨®n de erres.
A Courage le encanta la placita de delante del Parlamento nacional porque sus l¨ªneas minimalistas y sus bancos son id¨®neos para saltar y deslizarse, y adem¨¢s encuentra un obst¨¢culo estupendo para hacer piruetas en su solemne estatua central, dedicada al Pr¨ªncipe de los Ingenios Espa?oles. Tras ejecutar sobre el pedestal del autor del Quijote un brinco denominado bunny hop, le comento:
¡ªEst¨¢s saltando sobre Cervantes.
¡ªS¨ª, soy consciente ¡ªresponde.
Johnny, un habitual de la plaza, lo saluda de paso y les dice a dos colegas veintea?eros: ¡°Va sobrao este pibe. Est¨¢ en el top ten del mundo. Lo jodido es que lleva a?os pidiendo el pasaporte espa?ol y no se lo han dao¡±.
Pese a llevar en Espa?a desde los siete a?os, Courage tiene permiso de residencia, pero sigue a la espera de la nacionalidad. ¡°Me siento impotente¡±, dice. Esto le ha impedido hasta ahora viajar a Estados Unidos a competir en los mejores eventos de BMX, su sue?o junto a darle un oro a Espa?a en unos Juegos Ol¨ªmpicos. Su primer mentor, Eneko Navarro, de 37 a?os y pionero de este deporte, prev¨¦ que su futuro desembarco en Am¨¦rica ¡°ser¨¢ una revoluci¨®n¡±. ¡°Lo suyo es muy jevi, de verdad. Es capaz de hacer lo que le da la gana¡±, explica por tel¨¦fono el hombre que introdujo en su cuadrilla a aquel chiquillo callado que se les quedaba embobado mirando sus saltos. ¡°No tiene l¨ªmites. Una de sus especialidades es un truco que yo llevo intentando hacer un cuarto de siglo y que no he logrado ni lograr¨¦¡±.
El truco se llama nose y consiste en rodar sobre la rueda delantera. Courage lo ensaya en una rampa de la parte de atr¨¢s del Museo del Prado, ante una pareja polaca que se ha detenido para disfrutarlo, y sigue a lo suyo hasta que, tras pegar un brinco descomunal sobre una escalera dise?ada por Rafael Moneo (se encuentra c¨®modo en los espacios concebidos por genios de la arquitectura), dos polic¨ªas que hab¨ªan estado haciendo la vista gorda nos piden con tacto que nos cortemos un poco.
La jornada ha terminado y Courage Adams se va con su bici, con la que dice que tiene ¡°una relaci¨®n de amor que no puedo explicar¡± y que le ¡°llena de paz interior¡±. ¡°Sin ella¡±, a?ade con madurez, ¡°me siento vac¨ªo¡±. Este joven de m¨²sculos herc¨²leos, valent¨ªa de acr¨®bata y m¨²ltiples cicatrices de oficio por toda su piel afirma que la bici se lo ha ense?ado todo sobre la vida. A seguir en pie cuando parece imposible y a caer sin matarse cuando ya no es posible mantenerse en pie. Que en el BMX ¡ªque en la vida¡ª es tan importante saber mantener el equilibrio como saber perderlo.
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