Los Pirineos se convierten en telas de la mano de Serge Castella

De peque?o, al anticuario e interiorista franc¨¦s Serge Castella le gustaba tanto esquiar en Canigou, un monte de los Pirineos, que ahora le ha dedicado su segunda colecci¨®n para la firma madrile?a de telas y papeles decorativos Gancedo. ¡°Se inspira en ese universo, pero no hay tintes de nostalgia¡±. Lo cuenta ¨¦l por tel¨¦fono: ¡°La he dise?ado de modo que pueda caber en cualquier contexto fuera de lo rural¡±.

Y caber, cabe. Porque Canigou ¨Cel homenaje llega hasta el t¨ªtulo de la colecci¨®n¨C abarca patrones varios como el Leaves, con ilustraciones de hojas aut¨®ctonas sobre una base de lino. El Deer, que le a?ade al mismo tejido cabecitas de ciervo en relieve de terciopelo. O el Cipr¨¦s, lleno de mandorlas similares a las de una jarra hist¨®rica de los sesenta, estampadas en tres tonos.

Los trampantojos tienen su hueco aparte, o bien recreando la madera en terciopelo ¨Cel caso de Wood¨C o el cuarzo en raso de algod¨®n ¨CQuartz¨C o reeditando un modelo que Castella traz¨® con gui?os a una fibra vegetal ¨CEsparto¨C en su colaboraci¨®n inicial con Gancedo. Tambi¨¦n hay tejidos de lino lavado a la piedra o cercanos a la lana en esta colecci¨®n que domestica el paisaje pirenaico y que el franc¨¦s imagin¨® un d¨ªa antes de present¨¢rsela a Gancedo.

¡°Siempre me paso muchos meses armando ideas, formas y acabados en mi cabeza¡±, concreta Castella. ¡°Y cuando ya est¨¢ todo amueblado, el resto solo es cuesti¨®n de unas horas¡±. Las buenas ideas suceden r¨¢pido.