Boston: Cuando JFK era el travieso Jack

Casa de nacimiento de John F. Kennedy (83 Beals Street, Brookline)

Jack naci¨® en el dormitorio de sus padres en el segundo piso de esta casa y vivi¨® aqu¨ª hasta que tuvo tres a?os. Los padres del presidente, Joseph y Rose Kennedy, compraron esta vivienda en 1914 al regresar de su luna de miel y prefirieron no quedarse a vivir en Boston y mudarse a Brookline porque ¨¦ste era un suburbio en expansi¨®n y aqu¨ª podr¨ªan tener m¨¢s espacio para su familia, que llegar¨ªa a incluir cuatro hijos y cinco hijas. La casa est¨¢ muy cerca de Coolidge Corner, que a d¨ªa de hoy es un animado barrio lleno de comercios, bares y restaurantes. Por aquel entonces, la zona estaba bien conectada con el centro de Boston gracias al tranv¨ªa.

Los Kennedy vivieron en esta casa durante seis a?os y tuvieron a sus primeros cuatro hijos aqu¨ª. Aunque en aquella ¨¦poca el patriarca todav¨ªa no hab¨ªa ganado la fortuna que ganar¨ªa en el futuro, su casa, aunque bastante modesta para una familia de su tama?o, ya era mucho m¨¢s moderna que las otras y en ella viv¨ªan dos empleadas del hogar. Hoy podemos visitar la vivienda e imaginarnos c¨®mo transcurrieron los primeros a?os del peque?o JFK all¨ª. La madre de Jack recompr¨® la casa despu¨¦s de que su hijo fuera asesinado y la redecor¨® haci¨¦ndose valer de su memoria. Algunos de los muebles son originales, pero no todos.

En el comedor vemos la mesa y sillas de ni?os en las que los m¨¢s peque?os de la familia sol¨ªan comer hasta que ten¨ªan unos seis a?os. En la mesa de los mayores se les invitaba a dialogar. En la habitaci¨®n contigua est¨¢ el piano que aprendieron a tocar y en el piso de arriba sus dormitorios. En la habitaci¨®n de los ni?os vemos la peque?a cuna en la que durmieron Jack y todos sus hermanos y hermanas, y seg¨²n el ¡®ranger¡¯ que nos hace de gu¨ªa (la casa forma parte de la red de parques nacionales del pa¨ªs) tambi¨¦n utilizaron los hijos de JFK, el malogrado JFK Junior (o John-John como era m¨¢s conocido) y Caroline.

De peque?o Jack sol¨ªa estar enfermo muy a menudo y por eso ten¨ªa que pasar d¨ªas, incluso semanas, en su cama. Fue all¨ª donde empez¨® a cultivar su pasi¨®n por la lectura. En el dormitorio vemos dos de sus libros preferidos: 'El Rey Arturo y sus caballeros' (por ello se refer¨ªa a su presidencia como Camelot) y 'Billy Whiskers', que trata sobre las aventuras de una cabra.

¡°Aqu¨ª fuimos felices, y aunque no sab¨ªamos lo que nos pasar¨ªa m¨¢s adelante, est¨¢bamos entusiasmados y optimistas acerca del futuro¡±, dice la voz de Rose Kennedy en un mensaje grabado que se puede escuchar en la casa.

Segundo hogar de los Kennedy en 51 Abbottsford Road, Brookline

En el a?o 1920 el padre de JFK hab¨ªa prosperado en sus negocios y la familia decidi¨® mudarse a una casa m¨¢s grande situada tan s¨®lo a un par de calles de la calle Beals, pero en un barrio de gente m¨¢s adinerada. A d¨ªa de hoy la casa est¨¢ en manos privadas, pero con un poco de suerte el actual due?o os puede invitar a pasar y verla cuando est¨¦is en frente escuchando las palabras del ¡®ranger¡¯ que narra la ruta por el barrio del presidente. En 1927 los Kennedy se mudaron a Bronxville, en el estado de Nueva York.

Iglesia Saint Aidan (207 Freeman Street, Brookline)

La madre de JFK sol¨ªa salir a pasear todos los d¨ªas y le gustaba llevar a los ni?os a esta iglesia, donde Jack fue bautizado. Dec¨ªa que ir a la iglesia no ten¨ªa que ser cosa ¨²nicamente de los domingos.

Edward Devotion School (347 Harvard Street, Brookline)

Al principio, los ni?os Kennedy fueron a esta escuela p¨²blica de su barrio, que hoy sigue funcionando. Pero al hacerse m¨¢s ricos y ganar estatus, su padre los traslad¨® a una escuela privada solo para chicos.

Dexter School (por aquel entonces en 175 Freeman Street, Brookline)

En 1924 Jack y su hermano mayor se trasladan a esta prestigiosa escuela de chicos. Jack y Joe eran los ¨²nicos ni?os cat¨®licos y de origen irland¨¦s de la escuela y por ello eran objeto de bromas e insultos. Su hermano mayor sol¨ªa responder a estos con pu?os, pero JFK negociaba y apostaba canicas a que su hermano ganar¨ªa la pelea. Parece ser que se hizo con una de las mejores colecciones de canicas de la escuela. A los nueve a?os Jack ya se hab¨ªa ganado el cari?o de sus compa?eros y fue elegido capit¨¢n del equipo de futbol americano de la escuela.