La isla verde y tranquila

Verde, melanc¨®lica, tradicional. Irlanda no es un pa¨ªs para quedarse encerrado en el hotel (por mucho que llueva), ni siquiera para pasarse las horas bebiendo cervezas en uno de sus miles de pubs (por mucho que tiente). Las carreteras invitan a enfrentarse con ese litoral salvaje del condado de Connemara, con la melanc¨®lica soledad de Donegal o con los paisajes de postal de las pen¨ªnsulas del suroeste. Estas cinco rutas panor¨¢micas que apuntamos pasan por ser las mejores de Irlanda. Un aut¨¦ntico fest¨ªn para los fot¨®grafos.

01 Sky Road

Son solo 12 kil¨®metros pero suficientes para fotografiar una de las costas m¨¢s espectaculares de Irlanda. La Sky Road es un circuito cerrado en el condado de Connemara que dibuja una espectacular curva desde las afueras del municipio de Kingston hasta Clifden, siguiendo el litoral. El recorrido se puede realizar a pie o en bicicleta, aunque tambi¨¦n es posible hacerlo en coche.

Los cin¨¦filos reconocer¨¢n r¨¢pidamente el paisaje: Clifden es la capital del distrito de Connemara, en el que se rod¨® El hombre tranquilo, protagonizada por John Wayne. Esta hermosa poblaci¨®n de ¨¦poca victoriana cuenta con un conjunto de calles en forma circular que animan a dar paseos. Est¨¢ en lo alto de un cabo en la estrecha bah¨ªa en la que el r¨ªo Owenglin desemboca en el mar, enmarcada por paisajes de bosques asomados a la costa que hay que recorrer c¨¢mara en mano para no perderse nada.

Para encontrar la ruta desde Clifden hay que salir de Market Sq y dirigirse al oeste. Para dormir, el Dolphin Beach es una buena opci¨®n: una casa solariega del XIX reconvertida en un elegante B&B situado en mitad del paisaje costero de Connemara decorado con sencillez y muy agradable. Y para comer y beber, el Mullarky¡¯s, en plena calle mayor de Clifden, un alegre y t¨ªpico pub irland¨¦s que es el centro de ocio local, con m¨²sica en directo muchas noches.

02 Ring of Kerry

Todo el que visita Irlanda regresa contando que ha hecho el Ring of Kerry. Esta ruta circular es, probablemente, el circuito m¨¢s popular, largo y variado de todo el pa¨ªs, con una combinaci¨®n de pueblos, pastos verdes y paisajes costeros espectaculares. Casi imposible perd¨¦rselo.

El Ring of Kerry, un anillo de 179 kil¨®metros de carreteras, pasa por playas preciosas, islas salvajes del Atl¨¢ntico, ruinas medievales, monta?as y loughs (lagos). El tramo de costa m¨¢s escarpado se encuentra entre Waterville y Caherdaniel, en la parte suroeste de la pen¨ªnsula, pero hay zonas mucho menos visitadas que otras. Incluso en verano, cuando est¨¢ atestado de gente, el remoto Skelling Ring puede estar precioso, tranquilo y con poca gente.

El anillo se puede recorrer f¨¢cilmente en un d¨ªa, pero hay varios alojamientos a lo largo de la ruta si deseamos alargar el viaje. Killorglin y Kenmare cuentan con restaurantes excelentes; en el resto de pueblos, lo normal es encontrar comida de pub b¨¢sica. En verano, si viajamos con coche propio, conviene realizar el circuito en el sentido de las agujas del reloj (los autobuses tur¨ªsticos lo recorren en sentido contrario).

Killorglin, el punto de inicio habitual, es un pueblo muy tranquilo aunque en agosto hay una explosi¨®n de ceremonias tradicionales debido al famoso festival pagano Puck Fair. Paradas en la ruta hay tantas como uno quiera, pero resultan casi imprescindibles Caherciveen, las islas Skellig, Caherdaniel y el fuerte de piedra de Staigue. Tambi¨¦n es famosa Waterville por haber sido la localidad de veraneo de Charles Chaplin durante algunos a?os. Al sur del circuito, en Killarney, se encuentran el Castillo de Ross, los lagos de Killarney y Ladies View, un mirador desde el que la Reina Victoria asegur¨® que se contemplaban las mejores vistas de los lagos. Habr¨¢ que comprobarlo.

03 The Healy Pass

El paso Healy est¨¢ en uno de esos paisajes que uno identifica inconfundiblemente con Irlanda, aunque no nos den ni una pista. Est¨¢ en Beara, una de las pen¨ªnsulas que se adentran hacia el mar entre los condados de Cork y Kerry (en el suroeste) y que son el s¨ªmbolo de la Irlanda m¨¢s rom¨¢ntica, r¨²stica y rural. Aqu¨ª los monumentos mon¨¢sticos y celtas combinan muy bien con las paradas gastron¨®micas y con las rutas panor¨¢micas, y entre todas estas, una de las m¨¢s espectaculares es el asombroso paso de Healy: 11 kil¨®metros de carretera desde Laragh, con vistas espectaculares del interior rocoso. Un kil¨®metro al oeste de esta localidad, conduciendo por la R571, sale una carretera que lleva al lago de Ganmore, con una islita en medio: una vista imprescindible.

Estamos en una zona de carreteras preciosas, como la que sigue la costa desde Allihies hacia el norte y el este, bordeada de fucsias y rododendros y que serpentea durante 12 kil¨®metros hasta Eyeries; una gama de tonalidades brillantes que se alza sobre la hab¨ªa de Coulaghy, escenario habitual de rodajes cinematogr¨¢ficos.

Desde Eyeries, se puede dejar la R571 y tomar las peque?as carreteras costeras al norte y al este. Aqu¨ª se disfruta Beara en todo su esplendor e intimidad, con sus estupendas calas entre rocas y unas vistas al Ring of Kerry, al norte, realmente inigualables.

Merece la pena buscar en el mapa e intentar llegar a uno de los lugares m¨¢gicos de Irlanda: se trata del c¨ªrculo de piedras de Ardgroom, un inusual monumento de la Edad del Bronce formado por nueve piedras verticales al que se puede llegar por un sendero que no resulta dif¨ªcil de encontrar. Irlanda en estado puro.

04 Valle del LoughInagh

Hay quien prefiere los paisajes inh¨®spitos y sencillos a la placidez de los valles verdes y buc¨®licos. Para estos tambi¨¦n rutas y paisajes en Irlanda, como el valle del LoughInagh, donde el viento es incesante y las oscuras aguas de los lagos Drryclare e Inagh reflejan los colores del momento. Se entra en el valle desde el sur, al oeste de Recess, camino de Connemara. Por aqu¨ª oiremos todav¨ªa hablar irland¨¦s en los pubs y contemplaremos a los granjeros cortando y secando turba, como hace siglos.

En el lado oeste del lago se halla la cordillera de Twelve Bens y hacia el extremo septentrional una pista forestal conduce hacia el oeste desvi¨¢ndose de la carretera hasta llegar a un valle ciego, que merece la pena explorar.

05 Glengesh Pass

En el noroeste de Irlanda, nos espera la melancol¨ªa del condado de Donegal, llena de mito y folclore y con una de las naturalezas m¨¢s salvajes de todo el pa¨ªs. Aislado y con un clima que no invita precisamente a ba?arse, tiene sin embargo unas costas preciosas, ideales para el surf y unos paisajes que son el para¨ªso de cualquier fot¨®grafo.

Y es aqu¨ª donde encontramos otra de esas rutas de quitar el hipo: se trata del Glengesh Pass (que en irland¨¦s significa ca?ada de los Cisnes). Para encontrarlo hay que ir a la min¨²scula Maghery, y desde all¨ª, a un kil¨®metro y medio al este encontraremos la cascada de Assarancagh. Justo detr¨¢s empieza el sendero se?alizado de 10 kil¨®metros que conduce al Glegesh Pass. De apariencia casi alpina, caminaremos entre monta?as y frondosos valles con granjas desperdigadas y peque?os lagos. Si se va en coche o en bici se puede llegar al puerto de monta?a directamente desde Glencolumbcille, siguiendo las se?ales de la carretera de Ardara.

M¨¢s informaci¨®n en la gu¨ªa Lonely Planet Lo mejor de Irlanda y en www.lonelyplanet.es

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