El voto o la vida
En Wisconsin, en vez de garantizar el derecho a votar por correo, esencial durante una epidemia, los tribunales obstaculizan su ejercicio
Siempre hay quien aprovecha las situaciones extremas para obligarnos a renunciar a alguno de nuestros valores. Cuando estamos en el l¨ªmite, como ahora es el caso con la pandemia, es f¨¢cil borrar los matices y situarnos ante dilemas insoportables. Es terror¨ªfico el men¨² de renuncias que se nos pide si no queremos arriesgar nuestra vida y la de nuestras familias: la privacidad, la libertad, la supervivencia de las generaciones mayores, e incluso la elecci¨®n democr¨¢tica de nuestros gobernantes.
Normalmente son falsas dicotom¨ªas, que deben resolverse gracias a la acci¨®n pol¨ªtica y al buen funcionamiento de las instituciones, pero en algunos casos consiguen el objetivo de obligarnos a optar entre dos males. Esto es lo que les ha sucedido este martes a los ciudadanos de Wisconsin, obligados literalmente a elegir entre renunciar a su derecho de voto o ejercerlo con riesgo para su salud y sus vidas.
Dos tribunales, el del Estado y el Supremo de los Estados Unidos, son los que han situado a los votantes ante tal tesitura. El tribunal inferior anul¨® el aplazamiento de la jornada electoral decretado por el gobernador del Estado, en consonancia con su orden de confinamiento. Y el m¨¢ximo tribunal estadounidense anul¨® la ampliaci¨®n de los plazos para votar por correo.
En la jornada de votaci¨®n se concentraron las primarias dem¨®cratas, que 15 estados han aplazado, y la elecci¨®n de un centenar de jueces, uno de ellos del supremo del Estado. Las medidas de confinamiento redujeron al m¨ªnimo la apertura de los colegios, que fueron solo 5 sobre 180 en el caso de Milwaukee, la ciudad donde se concentra el 10% de la poblaci¨®n.
En Wisconsin se ha librado el primer asalto del combate por la presidencia que culminar¨¢ el 3 de noviembre. Los republicanos, mayoritarios en ambos tribunales gracias a los nombramientos de Trump, y tambi¨¦n en las dos c¨¢maras del Estado, son los que han obligado al gobernador dem¨®crata a mantener la fecha electoral, sabiendo que la baja participaci¨®n favorece a su partido y embarra las primarias.
La pandemia juega en favor de Trump, entusiasmado con su t¨ªtulo de comandante en jefe en la guerra contra el virus, a pesar de sus rectificaciones, negligencias y mentiras. Su comparecencia diaria ante la prensa eclipsa cualquier protagonismo del candidato dem¨®crata Joe Biden, paralizado por el confinamiento, que solo ha conseguido algo de notoriedad ayer con la retirada de Bernie Sanders.
En vez de garantizar el derecho de voto por correo, esencial durante una epidemia, los tribunales obstaculizan su ejercicio. Seg¨²n la jueza Ruth Bader Ginsburg, en su voto disidente de la sentencia del Supremo, lo que est¨¢ en juego "es una cuesti¨®n de suma importancia para los derechos constitucionales de los ciudadanos de Wisconsin, para la integridad del proceso de elecci¨®n del Estado y para la salud de la naci¨®n".
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