Bremen: 3 museos en 300 metros

Cerca de su famoso Ayuntamiento y del encantador barrio de pescadores encontramos la milla de oro cultural de Bremen. Aunque quiz¨¢ llamarlo milla sea exagerar¡­ se trata de un peque?o recorrido de apenas 300 metros. Este reducido espacio, no obstante, da mucho de s¨ª, ya que acoge los grandes tesoros art¨ªsticos de la ciudad alemana: entre la Biblioteca central y el Theater Bremen podemos encontrar tres de sus museos m¨¢s importantes.

Kunsthalle Bremen

La ciudad est¨¢ muy orgullosa de su pinacoteca: Kunsthalle Bremen. Es el museo m¨¢s antiguo de Alemania sustentado por un colectivo privado. La sociedad que dirige el museo se cre¨® hace aproximadamente 150 a?os con el objetivo de preservar la cultura ante los grandes recortes econ¨®micos promovidos por las autoridades p¨²blicas. Suena bastante actual, ?no? A d¨ªa de hoy gran parte del trabajo realizado por el personal del museo es de car¨¢cter voluntario, lo que demuestra el cari?o que la ciudad tiene a esta instituci¨®n. Tras una importante remodelaci¨®n que finaliz¨® en 2011, el museo abri¨® sus puertas con fuerzas renovadas y muchos proyectos de futuro. El?Kunsthalle Bremen est¨¢ especializado en pintura alemana y francesa del siglo XIX, pero su colecci¨®n permanente incluye obras de artistas tan variados como Masolino da Panicale, Alberto Durero, Nam June Paik o James Turrell, as¨ª como de Picasso, Beckmann o los expresionistas alemanes. Otra de las joyas del Kunsthalle Bremen es su colecci¨®n de grabados, que se encuentra entre las m¨¢s importantes de toda Alemania. Desde el a?o 2011 el museo viene prestando especial atenci¨®n a los artistas m¨¢s innovadores, a quienes dedica la planta superior del edificio, con obras de John Cage y Otto Piene. Dentro de esta apertura a las nuevas corrientes art¨ªsticas cabe destacar la instalaci¨®n Above - Between - Below, que James Turrel dise?¨® especialmente para el museo y que se encuentra integrada en los muros de parte de la fachada del edificio.

Al salir de la pinacoteca, un par de pasos nos llevar¨¢n a dos museos muy distintos, pero con misiones similares: la protecci¨®n del legado de distintos artistas alemanes y la difusi¨®n del arte entre la poblaci¨®n local. Enfrentados literalmente a ambos lados de la calle podremos encontrar la Wilhelm Wagenfeld House y la Gerhard-Marcks-Haus.

Wilhelm Wagenfeld Haus

Un edificio neocl¨¢sico acoge la Wilhelm Wagenfeld Haus, centro de exposiciones y eventos especializado en dise?o. Atenta a las m¨¢s variadas cuestiones hist¨®ricas pero con la mirada puesta en el futuro, esta instituci¨®n recibe su nombre de Wilhelm Wagenfeld (1900-1990), artista cuya obra ejemplifica el objetivo principal de este museo: acercar el dise?o a la vida real. Wagenfeld desarroll¨® productos y dise?os atemporales (de l¨¢mparas a cuberter¨ªas) muy populares entre los consumidores, continuando algunos de ellos en producci¨®n hoy en d¨ªa. Adem¨¢s de las exposiciones temporales y los eventos que se organizan en sus salas, la Fundaci¨®n Wilhelm Wagenfeld conserva una amplia colecci¨®n y un cuidado archivo de la obra de Wagenfeld.

Gerhard-Marcks-Haus

Justo enfrente de la Wilhelm Wagenfeld House se alza el museo Gerhard-Marcks-Haus dedicado a la escultura contempor¨¢nea. Objeto de un gran reconocimiento nacional e internacional, se ha consolidado a lo largo de los a?os como una importante instituci¨®n acad¨¦mica. Este museo surgi¨® en 1969 en torno a la obra de uno de los escultores alemanes m¨¢s importantes del siglo XX: Gerhard-Marcks, cuyo legado atesora la fundaci¨®n que dirige el museo y que conserva, adem¨¢s, una colecci¨®n de m¨¢s de 400 esculturas, 14.000 dibujos y 1.200 grabados. Este centro no solo celebra exposiciones especiales, sino que tambi¨¦n acoge en sus espacios tanto a cl¨¢sicos modernos de la talla de Moore, Maillol o Giacometti, como a j¨®venes talentos, demostrando as¨ª que la escultura es un arte vivo que se desarrolla y evoluciona. Cabe destacar tambi¨¦n la colecci¨®n de obras de Waldemar Grzimek y Gerhart Schreiter.

Villa Ichon

Si quedan energ¨ªas, tras la visita a estos tres museos siempre se puede echar un vistazo al centro cultural Villa Ichon, situado tambi¨¦n en esta peque?a pero bien aprovechada milla cultural. En sus salas podremos disfrutar de un variado programa que incluye diferentes actividades, entre las que destacan sus exposiciones temporales. Para terminar esta jornada cultural nada mejor que una parada en el restaurante Villa, situado dentro de Villa Ichon, para degustar una deliciosa cocina internacional. Si el tiempo acompa?a, su terraza es maravillosa.

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