El coraz¨®n verde del Mato Grosso

Tiene cascadas, pero no es Foz de Iguaz¨². Tiene una amplia vegetaci¨®n y sitios paleontol¨®gicos, pero no es la Amazonia. El parque nacional de la Chapada dos Guimar?es, en el estado de Mato Grosso, uno de los espacios naturales protegidos m¨¢s grandes de Brasil, es un destino ecotur¨ªstico concurrido en verano. En sus 330 kil¨®metros cuadrados de extensi¨®n se esconden 400 cascadas, que invitan a ser descubiertas por turistas dispuestos a patear para buscarlas. Las infraestructuras son mejorables, pero la aventura est¨¢ asegurada.

Las placas tect¨®nicas que sostienen la Chapada dos Guimar?es ¡ªa una altura de 811 metros¡ª se encuentran entre las m¨¢s antiguas del planeta. Los paredones anaranjados cubiertos de verde son su tarjeta postal y ejemplares de la ¡°vegetaci¨®n del cerrado¡±, como se denomina la sabana brasile?a. Las rutas tur¨ªsticas duran entre cuatro y seis horas y representan la ¨²nica forma de conocer el interior del parque. Solo est¨¢ permitido entrar con un gu¨ªa autorizado. Son pocos los puntos de inter¨¦s que se pueden ver sin necesidad de apuntarse a un recorrido oficial, como por ejemplo el V¨¦u de Noiva (el velo de novia), una ca¨ªda de 86 metros que se aprecia desde un mirador a unos diez minutos de caminata desde la entrada del parque.

El circuito de las cascadas

El camino hacia las cascadas (ocho kil¨®metros, cuatro horas de duraci¨®n y nivel de dificultad medio) se hace sobre caminos de tierra roja, entre ¨¢rboles retorcidos y el barullo de p¨¢jaros y monos. Entre subidas y descensos (hay que ir con cuidado y con zapatos adecuados), se escucha el ruido del agua. El trayecto prev¨¦ la parada en cinco cascadas: Andorinhas, Pulo, Prainha, Degrau y Sete de Setembro, todas aptas para un ba?o. La vuelta se hace menos dura porque uno se detiene en la gruta Casa de Pedra, una formaci¨®n que se asemeja a una casa de rocas, con techo, puerta de entrada y sal¨®n principal.

La ruta de las cuevas

La gran cueva de Aroe Jari ¡ªmorada de almas en la lengua ind¨ªgena bororo¡ª y su bella laguna Azul son el destino de otra ruta guiada (10 kil¨®metros de caminatas, nivel de dificultad bajo y unas cinco horas de duraci¨®n). Aunque actualmente en esta amplia cavidad ¡ªuna especie de sala de un kil¨®metro y medio de extensi¨®n y 10 metros de altura¡ª solo se ven mariposas de mil colores, el lugar guarda se?ales de que un d¨ªa fue habitado. Las pinturas primitivas a¨²n decoran las piedras de la entrada. En d¨ªas de mucha claridad, el techo se vuelve dorado y el azul del agua gana distintos tonos. No est¨¢ permitido el ba?o, pero en ¨¦poca de sequ¨ªa se puede caminar casi por toda la cueva. Es importante usar zapatos cerrados y altos, ya que entre las hojas del suelo pueden aparecer peque?as culebras.

Monte S?o Jer?nimo

La ruta senderista cl¨¢sica (15 kil¨®metros, nivel de dificultad alto y seis horas de duraci¨®n) comienza con una larga caminata por una gran planicie casi sin sombra. Despu¨¦s de unas dos horas llega el momento de escalar el monte para llegar al punto m¨¢s alto de la Chapada. El esfuerzo se ve compensado por una impresionante vista y un horizonte sobrevolado por aves como el juruva, del tama?o de un papagayo, con el pecho naranja, tonos de azul y verde en las plumas y un antifaz negro.

El valle del r¨ªo Claro

Otra excursi¨®n (de unas cuatro horas de duraci¨®n) recorre 37 kil¨®metros parque adentro; aunque solo 3,5 de ellos se superan a pie, el resto se hace en veh¨ªculo. Hace falta un coche con tracci¨®n 4u4, ya que durante el trayecto se cruza el r¨ªo en varios puntos. Las paredes verticales t¨ªpicas de la Chapada se vuelven enormes al caminar por su base. El recorrido en coche alcanza la formaci¨®n rocosa Cresta de Gallo, donde se puede tener una vista de las zonas bajas del parque. El r¨ªo Claro, como el nombre deja adivinar, es un naciente transparente en el que no hace falta gafas de buceo para apreciar los peces. Para no contaminar las aguas, est¨¢ prohibido usar repelente o protector solar a la hora de ba?arse.

Diversi¨®n en Nobres

Si la estancia en la zona de Chapada dos Guimar?es supera los cuatro d¨ªas, es interesante acercarse en un par de horas de viaje en coche al pueblo de Nobres, un para¨ªso de aguas transparentes, descensos en flotadores por los r¨ªos y deportes de naturaleza.

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