Kevin Roose (¡®NYT¡¯): ¡°La tecnolog¨ªa no es una religi¨®n, pero es algo ineludible¡±
Entrevista con Kevin Roose, creador de ¡®Rabbit Hoole¡¯, el ¨²ltimo 'podcast' de 'The New York Times'
Cada d¨ªa en el mundo se consumen mil millones de horas de YouTube. Es decir, cada d¨ªa, las personas de todo el mundo se levantan y miran v¨ªdeos durante un tiempo equiparable a 114.000 a?os, el equivalente a esas mil millones de horas. ?Imaginan el poder colosal que tiene un algoritmo como el de YouTube? Esta es la pregunta que se formula Rabit Hoole, uno de los podcasts de esta cuarentena. Y no solo en Estados Unidos. Rabbit Hole es el t¨ªtulo de la nueva serie de audio narrativo de The New York Times dirigida por Kevin Roose, redactor de tecnolog¨ªa del diario ¡ªsu columna, The Shift ,examina la intersecci¨®n de la tecnolog¨ªa, los negocios y la cultura¡ª y con la producci¨®n de Wendy Dorr, Larissa Anderson, Andy Mills, Julia Longoria y Sindhu Gnanasambandan, el mismo equipo que estaba detr¨¢s de la fant¨¢stica Caliphate, la serie que contaba los or¨ªgenes del ISIS.
La premisa de Rabbit Hole es intrigante: un joven encuentra una v¨ªa de escape en Internet , pero no se da cuenta de que en el otro lado de la pantalla, poco a poco, una fuerza lo est¨¢ atrayendo a una espiral sin fin. ?En qu¨¦ consiste el algoritmo de YouTube? ?Si su objetivo es que pases el mayor tiempo posible visualizando contenido, hasta qu¨¦ lugar puede llegar su manipulaci¨®n? ?Se imaginan conocer al tipo que trabaja fabricando ese algoritmo, es decir, el responsable ¨²ltimo de decidir qu¨¦ v¨ªdeo va detr¨¢s del que usted ha elegido libremente? Esta es la historia de Caleb Cain, ese joven que empieza adorando a Obama y que termina absolutamente adicto a los v¨ªdeos de un grupo de youtubers supremacistas, fervorosos de Trump y antifeministas. ?Puede la inteligencia artificial hacer del mundo un lugar mejor? Probablemente, pero no es el caso que refleja Rabbit Hole.
Durante unos cuantos meses, Roose estuvo publicando en el peri¨®dico muchas de las historias que Rabbit Hole refleja. La adaptaci¨®n de sus textos al audio permite ahora construir todo un universo gracias a las voces de las grabaciones de YouTube. El productor Andy Mills y el ingeniero de audio Dan Powell explicaron en el bolet¨ªn de The New York Times c¨®mo crearon los paisajes sonoros inmersivos del show. Afirmaron que pel¨ªculas como R¨¦quiem for a Dream, Miedo y asco en Las Vegas y Enter the Void les inspiraron. Pocos podcasts podr¨¢n escuchar con un dise?o sonoro tan cuidado. Cada sonido tiene su significado en la historia. Casi tanto, como cada palabra del guion. Ambos ¡ªMills y Powell¡ª dec¨ªan en aquella newsletter que estaban interesados en crear la experiencia de "duplicar la realidad¡± a trav¨¦s del sonido y pon¨ªan algunos ejemplos. Si escuchan atentamente, podr¨¢n percibir la forma cuidadosa en que han expresado las voces en capas, han bajado los vol¨²menes y han realizado suaves panor¨¢micas, desde el giro de la oreja izquierda hacia la derecha, todo en un esfuerzo por recrear la forma en que el tiempo y el espacio pueden doblarse. Se trataba, en palabras de Mills y Poewll, de recrear el "hechizo hipn¨®tico emitido por las inteligencias artificiales que operan en sitios como YouTube, Twitter, Facebook e Instagram". Sin duda, consiguen su objetivo, ya que Rabbit Hole es uno de los podcasts m¨¢s experimentales de los ¨²ltimos tiempos. Al mando del equipo: Kevin Roose.
- P. Kevin, llevaba pensando en esta serie mucho antes de la Covid-19. ?Por qu¨¦ lo lanzan ahora, en medio del confinamiento?
- R. Hab¨ªamos programado lanzarlo uno o dos meses despu¨¦s, pero debido al coronavirus, nuestro equipo decidi¨® sacarlo. La serie trata sobre las formas en que Internet nos est¨¢ cambiando. Nos parec¨ªa que el podcast ten¨ªa un mensaje que podr¨ªa resonar con las personas que estuvieron y est¨¢n atrapadas dentro durante la cuarentena y que han pasado mucho m¨¢s tiempo de lo habitual conectados.
- P. Por cierto, ?por qu¨¦ titul¨® el podcast 'Rabbit Hole¡¯?
- R. Bueno, el t¨ªtulo se basa en la sensaci¨®n de caer en un "agujero de conejo" de contenido en Internet. Y claro, es una referencia a Alicia en el pa¨ªs de las maravillas. Algo as¨ª como una espiral.
- P. Este podcast tiene su origen cuando piensas acerca del tiroteo en la mezquita en Christchurch, Nueva Zelanda, por parte de un tipo llamado Brenton Tarrant que parec¨ªa imitar los asesinatos de los videojuegos. ?Por qu¨¦ marc¨® ese origen para el podcast?
- R. Despu¨¦s del tiroteo en Christchurch, que fue cometido por un supremacista blanco que mostr¨® signos de haber sido radicalizado a trav¨¦s de Internet, Andy Mills, productor de nuestro equipo de audio, vino a m¨ª con la idea de un podcast basado en algunos de los informes que hab¨ªan salido a prop¨®sito de su radicalizaci¨®n. Es decir, vimos que exist¨ªa una relaci¨®n profunda entre la cultura de Internet y su radicalizaci¨®n.
- P. Ha dicho que el prop¨®sito del podcast no es decir que todo est¨¢ mal en Internet, simplemente que "estas plataformas, aplicaciones y lugares donde pasamos tiempo en l¨ªnea no son neutrales y no son inertes".
- R. El prop¨®sito es iluminar las formas en que Internet y sus algoritmos influyen en nuestras creencias y comportamiento y mostrar ejemplos de personas cuyas vidas han cambiado por las cosas que encontraron en Internet. Simplemente eso.
- P. Hablemos de Caleb, protagonista de los primeros episodios. ?Cu¨¢ndo y c¨®mo empieza usted a investigar el viaje de Caleb y su obsesi¨®n con YouTube?
- R. Encontr¨¦ a Caleb despu¨¦s del tiroteo en Christchurch. Hab¨ªa estado buscando a alguien que pudiera ayudarme a entender c¨®mo las personas se radicalizaban en l¨ªnea, y ¨¦l hab¨ªa hecho un v¨ªdeo de YouTube sobre su propia experiencia, a trav¨¦s de la cual descubr¨ªa que se hab¨ªa encontrado v¨ªdeos de la extrema derecha a trav¨¦s de las recomendaciones de YouTube, de sus algoritmos. As¨ª que estuvo de acuerdo no solo en ser entrevistado, sino en enviarme todo su historial de visualizaci¨®n de YouTube para que pudiera ver su viaje por m¨ª mismo, lo que result¨® ser una herramienta de informes incre¨ªblemente ¨²til.
- P. Dan Powell es el audi¨®filo interno m¨¢s experimental que tienen en The New York Times. ?C¨®mo fue el dise?o de sonido de este podcast?
- R. El dise?o de sonido es en gran parte el trabajo de Dan Powell y Andy Mills, que son genios. No tengo idea de c¨®mo hacen lo que hacen, pero es incre¨ªble. Nuestros otros productores, incluidos Larissa Anderson, Julia Longoria y Sindhu Gnanasambandan, tambi¨¦n contribuyeron a que el espect¨¢culo sonara tan incre¨ªble. ?Yo soy solo el reportero!
- P. Dan Powell afirma que una de las herramientas ¨²tiles en el podcast es la biblioteca de efectos de transici¨®n que sirve como un "tipo de signo de puntuaci¨®n" al principio o al final de un montaje de cinta. Me pregunto si funcionan con el sonido de su gu¨ªa o al rev¨¦s.
- R. Con esta serie, tuvimos la suerte de que gran parte gira en torno a YouTube, lo que significa que hab¨ªa toneladas de v¨ªdeos de los que pod¨ªamos obtener sonido. Pero Dan cre¨® una biblioteca personalizada de sonidos "glitchy" (defectuosos) que podr¨ªamos usar para las transiciones entre esos clips. Realmente hace que cada episodio suene especial e inmersivo, como su propia versi¨®n de audio de una madriguera de YouTube. Nuestro proceso vari¨®, pero en general, el equipo de producci¨®n crear¨ªa un borrador (o muchos borradores) de un episodio; luego, una vez que se estableci¨® la estructura b¨¢sica, Dan y Andy se pusieron a trabajar en el dise?o y mezcla final del sonido.
- P. Cuenta que, a veces, est¨¢ un poco enfadado con lo que Internet le provoca. En el art¨ªculo de The New York Times se pregunta: ¡°?La ensalada que preparas para la cena es realmente lo que quiero comer, o creo que la foto me har¨¢ ver saludable y responsable cuando publique en Instagram m¨¢s tarde? ?Realmente quer¨ªa ver Schitt¡¯s Creek o simplemente confiaba en las recomendaciones de Netflix m¨¢s que en mi gusto? ?Cu¨¢les de mis gustos, pensamientos y h¨¢bitos son realmente m¨ªos, y fueron puestos all¨ª por un algoritmo? ?C¨®mo percibe que este derivado de la m¨¢quina se est¨¢ apoderando de todos nosotros?¡±.
- R. Creo que todos sacamos nuestras pistas de las m¨¢quinas a veces. Estamos rodeados de algoritmos y recomendaciones personalizadas todos los d¨ªas que nos ayudan a decidir qu¨¦ mirar, qu¨¦ noticias ver, qu¨¦ restaurantes pedir, qu¨¦ zapatos comprar. Se supone que estos algoritmos nos ayudan a expresar nuestras propias preferencias, pero muchos de ellos tambi¨¦n dan forma a nuestras preferencias. Finalmente, si les permitimos dirigir todas nuestras elecciones, perdemos la noci¨®n de nuestros propios deseos y preferencias. Lo que queremos es lo que la m¨¢quina quiere para nosotros.
- P. James Bridle escribe en The New Dark Age que "la fe en la m¨¢quina es un requisito previo para su uso". ?Vivimos en una era en la que la m¨¢quina y la tecnolog¨ªa son una nueva religi¨®n?
- R. No, no es una religi¨®n, porque las religiones requieren una opci¨®n afirmativa para creer. La tecnolog¨ªa es ineludible: nos sucede a todos cada d¨ªa, simplemente en virtud de vivir en el mundo moderno. Todo lo que podemos hacer es tratar de comprender las fuerzas que ejerce y asegurarnos de que estamos usando las m¨¢quinas, y no al rev¨¦s.
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