Margarete y su impecable cocina
La Feria del Libro comienza el mi¨¦rcoles en la ciudad alemana Nuestro recorrido incluye una cocina dise?ada por la arquitecta Margarete Sch¨¹tte-Lihotzky Revolucion¨® en 1926 la vida dom¨¦stica
Lugar de encuentro y de mercado desde la antig¨¹edad romana, Fr¨¢ncfort es hoy conocida como sede de grandes festivales y ferias, y entre estas, la muy importante Feria del Libro (1) (del 10 al 14 de octubre, www.buchmesse.de), que comenz¨® su andadura en 1478. Fr¨¢ncfort, primera ciudad electrificada de Alemania, fue pr¨¢cticamente destruida durante la II Guerra Mundial. En la actualidad cuenta con unos 700.000 habitantes, es sede del Banco Central Europeo, del Banco de Alemania y de influyentes instituciones financieras, pero sobre todo son referencia sus intelectuales, grandes protagonistas de la modernidad, el expresionismo y la posmodernidad.
9.00 Utop¨ªa hecha realidad
Comenzaremos el d¨ªa paseando por las calles de un proyecto moderno realizado en la d¨¦cada de 1920 por el arquitecto Ernst May, el conjunto urban¨ªstico R?merstadt, llamado as¨ª por haber sido edificado sobre un antiguo enclave romano. Huyendo de los pisos oscuros y sin higiene del centro, este nuevo Fr¨¢ncfort se dot¨® de las novedades que el cambio de siglo hab¨ªa tra¨ªdo, como la energ¨ªa el¨¦ctrica y otras comodidades. Las peque?as casas de este barrio (un sue?o igualitario de naturaleza, aire, luz y jardines) forman un paisaje p¨²blico emocionante, y pasear por este plan mod¨¦lico de viviendas sociales es la constataci¨®n de que el cambio de vida es posible, de que a veces la utop¨ªa se vuelve realidad.
10.00 Ribera del Nida
En R?merstadt est¨¢ la casa museo del arquitecto Ernst May (2). Ah¨ª tuve la suerte de vivir en una de estas sencillas casas con jard¨ªn hace unos meses, mientras desarrollaba un proyecto art¨ªstico en homenaje a la famosa cocina de Fr¨¢ncfort, obra de la arquitecta Margarete Sch¨¹tte-Lihotzky, miembro del estudio de May. Margarete concibi¨® la primera cocina funcional de la historia, la madre de todas las cocinas de nuestros d¨ªas, que iba a cambiar la vida de las mujeres a partir de ese momento. Para visitarla hay que tomar el metro (l¨ªnea 1, estaci¨®n R?merstadt) y a la salida de la estaci¨®n basta con seguir las se?ales que conducen a la Ernst May Haus. Tras la visita a la peque?a casa, es una delicia aventurarse entre los jardines traseros y las sendas a lo largo de la ribera del Nida.
12.00 El St?del, en el subsuelo
Para volver al centro de la ciudad hay que tomar de nuevo la l¨ªnea 1 del metro hasta Schweitzer Platz y desde ah¨ª ir caminando a Museumsufer, a lo largo del r¨ªo Main, donde se encuentran museos como el Liebieghaus (3), que alberga una colecci¨®n de escultura, el de la comunicaci¨®n (4), el de arquitectura (5), el del cine (6) y el St?del (7) (todos cierran los lunes). En el St?del Museum (Schaumainkai, 63, de 10 a 18) nos detenemos en los cuadros expresionistas de Kirchner y de Otto Dix, o en el autorretrato de la pintora Ottilie W. Roederstein, por no mencionar la colecci¨®n de fotograf¨ªa. Luego, al salir del museo conviene rodearlo por la D¨¹rerstra?e para ver el patio cubierto de c¨¦sped y los tragaluces de las nuevas salas dedicadas al arte contempor¨¢neo. Esta ampliaci¨®n de 2.600 metros cuadrados en el subsuelo, obra de los arquitectos Schneider+Schumacher, supon¨ªa un importante problema de financiaci¨®n, ya que ninguna instituci¨®n estaba interesada en pagar por algo que no se ve¨ªa. Los ciudadanos de Fr¨¢ncfort contribuyeron a solucionar el problema comprando masivamente una edici¨®n de miles de botas de agua amarillas lanzada por el St?del.
13.30 Adorno y el queso con cebolla
Contempor¨¢neo del arquitecto Ernst May, Theodor Adorno, fil¨®sofo y compositor, nace tambi¨¦n en Fr¨¢ncfort, y el rechazo a los totalitarismos marca la trayectoria de ambos. Para el Adorno compositor, la m¨²sica no era algo domesticado por la industria cultural, sino una nueva arquitectura arm¨®nica y de poca melod¨ªa. A esta idea se refer¨ªa con una frase: ¡°Se trata solo de m¨²sica y no de Handk?s mit Musik [queso con cebolla]¡±. Este es el plato obligado en Fr¨¢ncfort, y como ya se estar¨¢ haciendo tarde para comer en Alemania, podemos dejarnos caer en una sencilla taberna, la Apfelwein Kunze (8), en Bockenheimer Landstr., 87, y pedir este plato t¨ªpico, al que hac¨ªa alusi¨®n Adorno. La taberna queda a un tiro de piedra del Instituto de Investigaciones Sociol¨®gicas (9) (Senckerberganlage, 26), sede de la Escuela de Fr¨¢ncfort.
15.00 Caf¨¦, Goethe y otros museos
Para tomar caf¨¦ recomiendo el Opern Caf¨¦ (10),junto a la Alte Oper (Opernplatz, 1). No muy lejos, en Gro?er Hirschgraben, 23, est¨¢ la casa en la que naci¨® Wolfgang Goethe (11) en 1749, donde puede verse la colecci¨®n de pinturas de su padre, as¨ª como otros cuadros de pintores contempor¨¢neos del escritor, uno de ellos Caspar David Friedrich. Si todav¨ªa hay tiempo y ganas de alg¨²n otro museo, Fr¨¢ncfort sigue ofreci¨¦ndolos. Por ejemplo, cerca de la catedral, tenemos el MMK (12) de arte contempor¨¢neo (Domstra?e, 10, hasta las 18.00; los mi¨¦rcoles, hasta las 20.00), el Schirn Museum (13) o el Frankfurt Kunstverein (14) (ambos de 10.00 a 19.00), que dirigi¨® la espa?ola Chus Mart¨ªnez antes de ser la directora art¨ªstica de la reciente Documenta 13 en Kassel.
19.00 Mil ¡®skaters¡¯
El Banco Central Europeo y el Banco Federal Alem¨¢n tienen su sede en la Main Tower (15), el ¨²nico rascacielos visitable (Neue Mainzer Stra?e, 52, metro Taunusanlage, abre a las 10.00 y cierra, seg¨²n la temporada, entre las 19.00 y las 23.00). A los pies de este rascacielos, en la plaza, est¨¢ la gran escultura del euro que vemos en los telediarios. El movimiento anticapitalista Blockupy ocup¨® este lugar durante varios meses hasta agosto pasado, cuando fueron desalojados por la polic¨ªa, siendo acogidos acto seguido por los organizadores de la Documenta 13. Luego podremos dar un paseo por la calle R?merberg (16), destruida y reconstruida, y lo ¨²nico que queda de m¨¢s de mil edificios del barrio g¨®tico desaparecido m¨¢s grande de la Europa Central, y donde en alg¨²n lugar encontraremos una placa en el suelo que nos habla de la quema de libros por los nazis en 1933. Pero la historia contin¨²a y si es martes, en Fr¨¢ncfort, podemos vernos sorprendidos por m¨¢s de mil skaters que se citan a las 20.00 en Frankensteiner Platz (17), en el distrito de Sachsenhausen, para luego cruzar la ciudad acompa?ados por la polic¨ªa hasta las 23.00.
21.00 Brindis junto al Main
Un restaurante de la ciudad lleva el nombre de la arquitecta que dise?¨® la mencionada cocina de Fr¨¢ncfort. Durante la Feria del Libro conviene reservar (Braubachstra?e, 18, tel¨¦fono 00 49 69 13 06 65 00). El restaurante Margarete (18) cuenta adem¨¢s con una sala de exposiciones. Despu¨¦s de la cena no es mala idea ir a disfrutar de la belleza nocturna del Main, con una botella de proseco caminando a lo largo del r¨ªo para brindar por el pensamiento cr¨ªtico en el Eiserner Steg (puente de hierro) (19), construido en 1868 en estilo neog¨®tico y tambi¨¦n reconstruido.
? Darya von Berner es artista
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